miércoles, 4 de septiembre de 2013

LA CRISIS DEL MAGREB Y DE LIBIA POR SER JAMAHIRIYA: CRISIS DEL AFRICA TOTAL Y DEL MUNDO ANTE EL IMPERIALISMO VORAZ

Pablo R. Carvajal R.

En principio, este documento primero, lo redacté el mismo día en que fue tomada la decisión de la Resolución 1973 por los miembros del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas. Y en segundo lugar este documento lo envié en lo inmediato a los presidentes de los gobiernos de Rusia y de China, como así de Brasil, -mediante sus embajadores aquí en Venezuela-, gobiernos cuyas representaciones se abstuvieron con sus votos en el seno de la reunión del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas, realizada el 18 de marzo del 2011, en la que ese Consejo de Seguridad criminal aprobó el asalto de invasión armada contra la soberanía y vida del pueblo de la república de Libia. Y como les expongo a los embajadores de Rusia y de China en comunicación enviada, el objeto de este documento es una advertencia a dichos gobernantes sobre graves amenazas y riesgos de pérdidas de posiciones estratégicas a largo plazo ante el imperialismo norteamericano-europeo, implícitas en esa decisión de abstención desafortunada de parte de sus gobiernos actuales. También, a manera de notificación, se lo he enviado al camarada presidente Hugo Chávez y a la cancillería de Venezuela, a los objetos.
Por lo demás, lo impactante a la conciencia humana  es la indiferencia e indolencia, pusilánime  y cómplice,  de la gran mayoría de los más de 180 países pobres del mundo agrupados en la ONU, que guardan silencio cobarde ante ese bombardeo y matanza despiadada y descarada del imperialismo norteamericano-europeo contra el pueblo de Libia, como así contra Irak y Afganistán. Y de ello, ¿Qué posibilidad tienen esos mismos pueblos o naciones que guardan tan cobarde silencio,  de no ser invadidos  y atacados militarmente por ese imperialismo norteamericano-europeo que se cree dueño absoluto de las naciones, del planeta y del mundo?. Guardar silencio complaciente y cobarde ante quienes irrespetan y violan el derecho a la vida independiente y soberana de las demás naciones y los pueblos, es grabar y guardar en el sí mismo de su alma su espernible y envilecida muerte.

 La gran crisis que estremece al Magreb árabe -y la que, en el fondo, se corresponde con la de todo el gran continente africano-, a nuestro juicio tiene tres grandes contradicciones componentes las que, entremezcladas históricamente, revientan de forma incontenible e inevitable en plan de soluciones conflictivas  con agresiones y violencias justas e injustas que no presentan soluciones estables para esos pueblos. Esto es,  violencias justas, de liberación, de las grandes mayorías de pueblos explotados y oprimidos como alternativa única de respuesta ante las agresiones y violencias de los gobernantes explotadores y opresores nacionales y extranjeros occidentales, las que, a su vez, son tomadas por las estructuras de poderes mundiales del imperialismo norteamericano-europeo para ejercer más acciones de agresión y de violencia contra esos pueblos, y ese es el caso de la estrategia de la lucha contra “el Terrorismo Internacional“ como doctrina del imperialismo capitalista. En esto exponemos en nuestro parecer cuáles son los tres supuestos factores componentes históricos de la mencionada crisis de los pueblos africanos que revienta con la del Magreb árabe, y que concluye, como solución estratégica inmediata del imperialismo norteamericano-europeo, con la invasión contra el pueblo y gobierno de Libia, y que apunta a su vez, directa e inmediatamente, contra Siria e Irán, para luego ir contra Rusia y, en su parte más mediata del siglo XXI, contra China:
1.- Uno es el estado y condición de depauperación histórica de la vida de los grandes contingentes poblacionales del continente africano, con desempleo, miseria, hambrunas y enfermedades masivas crecientes. A este factor condicional de la vida general de los pueblos no escapa ninguna de aquellas naciones del Medio Oriente ricas en recursos naturales, entre ellos el petróleo, con excepción de Libia.
2.- Otro factor de contradicción es el de la invasión histórica de las estructuras de poderes de dominación del capitalismo. Invasión militar y política de la cultura occidental con depredación territorial y mental de esos pueblos, la que ha influido de manera directa y determinante en cuanto a las formas de la organización institucional jurídica-política del Estado y la sociedad africana, determinando el estado de miseria y depauperación económica creciente con explotación y expoliación capitalista de la vida de esos pueblos como un hecho inevitable de sus vidas.
3.- Y el último lo constituye el carácter propio, primero, de sus variadas organizaciones institucionales –patriarcales que denominan occidentalmente “anárquicas” o de las “jefaturas tribales” constituidas por familias patriarcales como la de los Hachemita- con modos distintos de sus formas de producción y de vida propios de la vida ancestral de esos pueblos; segundo, el añadido y entremezclado occidental indistinguible de las estructuras de poderes de dominación de clase de esos pueblos, en el que se incluye el nacionalismo panafricano y, por excelencia, panárabe, como fundamento de respuesta ideológica cultural contra y a favor de la invasión y dominación imperial capitalista sostenidas por muchos de los actuales gobernantes  de esos países –como son los casos de Arabia Saudita, de Bahrein de Túnez y otros que se expresan en el Consejo de la Unión de Estados Africanos y la Liga de Estados Árabes. En esto, casi todos los altos gobernantes de los países árabe-africanos han realizados estudios de especializaciones en las más prestigiadas universidades europeas; de manera que sus modos de vida imposturados son a la moda europea, y mentalmente responde a esa cultura en la materia política, en contra posición a la visión ancestral de sus pueblos, de sus gentes, con los que no tienen ninguna relación de vida cotidiana. A esto lo denomino “el síndrome árabe-africano”.
El primer factor de contradicción se corresponde con todos los andamiajes y maderámenes del orden económico, comercial y financiero capitalista y con las determinaciones del orden jurídico, político, militar e  institucional estructural del segundo gran factor, generador de los conflictos en ese continente. En este orden, ya de suyo, durante finales del  siglo XIX y durante todo el XX, tanto los ingleses como los franceses, los portugueses y los belgas, entre otros, cometieron un enorme saqueo y expoliación de las riquezas naturales de muchos de los países africanos y los sometieron a esclavitud. El desarrollo económico industrial-productivo y comercial del sistema en gran parte de Europa y de los Estados Unidos se sostuvo y fortaleció a costa de bienes y recursos naturales de los pueblos africanos y sobre el trabajo esclavo de sus gentes.  Por ejemplo, ya en 1908 en Nigeria el consorcio alemán/inglés Shell/D’Arcy –transformado luego en la British Petroleum- tenía una concesión petrolera que cubría todo el territorio nigeriano con 103.600 km2. Por consiguiente, de 1900 a 1970 todo el mapa del continente de África fue trazado por las determinaciones de intereses de Europa y los Estados Unidos como potencias imperiales en los ricos territorios de ese continente para expoliación de sus recursos, sus bienes y la esclavitud de sus gentes, de mediados del siglo XIX hasta la fecha.  
De manera que las secuelas históricas dejadas por ese gigantesco proceso de explotación y expoliación de todas esas más de cuarenta y tantas naciones africanas, con resultas de envilecimiento y miserias y hambres masivas, secuelas definidas y profundizadas por los efectos que causan en la actualidad las enormes crisis y recensiones económicas, financieras y comerciales de Europa y los Estados Unidos con influencia mundial,  pesan mucho más aún sobre esas naciones y pueblos africanos, agudizando al máximo sus conflictos políticos y socioeconómicos, los que ya inaguantables para las grandes mayorías desamparadas, explotan en el paroxismo de su desesperación, como ocurre con los del Magreb, especialmente en Túnez, Argelia, Marruecos y Saharaui, Egipto y Bahréin.
El segundo componente de contradicciones y conflictos, el de la invasión político-militar –económica y religiosa-cultural occidental, pesa con sus mecanismos de contradicciones empezando con las desarticulaciones de sus límites y fronteras naturales de las distintas nacionalidades africanas hecha por los invasores, en contraposición con el carácter de su cultura tribal. La violatoria injerencia de las potencias coloniales europeas como así la norteamericana, ha impuesto la desintegración de las comunidades nacionales en sus territorios, dividiéndolos en una multitud de pequeños Estados como en los casos de Nigeria con Biafra, Irak con Qatar y Arabia Saudí con Bahrein, y recién últimamente con Sudán del Sur respecto a Sudán, uno de los países más extensos en el territorio del África, entre otros muchos, y con ello los ha desarraigado como comunidades hermanas, llevándolas a enfrentarse unas contra otras en estado de guerra permanente, no en aras y en pos de intereses propios sino de intereses extranjeros, como fueron  los casos de la guerra de  Nigeria en contra del Estado separatista de Biafra, con sangrienta guerra en la que directamente intervino el consorcio Shell/BP;  y del mismo modo,  el enfrentamiento de Irak contra Irán en una guerra que duró unos ocho años.
Sintomático es el caso del jeque Shakhbut quien en 1966 fue derrocado por su hermano, el jeque Zaid, instigado por el gobierno británico, el que luego se apoderó de la riqueza petrolera de los Emiratos Árabes. El jeque Shakhbut tenía conciencia de los recursos petroleros con los que contaba su país, por cuanto incluso él era un buen gobernante,  y por lo que él buscaba a toda costa no alterar la vida climática ni de los paisajes de sus tierras, dada la economía del desierto acostumbrada de sus gentes. Sin embargo, Shakhbut no pudo librarse de la intriga monstruosa del imperialismo inglés conjuntamente con el gobierno de Francia respecto a las ambiciones de su propio hermano,  y allí se metieron depredadoramente la British Petroleum y la Compagnie Française des Pètroles a llevarse los hidrocarburos y demás riquezas naturales a Inglaterra y a Francia, sembrando a su vez el desarraigo entre sus gentes contra su propia cultura ancestral.
Sin embargo, la penetración en plan de invasión política, económica y comercial no sólo queda en el hecho de tomar los recursos naturales por parte de esas potencias imperiales y trasladarlas a sus países de origen, cuales bienes económicos sobre los que se asienta por contrato una propiedad privada; por supuesto que no queda solamente ahí. El hecho de la invasión imperial –que es el mero centro medular de la gran contradicción principal de los pueblos africanos como así la de todos los demás del mundo- toma vías que trascienden lo contractual como formalidad jurídica mera para arribar y quedar como propiedad de propiedad en la espiritualidad ética de la cultura ancestral de todos esas nacionalidades, como componente básico del poder de dominación extranjera en todos los contextos sociales-humanos de los pueblos africanos. En esto, es determinantemente aplastante la irradiación mental invasora de la cultura occidental que, a términos de destruirles a los jóvenes africanos la espiritualidad de sus ancestros los lleva a la degradación de manipularlos burdamente con sus valores de “democracia”, “libertad” y con esos símbolos del mass-media y de telemática (computadores, tele videos). De tal manera que, con sus ONG, a fuerza de realazos los envilece manejándolos con sus “redes sociales” como a viles muñecos. Y éste sí es realmente el núcleo central-medular de la gran contradicción que conforma el poderoso despliegue de la gran crisis que atraviesan los pueblos del Magreb árabe. Tan medular es porque toda la estructura del poder político y militar de los más de cincuenta Estados nacionales de África están totalmente diseñados a imagen y semejanza de la estructura del poder político y militar de dominación imperialista norteamericana-europea, para someter a los pueblos bajo términos de una dictadura de clase capitalista eterna, especialmente los del Magreb por estar en la zona del mar mediterráneo.  
El tercer factor de gran contradicción del conflicto en la región del Magreb, cual lo constituye el carácter propio, primero, de sus variadas organizaciones institucionales –patriarcales que denominan “anárquicas” o de las “jefaturas”- con modos distintos de producción y de vida; segundo, el añadido y entremezclado occidental  de las estructuras de dominación de clase de esos pueblos constituidos generalmente por los más pudientes en los mandos políticos y económicos de propietarios privados, en el que se incluye el nacionalismo panafricano y, por excelencia, panárabe, muchos desviados como fundamento de respuesta ideológica cultural contra la invasión de  dominación imperial capitalista, y que luego se han puesto servilmente a favor de dicha dominación, como fue el caso de Hosni Mubarak con su procedencia nacionalista-nasserista. Este factor de contradicciones constituye un extraordinario y rico complejo de emanaciones mentales en los que cada pueblo como unidad nacional se ve en la situación de ser el representante múltiple de lo africano, y en este estado de coyuntura histórica, a su vez, cada individuo también lo es, sin poder llegar a situarse en el contexto de su propia racionalidad histórica de pueblo no limitado por fronteras.
Este hecho del desarraigo con tan pronunciada carencia de un sentimiento ancestral de patria grande es tan determinante que, por ejemplo, ante las perversas manipulaciones de la corporación multinacional Royal Dutch Shell, luego de lograda la independencia de Nigeria, el general Ironsi que era de la tribu de los Ibos –quien había dado un golpe de Estado en el que murió Abubakr T. Balewa , jefe del partido NPC-, persuadido de crear un fuerte sentido de solidaridad nacional, intentó la unificación nacional de Nigeria, y más bien despertó un movimiento de rechazo y de odio de los otros grupos tribales manipulados por el grupo Shell/BP (los yorubas, los Hausas, los Angas y los Fulani) contra los Ibos, que se extendió con la cruenta guerra de Biafra hasta llegar a su separación definitiva como Estado independiente en 1967, lo buscado y logrado por la multinacional Shell/BP.
Así también ocurrió con el movimiento los “Mau Mau” de la tribu los Kikuyu en Kenya quienes, en principio, utilizando antiguos rituales para determinar un rechazo total a las formas sociales y religiosas europeas, se enfrentaron férreamente contra  dichos blancos europeos y al final, por la manipulación de los europeos a otras tribus contrarias a los Kikuyu, el enfrentamiento se tornó sólo entre negros africanos, y únicamente 95 europeos murieron en el proceso; en tanto, 11.503 Kikuyu fueron asesinados, y unos 165.000 de los mismos Kikuyu fueron detenidos y sometidos a brutal represión. Cabe observar que los Kikuyu eran muchos más conscientes de su situación y condición histórica que quienes como africanos los enfrentaron defendiendo a los europeos. He aquí el síndrome árabe- africano.  
Por eso, ante esta indiferenciabilidad, digamos, psíquica-occidental de los jefes tribales, el panafricanismo en el cuerpo del nacionalismo no ha encontrado norte fijo. Desaparecidos Jomo Kenyatta de Kenya,   Nkrumah y Cabral, con la muerte de Nasser y el lamentable abandono –por  ceder a la enorme presión ejercida por el imperio- del corone Gaddafi, el nacionalismo árabe no tiene norte hacia el cual dirigirse en su desarrollo de cuerpo teórico y práctico de liberación africana. La representación del yihad cual “guerra santa” tiene mucho más de negocio político CM (Corporation Military) que se presta al servicio de cualquier postor del imperio, al mismo uso de alqaeda creada por la CIA. Y en el plan espiritual la única esencia de referencia mental que les queda es la del Islam de la izquierda, que es el caso de Irán como así en otras expresiones nacionales del Medio oriente. El imperialismo norteamericano-europeo ha desvirtuado y pervertido las luchas nacionalistas y de liberación de los pueblos árabe-africanos, como así lo ha hecho en todos los planos geográficos del planeta con los movimientos de izquierda revolucionaria.
Por eso he allí que, en general,  el Islam como pie espiritual de los pueblos africanos, también como el nacionalismo, se encuentra oscilante entre seguir el camino de la liberación o el de la opresión colonizadora occidental de sus gobiernos, como es el caso del de arabia saudita e incluso regresar al viejo estilo de servidumbre directa a occidente, que es el caso de los sanusíes en Libia, reminiscencia de cofradía musulmana tribal, la que responde a los imperialistas occidentales. Precisamente, en esta forma extraña en el pasado, manteniendo su postura pro-occidental y obedeciendo al imperio norteamericano-europeo,  en el marco de las relaciones exteriores, el rey Idris, a quien Muammar Gaddafi sacó del poder, ayudó a los combatientes nacionalistas de Argel para que obtuvieran su independencia del coloniaje francés.
Sobre ese terreno contradictoriamente complejo, movedizo y confuso por lo conflictivo en plan de contradicciones sistemáticas propias del capitalismo, se asienta la gran crisis múltiple de Túnez, Egipto, Bahréin, Marruecos, Argelia, etc., gran crisis que, con la perversa manipulación imperialista mediante su desinformación mediática, apunta con el mismo sentido de la dominación imperial, a  resolverse momentáneamente –como lo están buscando los europeos y norteamericanos- con la invasión criminal de Estados Unidos, Francia, Inglaterra y otras contra la República de Libia y, especialmente, contra Gaddafi, para apoderarse de sus recursos y repartírselos como producto de botín, entre hampones.                                        
En este terreno vale la pena recordar algunos hechos muy importantes, entre los que destaca la participación estelar del Coronel Muammar Al Gaddafi con anterioridad.
A finales de la década de los años sesenta, en 1969, exactamente, cuando Muammar Al Gaddafi accedió al gobierno de Libia mediante un golpe de Estado que él dirigió contra el rey Idris I, quien antes fuera jeque y emir de Cirenaica, y a quien por su colaboración con los aliados en la Segunda Guerra Mundial, la ONU concedió la independencia a Libia dejándola en sus manos cual Reino de Libia. Para entonces, eran las compañías multinacionales extractoras del crudo las que imponían los precios del petróleo, cual el Mercado Spot, mercado que tenía una hegemonía imperial tal que todos los Estados nacionales tenían que arrodillarse a sus pies. Desde luego, este es un hecho que hoy no se recuerda para nada, porque la guerra sucia de los medios de comunicación del imperio intenta borrarlos de la memoria histórica de los pueblos.
Por supuesto, Gaddafi como joven oficial era nacionalista de izquierda y admirador de Gamal Abdel Nasser, a quien intentó seguir en su pensamiento revolucionario. Al respecto, al tomar el gobierno en Libia, procedió a realizar una serie de medidas de corte revolucionario y de liberación anticapitalista para la época, entre otras: promulgó una Constitución provisional e instaló un Consejo de la Revolución del que era presidente; nacionalizó la banca y el Estado se reservó 51% de las acciones. Con la amenaza de retirar las licencias de explotación de las compañías multinacionales que operaban en Libia, logró rescatar por primera vez  y de manera ejemplar para todos los países sometidos a opresión imperialista,  el derecho del Estado libio a determinar los precios de su petróleo.  A mediados de 1973, nacionalizó 51% del capital de todas las compañías extranjeras que operaban en el país. A este respecto, hago la observación de que esa medida tomada correctamente por el Coronel Gaddafi constituye una pauta de nacionalización y liberación nacional contra el capitalismo muy importante a seguir por cualquier país en su propio estado de transición hacia el socialismo, como es el caso de Venezuela. El Coronel Gaddafi Instó también, en plan de soberanía nacional plena, a los gobiernos de Inglaterra y los Estados Unidos a que retiraran sus bases militares enclavadas en territorio libio. Se confiscaron los bienes de aquellos magnates italianos e israelíes que habían abandonado el país después de 1961. Luego, conjuntamente con Nasser, el Coronel Gaddafi intentó construir la unidad geopolítica de la nación árabe (panarabismo). Y así, con Siria, Egipto y Libia logró establecerse una alianza para la conformación de la Alianza Africana, ente de duración efímera. En 1981 se rompieron las relaciones diplomáticas entre Libia y los Estados Unidos. Ronald Reagan prohibió los viajes a Libia y cerró su embajada en Washington. En 1982,  el gobierno norteamericano prohibió las importaciones de petróleo de Libia y, a su vez, cerró toda exportación de producto a Libia. El 15 de abril de 1986, las ciudades de Bengasi y Trípoli fueron bombardeadas por el gobierno de los Estados Unidos, hecho en el cual murió una hija menor de Gaddafi. También fueron bombardeados los aeropuertos de Trípoli, los cuarteles de Al Aziziyah, sede de las fuerzas aéreas, el puerto militar de Sidi Balal y la base aérea de Benina. En ese mismo año se produce un atentado en la discoteca “La Belle” en Berlín, Alemania, que es relacionado con el gobierno libio.
En 1988, se relaciona a dos agentes del gobierno libio con el atentado de un avión estadounidense de Pan Am, cuando sobrevolaba Lockierbie en Escocia. Murieron 270 personas, entre ellas 189 norteamericanos. En 1989, se relaciona al gobierno libio con la bomba que estalló en un DC-10 de la compañía UTA, cuando sobrevolaba el desierto de Níger, el 19 de septiembre del mismo año. En enero de 1992, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la Resolución 731 que exigía la entrega de 6 acusados por los atentados ya señalados.
Dos meses después, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la Resolución 748 en la que se establecía el bloqueo aéreo total contra Libia y, además, embargo de armas, en tanto no se aprobara la anterior Resolución.
El 11 de noviembre de 1993, la ONU aprobó medidas de sanciones económicas contra Libia. Esta Resolución, la 883, imponía cierre de oficinas de las líneas aéreas libias en el extranjero, la congelación de sus recursos financieros en bancos extranjeros y la reducción de personal diplomático. En 1996, el Congreso de los Estados Unidos aprobó la ley D’Amato-Kennedy que imponía castigo a las empresas norteamericanas o extranjeras que realizaran inversiones en el sector energético  en Libia o en Irán, o que violaran el embargo impuesto por la ONU. En 1997,
Libia inicia su programa nuclear de manera secreta. Lo asesoraba el científico pakistaní Abdul Qadeer Khan. A principios de 2004, tres ingenieros de la misma  familia de Urs Tinner, su hermano Marco y Friedrich, su padre, fueron detenidos en Suiza, acusados de entregar a Libia material destinado a la fabricación de centrifugadoras para producir uranio enriquecido. La familia Tinner mantuvo contacto estrecho con Abdul Qadeer Khan,  padre de la bomba nuclear de Pakistán y jefe de una red de mercado negro que suministró a Irán y a Libia tecnología atómica. Dos empresas suizas exportaron material a Khan para realizar su proyecto nuclear en Pakistán. Por otra parte, Urs Tinner reconoció haber jugado su papel en el caso de la confiscación del material nuclear con destino a Libia, es decir, haber sido informante de la CIA. Fuentes de inteligencia estadounidense, aseguran que Urs Tinner fue reclutado por la CIA alrededor del año 2000. Las centrifugadoras que se dirigían de Malasia a Libia fueron confiscadas en el astillero de Taranto, Italia. Este hecho llevó a Gaddafi a cancelar el programa nuclear en ese mismo año de 2004.
Hasta allí llegó la posición rebelde de Muammar Gaddafi contra el orden imperial norteamericano-europeo, aflojamiento que lo llevó a aceptar el juego de presiones de la denominada “Comunidad Internacional”, en el que sirvió como ficha de muy buena bonhomía el muy simpático señor Nelson Mandela. En consecuencia Gaddafi, en abril de 1999, aceptó que Abdel Baset al Megrahi y Al Amín Jalifa Fhemah, dos supuestos agentes de su gobierno, fueren acusados por el atentado contra la Lockerbie. En tanto ese mismo día, la ONU suspendió el embargo que se había mantenido contra Libia. Luego, en 15 de abril de 1999, el gobierno libio fue invitado a la III Conferencia Euro Mediterránea de Ministros Exteriores en Alemania, Stuttgart. En julio de 1999, la cancillería de Inglaterra anunció que, tras 15 años de suspensión, reanudaría relaciones diplomáticas con Libia. Previamente el gobierno de Libia había colaborado con Inglaterra en el esclarecimiento de la muerte de una policía británico ocurrida en las puertas de la embajada en 1984.  En el mes de septiembre del mismo año 1999, los ministros de relaciones exteriores de la Unión Europea suspendieron las medidas de restricciones tomadas contra el gobierno libio. Y en diciembre de ese mismo año, el Primer Ministro del  gobierno italiano, Mássimo D’Alema, se entrevistó con Gaddafi en la propia Trípoli, entrevista de la que surgió el compromiso entre ambos gobiernos de colaboración conjunta contra el terrorismo.
Por otra parte, en marzo del año 2001 en la ciudad libia de Sirte, se constituyó la Unión Africana; en tanto en agosto de ese año, los Estados Unidos prorrogó los términos restrictivos de la Ley D’Amato por cinco años. Y luego, pues, al mes siguiente, el gobierno de Libia condenaba los ataques terroristas contra las torres gemelas de Manhattan, producidos el  11 de septiembre. Seguidamente, el gobierno libio en 28 de mayo de 2002, resarció con 2.700 millones de dólares a los familiares de las 270 víctimas en el atentado de Lockerbie; y luego, el año siguiente, aceptó la responsabilidad civil de ese atentado. El 12 de septiembre del año 2003, el Consejo de Seguridad de la ONU levantó formalmente las sanciones impuestas en 1992 contra Libia, en la se incluían el embargo aéreo, el equipamiento de armas e industrial. En esa misma fecha, el presidente del gobierno español, José María Aznar, viajó a Libia, acompañado de una delegación de altos empresarios a más de altos miembros de su gabinete ejecutivo. Dentro de los sectores empresariales se comprendían ferrocarriles, salud, educación, alimentación, turismo, construcción y petróleo, entre otros. En ello, pues, se hicieron acuerdos entre sectores empresariales españoles con sectores estatales libios, a más de los consabidos acuerdos establecidos entre ambos gobiernos a nivel estratégico. Y al mes siguiente del año 2003, el presidente norteamericano George W. Bush, hijo de quien había bombardeado a Libia en el año 1986, hacía público el anuncio de que el gobierno de Libia se comprometía a abandonar el programa nuclear en cuanto desarrollo de armas de destrucción masiva, programa y actividades biológicas, químicas, nucleares y de misiles balísticos. Y que, en consecuencia, permitiría entrar a los inspectores internacionales sin ninguna restricción.
A principios del año 2004, el gobierno libio y familiares de las 170 víctimas del atentado contra el avión de UTA francesa en 1989, en París firmaron un acuerdo de indemnización, el cual permitió el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Francia y Libia. Al mes siguiente, el gobierno norteamericano anunció el retiro de las sanciones contra Libia. Sin embargo, ¡oh hado del gran dios con su unipotente tribunal!, apenas pasados dos meses, el gobierno de Libia fue condenado nuevamente por la ONU a pagar al gobierno de Sierra Leona por la pérdida de 50.000 personas que habían perdido la vida en un conflicto armado. La Comisión para la Verdad y la Reconciliación de Sierra Leona estableció que Libia y Liberia habían adiestrado y apoyado a los rebeldes del Frente Revolucionario Unido (FRAU). Frente que, entre 1999 y 2001, desarrolló una acción armada sangrienta en la que cayeron las mencionadas 50.000 víctimas. Y, por tanto, Libia tuvo que pagar compensación al gobierno de Sierra Leona.
Por supuesto, el hecho anterior no privó en lo absoluto para que el gobierno de Libia fuese aceptado por la todopoderosa “Comunidad Internacional”. Efectivamente, el jefe del gobierno imperial de Gran Bretaña, Tony Blair, en persona dispendió visita al Coronel Muammar Al Gaddafi en su propia Libia a principios de 2004; precisamente en esa misma fecha la multinacional Shell anunció el establecimiento de un contrato petrolero con Libia.
En un proceso de poderosa presión económica, política, jurídica y militar que se continúa hasta 2008, el gobierno del Coronel Gaddafi logra, a costa de ceder a los chantajes y retrotraerse en su concepción política nacionalista y revolucionaria, por un lado zafarse de esa dicha presión y por el otro, “reivindicarse” en las apariencias de aquel su pasado rebelde y nacionalista ante “la Comunidad Internacional”, y, consiguientemente, logra establecer relaciones económicas y comerciales bajo términos eminentemente capitalistas con los grandes y poderosos de Europa y los Estados Unidos, dejando atrás, envuelto en la opresión del chantaje imperialista, toda aquella pasada y apasionada preocupación nacionalista por los grandes problemas que vive y atraviesa la región del Magreb árabe, como así toda la gran nación africana. Con esta “vindicación” de su pasado nacionalista ante “la Comunidad Internacional” el Coronel Gaddafi, pues, pasa por alto que él con todo, sigue siendo afectado (y no afecto) por el síndrome árabe-africano de las tribus que combatieron al Movimiento Mau Mau en su propio país, y que también estaba siendo objeto militar a ser tomado por el imperio, el que estaba envolviendo poco a poco dentro de sus redes para engullírselo con dicho síndrome. Este síndrome tiene ahora un aliciente nuevo que lo cataliza y hace más efectivo en aniquilamiento: el de la formación de la Unión para el Mar Mediterráneo (UPM) creado el 17 de julio de 2008, que propició y motorizó la Unión Europea, cual poderosa maquinaria de demolición de todo lo árabe políticamente organizado, por ejemplo, la del UMA, UPM creada por el imperialismo europeo con inmensa cuantía de capitales, tecnología y dominio geopolítico-militar de por medio. Y en cuya estructura de administración no contaba para nada el gobierno del coronel Gaddafi por no ser país “comunitario” –igual que Siria y Argel-, bien que él mismo haya sido uno de sus auspiciadores, incluso con reuniones en la propia Libia, Trípoli, como la del 11 de junio del mismo año. Precisamente en este hecho empieza la culminación de sus relaciones con el imperio norteamericano-europeo, porque el coronel Gaddafi cuestionó la selección arbitraria de los países del Magreb que integrarían la UPM y en la que incluyó a Israel, que hizo el imperio europeo, de manera leonina.  
Por esas razones, al occidentalizarse, obligado por la gran presión ejercida sobre él y su gobierno, en el plano de sus “nuevas” relaciones internacionales no tenía por qué asumir que esa “Comunidad Internacional”, tan omnipotente ella, -y que en la presencia del imperialismo norteamericano-europeo se cree la verdadera verdad de la historia- bien podría perdonarlo y que, sometiéndose bajo el cobijo de sus omnipotentes favores como aliado en “el combate contra el terrorismo internacional”, estaba libre de pecados y de temores. Por ello el coronel Gaddafi se equivocó: el imperialismo no perdona ni tiene piedad con nada ni nadie respecto a su determinación del poder por el poder, pues ya mucho antes de lo que podría ocurrir en el Magreb y en toda África, -tal como ha venido ocurriendo en Túnez, Argelia, Egipto, Bahrein, Marruecos, el Saharaui, Sudan y otros-,  él estaba condenado por el imperio, junto con Libia, Siria, Irak, Afganistán, Irán, Rusia y China.
En esto debemos recordar la intervención que tuvo el coronel Muammar Al Gaddafi el año 2009 en la Asamblea General de la ONU en la que acusó de manera desafiante la composición leonina del fuerte y que dominaba entre los miembros de esa injusta e írrita estructura del Consejo de Seguridad de esa dicha ONU y su funcionamiento en base a la ley de la ventaja en la que el fuerte impone su cometido a los países débiles. Ley del fuerte aplicable a miembros débiles de ese dicho Consejo de Seguridad y de la Organización de las Naciones Unidas mismas: el fuerte (el imperialismo) impone, manda, y el débil (los países pobres) obedece.
Más todavía, en el mes de noviembre, el día 29 del año próximo pasado 2010, el coronel Gaddafi, en la tercera Conferencia de la Unión Europea con representantes de la Unión de Estados Africanos celebrada en Trípoli, se lanzó con una posición nacionalista radical contra los países imperiales, y volvió a sacar a colación el manejo leonino de los Organismos multilaterales reclamando a su vez, la necesidad de una urgente reorganización democrática de esos dichos Organismo, a términos de desarrollar una nueva geopolítica internacional. Y por lo que, bien que se la llevó de maravillas con Rodríguez Zapatero, indubitablemente él mismo en ese momento quedó a su vez, determinado por el imperio capitalista como blanco y objeto militar a ser tomado en lo inmediato, no más allá mientras se disponían los Estados Unidos, Francia e Inglaterra y los otros países fuertes de Europa, a conformar los dispositivos de ataques legales con sus formulismos jurídicos en el seno del Consejo de los Derechos Humanos y en el Consejo de Seguridad ambos Organismos de la ONU, como así el acuerdo acerca de qué o cual país iniciaría los ataques.  Es decir, desde el mismo mes de noviembre y día que en el que el coronel Gaddafi pronunció su último discurso en el seno de la Unión Europea, él mismo se condenó imprudentemente a ser atacado de inmediato. Lo lamentable es que el coronel Gaddafi, al aparecer según pienso, en la emocionalidad de su antigua rebeldía y nacionalismo, actuó sin coordinación con gobiernos o movimientos de otros Estados; y pues, por eso, él se encuentra prácticamente solo y sin apoyo en el plano internacional, ante tan terribles circunstancias en la que la solidaridad de los pueblos desde abajo es la única fuerza que bien pudiere apoyarlo. Porque además, junto con todos los preparativos de andamiajes jurídicos en los Organismos multilaterales a partir del tinglado de la ONU, sus medios de comunicación masiva a nivel internacional se encargaron previa y rápidamente, aprovechando la gran crisis surgida en los países del magreb, para satanizar al coronel Muammar Al Gaddafi de “dictador que está masacrando al pueblo de Libia”
Incluso, ante el estruendoso tinglado vociferante del mass-media de la comunicación en términos de guerra de cuarta generación creado por el imperialismo contra Gaddafi, hay sectores de la mal denominada “izquierda socialista” que, sospechosamente, aprueban el ataque invasor contra el pueblo de Libia justificándolo con “¡Fuera Gaddafi”, calificándolo de “dictador” y aupando a “los rebeldes”, aplicando el concepto de la democracia occidental a la realidad libia  sin conocer en lo más mínimo los términos de la organización histórica de los pueblos no sólo del Estado denominado “moderno” de Libia, sino el desconocimiento total de los términos de su composición social y de su organización tribal ancestral. Téngase además en cuenta que la realidad económica y social de la vida de la población de Libia no es exactamente igual a la de Egipto, la de Túnez, ni la de Argelia, la de Bahrein, Yemen o Costa de Marfil ni la de Marruecos. No se puede medir la situación social, económica y política-jurídica de Libia en cuanto a la aplicación de derechos humanos, de desempleo, de pobreza y escasez de alimentos y bienes necesarios que no afecta a cada libio en particular, con en el mismo rasero de los demás países del Magreb y de África en general. Y, sin embargo, ese es el rasero que la tal “izquierda socialista” está utilizando para calificar la situación de Libia en lo económico-social.        
Por eso, sin embargo, detrás de todos esos hechos determinados en los que, de alguna manera, se han encontrado involucrados tanto el gobierno de Libia como el Coronel Muammar Al Gaddafi en lo muy personal en sus relaciones con las potencias occidentales –especialmente en el núcleo de poder de Europa y los Estados Unidos-, también en su mismo ámbito político, social y espiritual árabe, palpitan amenazantes la invasión de Irak, la de Afganistán, la primera y segunda Intifada, fundamentalmente esta última de Al-Aqsa con “los asesinatos selectivos” cometidos por el gobierno de Israel contra el pueblo Palestino; las movilizaciones del año 2000 en apoyo al pueblo de Palestina, la “operación Plomo Fundido” y, pues, quiéralo o no el Coronel Gaddafi, el gobierno sionista y criminal de Israel que también lo amenaza conjuntamente con Siria, Irán, el Líbano (pese a la traición de su gobierno actual) y Palestina también están presentes, repito, amenazándolo por sus pecados nacionalistas anteriores.
Es pues, todo lo árabe y, más aun, es todo lo africano como todo lo humano mismo lo que está sometido bajo la mira de ese ojo espantoso, monstruoso e impío del poder imperial norteamericano-europeo.
Por todo ello, entonces, la amenaza de invasión a Libia que planea el imperialismo norteamericano-europeo está dirigida directamente contra el Coronel Gaddafi, con un peso estratégico mucho mayor en sacarlo del medio en lo muy personal por su antigua posición rebelde y nacionalista que por el petróleo mismo y demás fuentes de recursos naturales en lo inmediato. Por supuesto que, dentro de todo esto está en juego el petróleo y otros recursos que contiene la República de Libia, pero en los actuales momentos el imperio norteamericano-europeo no tiene ningún tipo de restricción para su extracción de suelo libio. Por el contrario, para ello tienen todas las puertas abiertas con el Coronel Gaddafi como “socio” contra el terrorismo internacional. Pero en el fondo hay mucho más que eso del petróleo, repito, en lo inmediato.
Efectivamente, mientras escribo esto, en estos mismos momentos del día 17 de marzo del 2011 en la tarde, a eso de las 4,30 pm., el Consejo de Seguridad de las ONU aprobó por mayoría relativa la invasión armada contra Libia, es decir, el imperio norteamericano-europeo –utilizando además el síndrome africano del servilismo del gobierno del Líbano como así el de los que conforman la Unión de la Liga Africana y el Consejo de Estados del Goplfo,  puesto a la orden de Francia y Alemania que redactaron el texto de la Resolución, incluso, violando normas procedimentales sobre validez de sus actos-, tomó la decisión, írrita sobre informaciones falsas, de invasión a Libia, expresamente para asesinar al Coronel Muammar Al Gaddafi y a toda su familia, junto con tantísimas familias libias y africanas más. En el plano de la infrahumanidad imperial norteamericana-europea, esta condena nos depara a la humanidad la visión de un futuro terrible, espantoso, en manos de esos monstruos del imperialismo norteamericano-europeo.
Y por ello consiguientemente, en el fondo, ¿qué es lo que hay detrás de todo esto además? ¿Qué es lo que busca estratégicamente a largo plazo el imperialismo norteamericano-europeo con esta nueva guerra contra Libia, respecto a la actual fase de crisis, de recesión económica mundial del capitalismo? Vayamos por partes.
Primera Parte: El imperialismo norteamericano-europeo va por sus viejos fueros: eliminar todo vestigio del arabismo y, por excelencia, eliminar definitivamente todo vestigio de lo panafricano. Y para ello tiene que aplastar con sometimiento total toda y cualquier posibilidad de respuesta nacionalista árabe-africana. En el sentimiento árabe-africano el coronel Muammar Al Gaddafi con su acción nacionalista y revolucionaria durante los años que van desde 1969 a 2004 tiene muy fuerte presencia, como símbolo de lucha nacionalista. Y este gran objetivo de eliminar, de erradicar lo árabe-africano de raíz por parte del imperialismo norteamericano-europeo, tiene, a su vez, sus respectivas metas concretas: la toma de la República de Libia. Por eso, esta toma militar, tiene que ser signada ésta con la demolición por parte de los medios de comunicación y la propaganda de guerra, de los antecedentes nacionalistas del Coronel Muammar Al Gaddafi, presentándolo como el más “bárbaro y brutal dictador” es un hecho básico. Básico porque tanto Libia  -como anteriormente Irak y Afganistán-, junto con Irán y Siria eran, y son, puntos fundamentales del África a ser tomados militarmente.
Pero, ¿para qué esas metas de acciones militares? Pues, se corresponden con dos objetivos todavía muchos mayores en lo militar de largo plazo: Rusia y China, ambas en la mira para ser tomadas, también militarmente, previos pasos prelacionados en el tiempo.  Por cierto, los gobiernos de estos países, de la manera más sorprendentemente desprevenida e ingenua, -creyéndose grandes potencias intocables- les están abriendo el camino y poniendo en bandeja de plata su futura destrucción inevitable; las que empiezan en la ONU con sus absurdas decisiones tomadas  en el Consejo de Seguridad por dos veces, para que el súper poderoso ejército de  la OTAN actúe a placer, una contra Irán y ahora esta contra Libia. Empero, en esta primera parte, junto con Siria e Irán, la que está en el ojo del huracán como meta a ser ejecutada militarmente en lo más inmediato, es Corea del Norte, junto con Venezuela, Brasil  y Cuba. Depende mucho el juego político de las circunstancias el que decida cual es el primero entre Venezuela y Cuba respecto a Corea del Norte, dentro de estos objetivos militares.
Por consiguiente, la toma militar aplastante de la República de Libia -ya decidida como hecho a ejecutar en marcha y en horas, mientras escribo estas líneas- y la conversión de su extenso territorio en una gran base de operaciones a gran nivel de despliegue de comandos de asaltos por aire, tierra y mar, le garantizaría al imperialismo norteamericano-europeo todas las condiciones geopolíticas para ejercer un ataque despiadado contra Siria e Irán en lo inmediato. Condiciones que, a su vez, mediante la ejecución de la guerra de cuarta generación mediática a toda marcha, reforzarían en el plano jurídico-político a sus organizaciones transgubernamentales como la ONU, la Corte Jurídica Internacional, la OEA, la Unión Africana, la de Países Asiáticos y, pues, la súper poderosa Unión Europea, su poder omnipotente sobre todas las naciones de la Tierra.
Segunda Parte: En su determinación histórica,  es decir, en los términos de su condicionalidad histórica capitalista, el imperialismo norteamericano-europeo en la presencia de sus estructuras de poder de dominación de clase nacional y mundial, tan igual que aquellos otros regimenes pasados, tiene sus días contados a estas alturas de su datación de vida histórica. O sea, por los efectos-fenómenos que producen sus leyes de existencia en los términos de su desarrollo -de acuerdo con mis modestas investigaciones acerca de las características del funcionamiento de las leyes económicas productivas, financieras-monetarias y comerciales respecto a sus determinaciones de valores últimos en las resultas de su iliquidez nacional y mundial-, el sistema capitalista entró en su fase terminal de existencia no sólo como régimen político-jurídico, social-económico y científico religioso, cultural, sino como estadio histórico que cubrió un largo período de datación de vida ya de más de quinientos años, en el que las sociedades humanas se organizaron estructuralmente en sus comunidades nacionales bajo el modo de producción económica indirecta mediada por el capital. Por acción de aniquilamiento entrópico y sistemático producido por los efectos de las leyes económicas sobre el valor del trabajo humano total, el sistema capitalista llegó y cruzó  la entrada de su Punto Histórico de Máximo Crítico de su existencia y camina aceleradamente hacia su Punto de Inflexión, en el que, ya llegado allí, tiende a derrumbarse abrupta e  inapelablemente en el contenido de su estructura económica productiva de base de valores financieros-monetarios. Precisa y exactamente, la gran crisis que atraviesan y viven las naciones europeas y los Estados Unidos en sus sistemas monetarios financieros como centro medular del poderoso desarrollo del sistema capitalista mundial,  confirman estos supuestos.      
En los Estados Unidos y Europa las crisis en su explosión y expansión recurrente, contravienen todas las concepciones más sólidas del conocimiento económico capitalista, expuestas por los economistas y expertos como hechos de resolución eventual para adecuación y atemperamento de dichas crisis, cuales son, entre otras:
a.-  El problema de la Confianza.
b.-  El problema de la Liquidez.
c.-  El problema del Equilibrio.
d.-  La total independencia y autosuficiencia de la empresa de capital privado respecto al Estado.
 Obviando las regularidades sobre leyes y procesos que explican las causas fundamentales de las crisis económicas y monetarias-financieras del sistema capitalista, los componentes esenciales de la aparición de esas dichas crisis económicas, bien en zonas regionales particulares o bien cubriendo áreas muy extensas a nivel de varias regiones del planeta en el curso de estos últimos  doscientos años y, en especial, en estos últimos ochenta años con sus pronunciamiento agravados, tienen que ver, fundamentalmente, con los movimientos interpuestos y superpuestos del dinero-capital con sus relaciones de costos-precios múltiples e integrados en la gigantesca y dual corriente de mercancías-dinero y dinero-mercancía y las respectivas acumulaciones de ganancias que dejan como resultado. Las relaciones múltiples entre grupos de mercancías en su triple representación de dinero-precio-mercancía  en la corriente de insumo-producto y como mercancía-dinero-precio en cuanto bienes intercambiables que Carlos Marx descubrió, contienen dentro de sí, además de lo ya descrito por el descubrimiento de Marx, por términos de economía de producción indirecta, los elementos que destruyen el valor real del trabajo humano total, incluido el trabajo del capitalista, a expensas mismas de la explotación y expoliación del trabajo con la generación de más altas tasas de plusvalía para el capital, incluso fuera de la plusvalía misma, y por tanto este último aspecto del carácter no productivo del capital, desdicen los términos de los enunciados económicos respecto a los equilibrios (ley) de sus agregados monetarios y los términos fijos de sus valores reales en  disminuciones, cual “inflación oculta”. Las crisis, pues, tienden a extender y a profundizarse en términos de una y gran crisis general que, llegado un momento tal, Punto Máximo de Inflexión, toda la estructura económica productiva real se desplomará, de manera simultánea, tanto en Europa como en los Estados Unidos.
En otros términos, tal como lo señalo en mi obra inédita y de pronta publicación, VIDA O MUERTE/La Gran Disyuntiva de la Humanidad Frente al Sistema Capitalista:
la máxima altura del desarrollo alcanzado por el sistema capitalista general en la actualidad –con dominancia absoluta sobre las vastas poblaciones y los recursos del planeta por parte de las estructuras de poderes de dominación de clase del imperialismo norteamericano-europeo-, en la presencia y cuerpo de sus zonas de más altas industrializaciones y concentraciones de riquezas monetarias financieras in crescendo de manera indetenible en su plan de ganancias, a su vez en dichas zonas, se constituye en ellas el Punto Máximo de Inflexión Histórica del sistema capitalista mundial.
Por una serie de regularidades (principios) propias de la estructura económica, política-jurídica y militar del régimen capitalista, la vida de la humanidad toda sobre el planeta atraviesa por un punto de rotura histórica y se encuentra en grave peligro de ser bañada en guerras a altas escalas sobre el planeta. Empero, con la ley de Malthus del crecimiento exponencial de la población sobre el planeta, los términos de la expansión y alejamiento reducido del decrecimiento productivo económico (ley de los rendimientos decrecientes) de los bienes necesarios para el mantenimiento de la vida de las población y sus distribución mediante el mercado en términos de la demanda efectiva, respecto al reclamo cada vez más compulsivo de millones de seres humanos hambrientos sobre el planeta, en los términos del “equilibrio” de las contradicciones entre producción económica y satisfacción de necesidades sociales, por el principio del problema múltiple de la económica capitalista (Adam Smith Las Riquezas de las Naciones) que funciona con la ley de Malthus, la solución única y determinante del sistema capitalista es la guerra de exterminio total contra la población. Este es el fatal drama que impele al imperialismo norteamericano-europeo a apelar a la guerra total como su único medio de salvación histórica. Por eso lo antes dicho de que la vida de la humanidad toda sobre el planeta atraviesa por un punto de rotura histórica y se encuentra en grave peligro de ser bañada en guerras a altas escalas sobre el planeta.  Y ante tan irremediable situación –en la que la iliquidez crece explosiva con los términos explosivos de la inflación en la medida que pasa el tiempo, y se sobrepone a los términos del equilibrio monetario-financiero internacional-, el imperialismo norteamericano-europeo tiene en consecuencia que asegurarse a toda costa, todos los medios y recursos del planeta, fuera y aparte de la economía misma, eliminando con la agresión y la violencia todo tipo  de  competencia con las otras grandes naciones en desarrollo –Rusia, China y Brasil.
En el fondo, la contradicción capital financiero, respecto a capital productivo, marca la pauta para las apariciones cada vez más recurrentes de los déficit de liquidez que afectan la relación divisa/balanza de pago inmediato de Europa y de los Estados Unidos. Cual es más pronunciado en pérdida de valor monetario individual nacional, en la medida que aumenta la expansión de la gigantesca masa del capital financiero de los países en que se concentra dicha masa. Y por eso, tal como lo señala el Informe del Fondo Monetario Internacional, mayo de 2010:
La profunda crisis financiera que sucedió al colapso de Lehman Brothers en septiembre de 2008 tuvo un efecto negativo sustancial en la economía internacional, y el producto mundial cayó 1/2% en 2009. La crisis asestó el golpe más duro a las economías avanzadas, que tuvieron que enfrentar una grave contracción del crédito, balances maltrechos y un desempleo creciente, a lo que se sumó una disminución del producto de 3,1/4% en 2009. La crisis se propagó rápidamente por el mundo entero a través de una serie de canales: el comercio internacional se paralizó, los capitales dejaron de circular y las remesas se redujeron. Cuando la turbulencia amainó fue posible constatar que varios mercados emergentes y países de bajo ingreso se habían visto sumamente afectados por la peor crisis internacional en más de 60 años.

En ese mismo Informe del Fondo Monetario Internacional, se dice que el valor de la masa monetaria mundial disminuyó en unos 400 mil millones de dólares. Como se señala en una nota (la Nº 2, página 41) de La Inevitable Colisión, de Hugo Stephenson, 1972, en la publicación Survey of Current Business, del Departamento de Comercio de los Estados Unidos se publican regularmente estudios estadísticos sobre las inversiones y sus resultados, sin embargo, uno de los problemas es cómo asignar un valor a las sucursales de propiedad exclusiva en países extranjeros… Los estadísticos se ven por ende obligados a referirse a los “valores contables” (del momento), en montos asentados en el balance que normalmente subestiman el verdadero valor actual de la inversión. Desde luego, en esta subestimación del verdadero valor asentado en libros presentados en los informes de la publicación Survey of Current Business se encuentra quizás una de las grandes contradicciones, irresolucionables además, del sistema capitalista. El que pues viene siendo, en sentido general para cualquier inversión un hecho sumamente importante que no se advierte en la gran ley de homogeneización del valor de todas las inversiones que se realizan y se mueven en el mundo conformando las estructuras económicas productivas y financieras-monetarias de los distintos naciones. Por ello, la gran crisis de iliquidez que afecta a los países europeos y a los Estados Unidos en sus productos internos brutos, respecto a sus deudas, tiene su medular epicentro exactamente allí en la determinación del valor real de la moneda (frente a su valor nominal), sobre todo en las monedas patrón, el dólar y el euro. Aclaro que este hecho es una de las propiedades básicas de la economía de producción indirecta para la formación y recomposición de los capitales a altas intensidades, la que hace abstracta a la producción económica industrial, y a la que llega a sustituir por un lado, por la formación de capitales abstractos, de papeles  (bolsas), y el de producción de dinero inorgánico, en el que se incluye el de la modalidad hecha por la máquina de fabricar dólares de la Reserva Federal; y por el otro, el de la creación de dinero-capital sucio, en el que se incluye el del narco-tráfico.  Y este es el punto en el que se encuentra la economía capitalista, en el que la formación abstracta de capitales resquebraja y demuele las bases de producción directa real producida por el trabajo humano total, y, de manera inapelable e irremisible, le lleva a su derrumbamiento definitivo, en la medida que crece y se expande la masa manetaria del capital.      
Y por lo antes dicho, mal que tanto los centros económicos financieros de Europa y los Estados Unidos presentan una situación harto desesperadas, con la Resolución en la que se ha establecido con “criterio jurídico legal” amañado de la “Comunidad Internacional” la invasión a Libia,  y en la que China –quien presidió la reunión- y Rusia se abstuvieron de manera cómplice, al imperialismo norteamericano-europeo todo se le presta sumamente fácil a su rábido y criminal juego de guerra como único medio de salvación ante esa su gran debacle financiera monetaria estructural imparable, porque además sabe apreciar los alcances de su más serio y peligroso competidor en la dinámica económica mundial y en los planos de la producción de armamentos nucleares y la más extraordinaria compactación de fuerzas militares con las que cuenta a la hora de un enfrentamiento a gran escala, mucho más que Rusia, China. Al respecto, en primer lugar, China en el año 2007 llegó a sobrepasar el 50% aproximado del consumo de cemento y 30% aproximado de la producción del carbón mundial, y de igual manera utilizó una altísima proporción porcentual del consumo del petróleo y otras formas de energía y otros factores de producción a grandes escalas. Y para más, el uso y aplicación de todos esos recursos y medios de producción aumentan en la misma cuantía del aumento de las necesidades de la economía china año tras año. De manera que a ese ritmo de crecimiento acelerado de los factores de producción, a China se le impone cada vez más una necesidad perentoria de tener acceso a las más grandes fuentes de energía, fundamentalmente el petróleo. Y de ahí la gran importancia que tienen las inversiones en África y América Latina, fundamentalmente en Libia y en Venezuela. Pero ahora el cuadro le cambia desfavorablemente a la República Popular China en el Medio Oriente, porque en el caso de las inversiones chinas en esa región, éstas en las prioridades de combustibles fósiles del mar Caspio y el Golfo Pérsico, a la larga, en términos de su competencia económica con los Estados Unidos y la Unión Europea, se les atascarán en manos de dicho imperio norteamericano-europeo. Con las guerras de Irak y Afganistán el imperio ha logrado su cerco de seguridad con sus bases militares y, por supuesto, ya ha instalado sus empresas con intereses exclusivamente estadounidenses. De manera que con la toma de Libia, la estructuración del poderoso anillo cubriría todas las costas del Mar Mediterráneo, el Canal de Suez, el Mar Arábigo y el Golfo Pérsico; y con sus bases en Irak y en las costas orientales de Arabia Saudí, pues, rodearía a Irán. Y a la larga, China tendría total impedimento de acceso a las fuentes de petróleo de esa región, lo que la ahogaría cada vez más el marco de sus necesidades crecientes de energía. Además,  téngase muy en cuenta que Venezuela está en la mira como objetivo militar a ser tomado por el imperio, y en esto las tensiones el imperio las acrecienta por frentes múltiples, creando a su vez todo tipo de presiones a lo interno de los distintos países exportadores de petróleo.
Por otra parte, la toma de Libia es un golpe mortal contra la OPEP, cual es desde 1973 uno de los objetivos políticos-militares a ser destruido y tomado por el imperio, cuando hicieron aquella famosa clasificación del mundo en “Primer Mundo”, “Segundo Mundo” y “Tercer Mundo”. La OPEP, junto con Libia tomada y desmantelada, es la recuperación de la hegemonía mundial de las transnacionales sobre los recursos naturales energéticos y bienes de los países pobres y débiles. De manera que a todos aquellos países de economía emergente como China y Brasil se les cerrarán totalmente las puertas compulsadas por las acciones negativas del capital multinacional y la geopolítica del imperialismo norteamericano-europeo. Las ventajas económicas competitivas de los países emergentes China y Brasil hoy, en muy poco tiempo del futuro, el imperio norteamericano-europeo las emparejará y superará con los operativos de invasiones y de asaltos a mano armada.    
 Así, “el Primer Mundo”, el de la Trilateral –los Estados Unidos, los siete de Europa y Japón (aquella época)-, con ese perverso marco de intencionalidad geopolítica, fijó los objetivos militares a ser tomados hace treinta y siete años atrás: el Segundo Mundo –el de la ex Unión Soviética (hoy Rusia), China, Corea del Norte, Cuba, etc.-,  y el Tercer Mundo (el mundo africano).  América Latina (Brasil-Venezuela-Cuba)   –la que no incluyó dentro del Tercer Mundo-  y la OPEP. Así pues, en el marco hirviente de las recensiones económicas, las inflaciones y los paros de desempleos de grandes masas trabajadoras tanto en los países de los más altos desarrollos capitalizados de Europa y los Estados Unidos, como en los más pobres, con diferentes actores, el mismo plan de guerra total imperial se ha venido cumpliendo a través de las décadas; y, por las consecuencias ya predecibles del resquebrajamiento de la estructura económica mundial en la de Europa y los Estados Unidos, la disposición de guerra total con exterminio masivo de poblaciones enteras en el mundo, pone en gravísimo peligro a la humanidad entera sobre el planeta.
Por esas razones, China, así como Rusia, y ambos a la vez, han venido cayendo mansamente en la trampa que les ha venido tendiendo el imperio-norteamericano-europeo, como aquellos  corderitos de Panurgo del cuento de una de las novelas de René de Chataubrand, que entraban al agua, al mandato del lobo disfrazado de pastor, uno tras otros y se ahogaban. Así, como mansos corderos que marchan hacia el ahogamiento de todas sus posibilidades de desarrollo económico-social, geopolítico, jurídico y militar en el orden mundial, están cayendo en la estrategia envolvente que les está tendiendo el imperialismo norteamericano-europeo. China tiene que tener muy presente que –independientemente que sea miembro del Consejo de Seguridad de la ONU- para el imperio norteamericano-europeo, la República Popular China cae dentro de los términos de la definición de Pueblo de la Resolución 1541, dada para aquellos países sometidos a estatuto jurídico de dominación imperial.   
Y recuerden gobiernos de las Repúblicas de Rusia, Brasil y China, así en este mismo orden: ustedes, gobiernos y países están en la mira -a la larga y poco a poco en la medida del desgaste estratégico de sus fuerzas económicas y políticas-militares en el ámbito internacional- ahogadas poco a poco por la guerra del imperio, sino actúan en contrario y en defensa de la humanidad de los pueblos, ustedes  van a ser cercadas, acosadas, atacadas,  destruidas y tomadas como objetivos militares del imperio norteamericano-europeo. Por último:
En la Hora Crucial y de Grave y Extremo Peligro para la Humanidad. ¿Qué Hacer?
Teniendo en cuenta que los Estados Unidos y Europa cuentan con un arsenal de variadas armas de destrucción masiva y con precisión de largas distancias tales que, entre ambas potencias poseen bombas que van: a) De penetración en refugios subterráneos; b) Con despliegue de destrucción total de objetos de superficie en un radio de 15 a 240, en el que no queda absolutamente nada, entre ellos el tipo de los tomahawk y otros; c) Bombas de destrucción y pulverización total con potencial de 1 Kilotón (Kt, mil toneladas de TNT) y 1 Megatón (Mt, un millón de toneladas de TNT). Del tipo b, los Estados Unidos y Europa cuentan con alrededor de 3000 millones de bombas. Y del tipo c, ambas potencias cuentan con alrededor de más 50.000 Mt, habida cuenta que para el año 1989 solamente los Estados Unidos contaban con 20 mil bombas Mt.
De manera que, en las consideraciones de sus expertos, si en tres puntos distintos del planeta se concentran ataques simultáneos con bombas a nivel destructivo de 10 mil megatones, crearían lo que ellos denominan “una nube negra”, tal que al mediodía del día más claro, no se vería el más mínimo rayo de la luz del sol. Y entonces desaparecería todo vestigio de vida sobre la Madre Tierra. Este hecho tan horriblemente espantoso, nos permite afirmar en la más modesta simplicidad de razón humana, que estamos siendo regidos por unos seres monstruosos. Seres de la más alta perversidad criminal, capaces de todo. Y por ello, como bien se sabe, el gobierno norteamericano en la presencia de Barak Obama, Robert Gates, Hilary Clinton y las del Comando General del Ejército y la CIA, conjuntamente con los gobiernos de Inglaterra (Roy Cameron), de Francia (Zarkosy), España (Zapatero y el rey Juan Carlos de Borbón) Alemania (Ángela MerKel) y otros entre ellos George W. Bush, están incursos en asesinatos masivos en Irak y Afganistán. Y ahora en Libia, además, están incurso en delito de asociación para delinquir, y asesinatos por asalto a mano armada con agavillamiento mediante sus ejércitos. La vida de los nueve niños asesinados cobardemente por sus ejércitos, madres y familiares, conjuntamente con las madres de todos los pueblos del mundo, reclaman aterrorizadas que esos gobernantes asesinos, monstruos violadores cometedores de crímenes de lesa humanidad, sean juzgados no por aquellos sus organismos internacionales, sino por los nuevos que, en lo inmediato y sobre la marcha de los acontecimientos, tienen que fundar y establecer los pueblos de la tierra.
La Organización de las Naciones Unidas ya  ha demostrado con sus ejecutorías hechas con anterioridad con la invasión de Irak,-la que los Estados Unidos hizo por su cuenta y riesgo, y  que no sancionó y con la invasión irrita  de Afganistán y otras-, que no merece el más mínimo respecto como institución de organización de los pueblos. Ha demostrado abiertamente con sus ejecutorías reprobables y espernibles, que es un Organismo multilateral de delincuentes y criminales consuetudinarios; los que se han organizados malsana y perversamente para invadir y depredar con infrahumanidad a los distintas naciones del mundo y apoderarse de sus riquezas y territorios.  En este sentido, ya las más de 182 naciones del mundo no deben callar y soportar pasivamente la acción infrahumana del hamponato y agavillmiento de esos vulgares delincuentes de alta ralea imperial, que, incluso, en estos momentos ya se han robado las reservas internacionales de Libia depositadas en bancos de esos países asaltantes. Por el contrario, los distintos pueblos de la tierra tienen que denunciar esa Organización multilateral de criminales y deshacerla, desmantelarla y, consiguientemente, en lo inmediato, ponerse a constituir un Consejo Mundial de Naciones de la Tierra, que responda a la filialidad del alma humana de las naciones y de los pueblos; o, para todo caso, constituir y establecer alguna otra institución mundial de igual naturaleza. Hay que crear un movimiento de respuesta mundial de liberación ética, moral y de humanidad de los pueblos.     
China y Rusia, -cuando con su voto negativo hubieren parado la acción de guerra criminal en marcha- han convalidado de manera indolente e irresponsable el ataque de destrucción masiva y de muerte contra no sólo el Coronel Gaddafi y su familia, sino contra los seis millones de habitantes del pueblo de Libia. Han cometido un gravísimo error contra su propia historia y existencia de pueblos, porque con esa abstención cómplice convalidaron, de la manera más desprevenida, la continuidad de una estrategia política y militar envolvente a escala planetaria, la que a la larga perjudicará notablemente tanto China como a Rusia y a las demás naciones de la Tierra. China, Rusia y Brasil, con su abstención cómplice en el seno del Consejo de Seguridad de la Organización de la Naciones Unidas -  representantes que firmaron sin imaginarse siquiera que sientan el precedente para que esa misma aplicación sea usada en lo posterior contra sus mismos pueblos- son responsables históricos de todas las muertes que haya en ese ataque cobarde y asesino contra el pueblo libio y todas aquellas muertes que en el Medio Oriente puedan ocurrir en esa región y en el África en lo adelante. Rusia, Brasil y China, conjuntamente con los Estados Unidos, Francia, Alemania, España, Italia, y todos los demás miembros permanentes y rotatorios del Consejo de Seguridad,  están obligados a responder a los pueblos de las naciones del mundo por esa guerra criminal con todas sus consecuencias fatales de destrucción y muerte masiva.
Brasil y China, como naciones que sufrieron el proceso de colonización e invasión impía y humillante europea, están obligados a oponerse a esa guerra contra el pueblo de Libia y a toda guerra. Están obligados sus gobiernos a velar por la seguridad y el cuido de la vida humana sobre el planeta. Están obligados a vindicar, a dignificar la vida de sus pueblos, conjuntamente con la dignificación de la vida de los demás pueblos de la Madre Tierra.
China, Brasil y Rusia están obligadas a volver sus ojos de humanidad sobre los pueblos oprimidos, asediados y expoliados por el capitalismo invasor, colonizador y explotador de sus corporaciones multinacionales y la impía dictadura de clases de la estructura de poderes del imperialismo norteamericano-europeo, que se ha entronizado sobre los pueblos mediante la ONU, su Consejo de Seguridad y la OTAN, de sus ejércitos y armas de destrucción masiva y a larga distancia. Rusia y China, sus gobiernos, no deben ni pueden permanecer impasibles e indiferentes ante el aniquilamiento sistemático e infrahumano de la humanidad de los pueblos, realizado por esos monstruos despiadados de los gobiernos norteamericano-europeos.
Rusia, Brasil y China tienen que incorporarse con sus acervos libertarios a la más hermosa tarea de humanización de los pueblos de la Madre Tierra y la del mundo. Por tanto, tienen que desconocer a la Organización de las Naciones Unidas como institución mundial de representación de las naciones, la que por el contrario como ya lo hemos señalado, solo sirve a intereses de aquellos gobiernos criminales de países colonialistas e imperiales que han depredado a los otros pueblos y naciones de África, América, Asia, y Australia-Oceanía. Necesaria es realizar una acción urgente de solidaridad y apoyo con el pueblo de Libia. Apoyo incondicional ante tan terrible acción de crímenes y asesinatos masivos contra nuestros hermanos de Libia, como así a todos nuestros hermanos de África que están en la mira ante tan brutal e impía acción imperialista norteamericana-europea, como son también en lo inmediato Siria e Irán. Para ello pues, desde abajo, desde las entrañas mismas de los pueblos en lo masivo de muchedumbres, debemos crear instrumentos políticos, jurídicos y sociales-culturales de enlaces diversos para nuclear a los pueblos y naciones de los distintos continentes, como así crear los mecanismos institucionales para realizar respuestas de acciones concretas contra los gobiernos y estructuras de poderes de dominación del imperialismo norteamericano-europeo.
A los efectos, la propuesta anterior de crear los instrumentos políticos,  jurídicos, etc., como también los mecanismos institucionales respectivos, tiene que ser conjugada por una estrategia general de acciones que confluyan, para cada ejecución táctica en lo particular de cada aspecto nacional, a) En la Reorganización y Unificación del Movimiento Revolucionario a Nivel Mundial. b) El establecimiento de una Línea de Acción de Racionalización y Regularización de las luchas y enfrentamientos sociales humanos sobre el planeta, en términos y en función de humanidad.  El movimiento revolucionario a escala mundial, ante las manipulaciones y perversiones de deshumanización sistemática estructurada histórica del imperialismo norteamericano-europeo, tiene que rescatar los principios básicos de humanidad de los pueblos. En ellos amar y cuidar la vida de nuestros semejante; el de bondad, generosidad y de solidaridad entre las gentes y las naciones; el de correlación de fuerzas entre factores y fuerzas sociales distintas y de complementariedad entre naciones, entre otros principios.  
Los pueblos, las naciones de América Latina, Central, del Caribe y del Norte (los Estados Unidos y Canadá); los pueblos de África, los pueblos de Asía, de Australia y Oceanía, están impelidos, obligados, a unificarse en una sola acción de lucha y combate por salvar la vida de la humanidad toda ante tan terrible amenaza. Los pueblos del mundo tienen, tenemos que unirnos en un solo y único canto de amor, de familia humana única, por  la vida de las especies animales y vegetales, por la existencia de las  aguas, de los ríos y de los mares, por la existencia del aire, del viento con su silbo en el follaje, de la madre Tierra, del planeta en su vibración cósmica,  en su viaje estelar en torno al Universo.
                                      En fe de afecto revolucionario de siempre,

                                                      Pablo R. Carvajal R.
                          Coordinador General de América Libre y Socialista
             (Proyecto de Estudio e Investigación en Función de Humanidad)
                                         Correo: pabloc43@yahoo.es

Caracas, 18 de marzo del 2011

       

domingo, 11 de agosto de 2013

ANÁLISIS DE COYUNTURA SOBRE LA MEDIDA DE AJUSTE CAMBIARIO 15/02/2013 Y OTRAS OBSERVACIONES SOBRE EL PROCESO REVOLUCIONARIO

Pablo Carvajal

Explicaciones Preliminares o Introductorias
1.-  Necesario es que aclaremos que la enorme y compleja mecánica de la economía capitalista es suma y triplemente complicada. Una, por el enorme complejo dinámico de las teorías que las explican –con sus códigos y claves de desciframiento de su habla y escritura histórica diseñadas a fines labiles- que se entremezclan conformando una maraña inextricable del lenguaje económico productivo, monetario y financiero y comercial; por el otro, por sus aplicaciones prácticas con sus resultados concretos, signados éstos por la contradicción (método) entre sus componentes institucionales nacionales e internacionales  y de factores extra económicos además, que son imposibles de comprenderlos aún cuando están a ojos visto; y por último, por lo abstruso del lenguaje económico mismo en el que se difuminan las identidades de sus aparatos que sirven de instrumentos para usos de las aplicaciones de decisiones y medidas económicas, y que pasan al ámbito ladino y perverso de la política. Este es el caso del mecanismo de ajuste del tipo de cambio cuando se forza o impostura una relación con el de la depreciación y la devaluación de la moneda con sus respectivos resultados indiferenciados en el comercio y la distribución de bienes y servicios, y en que uno no sabe de qué se trata en fondo.
2.- Como es sabido por todo el mundo, el gobierno procedió a realizar una medida de reajustar el tipo de cambio –el dólar como moneda patrón a nivel internacional- que había estado en Bs. 4,30 desde el 30 de diciembre del año 2010 hasta el 15/02/2013, para situarlo en otro tipo de relación.
Ahora, el asunto medular de nuestro documento consiste en poner en claro que, por un lado, las acusaciones de la derecha capitalista de que el gobierno bolivariano aplicó una devaluación son hipócritas, además plagadas de mentiras con toda malsanía. Y por el otro, que las respuestas que han dado los técnicos del gobierno bolivariano y del PSUV y los demás de la izquierda a las manipulaciones de la derecha capitalista y golpista son incoherentes e inopinadas y que han contribuido, con esas manipulaciones perversas de la derecha golpista, en reafirmar el desconocimiento de la población en general acerca de cómo funciona y opera la economía capitalista misma, al admitir que la medida de Ajuste Cambiario es lo mismo que Devaluación de nuestra moneda, el bolívar. Lamentablemente, los técnicos del gobierno y del PSUV, confundidos, han caído ingenuamente en la trampa que les tendió la derecha capitalista, golpista ella. Y por esa confusión casi ganan los representantes del imperialismo las elecciones y toman el gobierno.
Dejamos claro además, que aquí tratamos por sobre todo, el lugar que ocupan los mecanismos y andamiajes del conocimiento económico respecto a sus funciones y aplicaciones en las decisiones económicas productivas, monetarias y financieras.
 Por otra parte llamamos la atención –aprovechando el hecho coyuntural de este ajuste cambiario y los escándalos que ha formado la derecha golpista- sobre problemas de fondo que no hemos venido tratando desde la izquierda revolucionaria, y que es: despertar la conciencia acerca de la necesidad del combate agraz, duro, sobre el conocimiento de la revolución socialista, su rumbo histórico de nuestra parte, y de sus respectivas ideas de fuerzas sobre bases científicas firmes del pensamiento revolucionario respecto a las transformaciones de la economía capitalista que hay que hacer, para reordenar y reajustar la base material de asiento de la vida de nuestra nación en la sociedad socialista proyectada. La economía capitalista hay que conocerla para dominarla, para poder desarmarla y, luego, simultáneamente, poder construir la nueva economía socialista en plan de una nueva ciencia. Ese es nuestro cometido en la intencionalidad y sentido de este documento: Alertar sobre esta necesidad histórica inminente del conocimiento económico profundo en todos sus aspectos para el pueblo y el movimiento revolucionario.


RESUMEN DE LO TRATADO Y ANALIZADO EN ESTE DOCUMENTO

En principio, este documento no lo habíamos dado a conocer públicamente primero por la acaecida desaparición física de nuestro siempre comandante Hugo Chávez y segundo, por el rápido proceso electoral del 14-A sometido una violenta presión política y mediática producida por la derecha golpista con toda la perversa intención de desmoralizar y destruir tanto a nuestro candidato Nicolás y al gobierno bolivariano como así a todo el proceso del movimiento revolucionario. Por consecuencias, dado el contenido de crítica revolucionaria de estos planteamientos dados aquí, y con el que somos verticales sustentados con nuestras concepciones científicas de la revolución socialista-comunista, consideramos prudente entonces no darlo a conocer públicamente en aquellos momentos. Sin embargo, está planteado abrir un proceso crítico, de discusión y análisis pormenorizado y profundo sobre los contenidos de conocimientos históricos y el rumbo que habrá de tomar nuestro proceso de la revolución socialista en Venezuela y en general. Y, de la misma manera, lo que le corresponde aportar al movimiento revolucionario nacional, en cada uno de sus partes componentes de manera individual a la teoría de la revolución, como así también en cuanto a su responsabilidad o, para todo caso, la irresponsabilidad por errores, fallas, omisiones y traiciones cometidas contra lo logrado a nuestras alturas de hoy aquí en Venezuela.
En este aspecto, es lamentable que la dirección de los partidos de izquierda, por ejemplo la del Partido Comunista, no haya cobrado conciencia acerca de la necesidad ineludible y urgente de realizar la recomposición y reunificación del movimiento revolucionario en Venezuela como parte de la extraordinaria tarea histórica de la izquierda revolucionaria de articular y organizar coherentemente los distintos sectores y estratos sociales de la población venezolana para reconducirlos por  la vía de la realización del proceso de la revolución socialista-comunista. Y de la misma manera, que a esta altura de los hechos históricos, esa nuestra dirección de los principales partidos del movimiento revolucionario –PCV, PSUV, Movimiento Tupamaro, el MEP, el PPT y otros- permanezcan insensiblemente indolentes y no hayan hecho el mínimo esfuerzo por contribuir en desarrollar el trabajo de investigación científica revolucionaria y de la forja de la gran teoría de la revolución socialista mundial, como parte de la nueva ciencia humana y de la vida que tiene que emerger para el establecimiento del nuevo estadio histórico al que tienen que arribar las sociedades humanas de nuestros tiempos. Aquí las direcciones del PSUV, del PCV y de los demás partidos de izquierda están pensado que todo está hecho, que no se necesita laborar con manos propias y de ahora en el trabajo de investigaciones científicas por encontrar, descubrir, las nuevas leyes que habrán de regir las sociedades más allá del sistema capitalista, y que la revolución socialista viene por obra divina o por determinismo metafísico absoluto.   Por consiguiente:    

En el punto I tratamos:

1.- El ajuste del tipo de cambio
 Es una medida propia de la dinámica monetaria y financiera de cualquier país o nación del mundo. Esto es, sus aplicaciones  no alteran ni cambian negativamente el rumbo de las actividades económicas productivas y de prestación de servicios ni mucho menos las de comercio e intercambios de bienes. Por consecuencias, nadie tiene por qué espantarse de los hechos de esta medida si es perfectamente concebible dentro de la cotidianidad operacional capitalista del país para reajustar (circunstancialmente) el movimiento de la estructura monetaria-financiera nacional disminuida siempre por la inflación que es la que la dinamiza.

2.-  Independientemente de los efectos positivos o negativos de esta medida de ajuste del tipo de cambio, siempre los precios, -tanto del dinero como de la enorme y creciente diversidad de bienes y servicios-, tienen su propia dinámica económica productiva-comercial y extra-económica  de subida imparable, en términos de inflación también creciente (ley de). Esta es una de las leyes económicas básicas de existencia de la estructura económica, monetaria y financiera del sistema capitalista, en la presencia de sus capitales de altas magnitudes e intensidades como centro neurálgico de su existencia. Sin esta ley el sistema se desploma, deja de existir.

3.- El ajuste del tipo de cambio no es igual a la devaluación. Este es un hecho que analizamos explicativamente entre las páginas 4 y 12 de este documento. Efectivamente, tal como lo afirmamos en la página 12, “en economía todo concepto (categoría) tiene su justo lugar en el que encaja en su funcionamiento en la dinámica de la estructura de significaciones a la que pertenece y así, como pieza de los andamiajes de este sistema funciona, opera en la práctica. De esta manera, el concepto de devaluación encaja dentro del contenido significativo –monetario financiero- de la moneda de que se trate (sea dólar, bolívar, peso, real, marco, etc.) y ocupa su lugar como categoría específica en cuanto a mantener o no el valor de esa moneda, de acuerdo con política de autoridad legal (BCV) fijada y que lo decida y realice in situ. A partir de allí entonces (la devaluación) opera como un mecanismo con sus funciones propias para afectar negativamente a la moneda depreciándola; funciones las que afectan a lo moneda según y de acuerdo con un marco de relaciones particulares y específicas establecidas (previamente) en relación con los precios en términos de costos de los bienes. Es a partir de ahí que arranca todo este extraordinario complejo de cosas sustentado en la regularización de los precios respecto a la sobre valuación anterior de la moneda nacional. Es decir, la devaluación toca directamente al valor interno  de la moneda, unitariamente el de ella, acción que no puede asignarse arbitrariamente como equivalente al contenido significativo de otro término o concepto de técnica económica, -como lo hace la derecha capitalista con dicho término devaluación- como sinónimo del mecanismo ajuste del tipo de cambio. En este caso, ajuste del tipo de cambio no es sinónimo de devaluación, por no ser extensible (denotativo) el significado de devaluación al de ajuste de cambio. De la misma manera, -aunque por cualquier motivo los precios suban- la definición del ajuste del tipo de cambio, por su definición intencional, no es extensible (denotativa) a la definición devaluación por no tener objetivos similares ni idénticos en el contexto significativo de su definición como mecanismo de las ciencias económicas capitalista”.
Hacemos la observación de que tanto el presidente Maduro y su alto gobierno, como así la alta dirección política estratégica del PSUV, de los demás partidos políticos y organizaciones del movimiento revolucionario, tienen que tener una gran cuidado acerca de quiénes van a emitir posiciones u opiniones públicas en los medios de comunicación sobre materias de alta sensibilidad estratégica, tanto para el gobierno como para el proceso revolucionario. No debe ser permitido que cualquiera a nombre de la política del gobierno y del movimiento revolucionario ande dando declaraciones a diestra y siniestra en la televisión sobre áreas de problemas fundamentales que pudieren comprometer estrategias sumamente sensibles del proceso revolucionario.

4.- ¿Qué es lo que esconde realmente y busca la derecha capitalista de la MUD cuando confunde Ajuste Cambiario con Devaluación?
Primero: le ha tendido una trampa tanto al gobierno interino de Nicolás Maduro antes del 14-A 2013 y la que, por consecuencias, le disminuyó de manera notable su votación como candidato, como luego, después de ser elegido presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela todavía lo sigue afectando negativamente. De la misma manera esa trampa, a su vez, envolvió a los técnicos del gobierno, del PSUV y de la izquierda en general, y los ha dejado mansamente inermes y sin respuesta ante los ataques de esa derecha golpista en la materia económica monetaria y financiera. Al respecto, no supieron, ni aún hoy, han sabido responder que el ajuste cambiario no es devaluación. No han defendido con responsabilidad revolucionaria al gobierno ni al pueblo, y por consecuencias, los han dejado a las expensas de los ataques de esa derecha criminal que va ganando espacios en los planos de crear una desmedida subida exorbitantes de los precios de los alimentos y medios de vida, y, por otro lado, en la opinión de las grandes masas poblacionales desprevenidas e ingenuas que confundidas les creen su mentiras perversas.
Empero, dentro de todo esto, respondemos a la siguiente pregunta:¿Por qué los economistas y expertos confunden indiscriminadamente la  devaluación con ajuste del tipo de cambio, y a su vez, ambas categorías con la depreciación sistemática de la moneda y la inflación sistemática, sin tomar en cuenta que la inflación determina la tasa de rendimiento de los capitales?
Segundo: La debilidad en el manejo de los conceptos y técnica económica capitalista tan compleja de parte del equipo de gobierno bolivariano y de nuestro movimiento revolucionario en general, y con el uso de sus medios de comunicación  a pleno pulmón las 24 horas del día, la derecha capitalista llenó y sigue llenando de confusión al pueblo en general, incluido el pueblo chavista y a la izquierda toda. De esta manera, consecuentemente va creando y extendiendo a su vez serias dudas respecto al buen (o mal) manejo de la economía por el gobierno bolivariano, revolucionario bajo la dirección del presidente Nicolás Maduro; en tanto va ganando espacio en el ámbito político de la opinión pública nacional. Es más, la derecha ha pasado comandar el peso de la opinión política en el Venezuela después de la desaparición física del presidente Chávez, por ese manejo irresponsable del equipo económico monetario y financiero en la presencia de los responsables del Banco Central de Venezuela, y los Ministerios de Economía y Finanzas y el de Planificación.
Repetimos, esta confusión y ausencia de defensa de la política económica le permitió al candidato de la ultraderecha imperialista, aun con toda su gran mediocridad, aumentar de manera sorpresiva su caudal electoral, y casi obtiene el triunfo y se apodera del gobierno, porque los técnicos en materia económica dejaron solo al camarada Nicolás Maduro como candidato presidencial, y ahora lo están dejando solo como presidente.

Tercero: La derecha golpista ataca lábil y manipuladamente  la política de empleo del gobierno revolucionario, en tanto por tras corral, ponen a flote las bondades de su política económica totalmente nocivas a los trabajadores y al pueblo, las que venden subliminalmente con las repeticiones de sus mass-media las 24 horas del día y las inyectan sutilmente en el seno de las poblaciones en las que van ganando terreno con su política reaccionaria mediante la confusión. Este hecho lo analizamos brevemente en la página 13 (ver la nota 8 página 35).

A Partir del Punto II Reflexionamos sobre:

1.- Hasta ahora en el contexto de la izquierda revolucionaria, en su generalidad, -por no haberse tratado con regularidad, sistematicidad y profundidad de conocimiento histórico revolucionario- no tenemos claro de qué se trata, en alto y en fondo, la concepción de la revolución socialista y comunista. ¿Cuáles son los referentes filosóficos-ontológicos de la revolución socialista (comunista)? ¿Cuáles son las determinaciones científicas del socialismo (comunismo)? ¿Contiene el socialismo el comunismo o viceversa? Por el contrario, ¿El socialismo descarta y excluye al comunismo? ¿Aceptamos a las ciencias del sistema capitalista, tal cual ellas han sido formalizadas, funcionan y operan en términos de la dominación, expoliación y explotación del trabajo humano y de los pueblos, asumiendo que con ellas, en términos de la política y la religión podemos avanzar hacia la realización de la revolución socialista? ¿Es la revolución un proceso de eminente creación científica nueva por parte del pueblo-movimiento revolucionario? ¿Sí o no?. ¿Cómo sería posible encarar el proceso de la revolución socialista, a partir de una vanguardia revolucionaria sola, -que gobierna sin el apoyo y sostén consciente, de clase para sí y sin teoría de la revolución- de las grandes masas poblacionales de nuestro país, esencialmente sin los trabajadores incorporados?
¿Utilizando los mismos parámetros filosóficos-religiosos de la dominación mental de las ciencias antropológicas, sociológicas y económicas es posible que se puedan construir nuevas relaciones paradigmáticas de humanidad y de humanización de las sociedades? Por último, ¿Es posible concebir el paso de la economía capitalista a economía socialista sin las determinaciones previas de la teoría política económica socialista y sin las correspondientes construcciones de las leyes de la producción económica, las del comercio, las de distribución y reparto socialista, sosteniéndonos en el contenido mismo de las leyes económicas capitalistas, tal como ellas han sido diseñadas para explotar y expoliar a las grandes masas trabajadoras en el mundo históricamente? 

2.- Por carecer de una teoría científica de la revolución, el gobierno y todo el movimiento revolucionario se encuentran encerrados y hundidos en un contexto general de fallas, omisiones, debilidades e incapacidades frente al gigantesco poderío del conocimiento de las estructuras de poderes del sistema capitalista en Venezuela y en general. En esto dos hechos nocivos se ventilan en contra del proprio proceso revolucionario:
1)  Las grandes mayorías de jóvenes, adultos y ancianos que viven en los campos, los barrios de los pueblos y las grandes ciudades, y que no se ubican en ninguna parcialidad política, tan igual con los que tienen parcialidad política en uno y otro bando, actualmente no tienen los medios de conocimientos institucionales  para poder adquirir la conciencia fehaciente en qué elementos y factores de conocimiento históricos se diferencia la política del gobierno y movimiento revolucionario, frente al conocimiento (también histórico) del capitalismo en Venezuela y en general; y por consecuencias, para ambos casos contra puestos, las poblaciones permanecen en el mismo estado de confusión y dogmatismo sembrado por la Iglesia Católica y el modo de vida capitalista durante estos últimos quinientos años en América, en plan de la educación y epistemología capitalista general, y obedeciendo a los dictados del orden jurídico, político y cultural nacional en plan de la política de dominación del imperialismo norteamericano-europeo en el orden mundial. Todos hemos nacido y criado en este orden de vida que es el único que conocemos y entonces, ¿Qué otra forma y tipo de vida diametralmente distinto podemos concebir si nadie tiene ninguna idea de lo que es el socialismo, no más allá de consignas?
2) La clase obrera, o mejor dicho, la clase trabajadora, carece de nociones y concepciones claras acerca de su papel de sujeto histórico que motoriza y conduce las acciones de las transformaciones y cambios históricos del Estado y la Sociedad Capitalista. Por consecuencias, en el seno de los partidos de izquierda revolucionaria nos encontramos huérfanos y en la orfandad teórica, en la abismal soledad del amor por la investigación científica
por carecer de teoría de la revolución y de la conciencia misma de la revolución como un proceso de creación científica nueva de su parte, los trabajadores venezolanos y en general, permanecemos sujetos e inermes a las determinaciones del poder de clase del capitalismo nacional e internacional; sujetos y dependientes a los ritmos de la política capitalista de las estructuras de poderes de clase dominantes. 

3.- En cuanto a la estructura jurídica del Estado capitalista venezolano la posición confusa de los cuadros y operadores políticos de nuestro partido de gobierno bolivariano –quienes menos que ayudar al presidente Chávez y hoy al presidente Maduro lo han distraído y quitado impulso inspirador en sus búsquedas audaces transformadoras profundas. En el plano del Derecho Constitucional y Comparado respecto a las transformaciones revolucionarias necesarias y suficientes que hay que hacer a fondo radical, han pretendido pasar del Estado de Derecho Constitucional liberal y de economía manchesteriana –con respuesta autoritaria, represiva y terrorista ante los reclamos de justicia por las poblaciones explotadas y desamparadas-, al Estado de Derecho Social del “capitalismo con rostro humano”, tal como se dio en Europa hasta el 2008.

4.- De la misma manera, en las determinaciones económicas, asumiendo la economía (neoliberal) keynesiana cual “economía socialista” y, a su vez, contraponiéndola a la neoliberal (manchesteriana) de von Hayeck y de la Escuela de Chicago,  se acepta (aceptamos) con fervor ciego el salario y la ganancia, se acepta la contabilidad capitalista con todos sus andamiajes de control y de baremos con los que los capitalistas abren poderosos canales de succión, transportación, y con ella trasladan el prodigio de la energía del trabajo humano hacia las grandes y gigantescas masas de sus capitales con crecimientos imparables (Ley de los Desarrollos Económicos y Sociales Desiguales e Inversamente Proporcionales). Por tanto, en lo inmediato se plantea un cambio radical y profundo de la estrategia económica de producción y financiera del gobierno, respecto a las relaciones de producción con las fuerzas del trabajo en plan transformacional.

 5.- En resumen de todo este análisis, entre otros aspectos planteamos:
      5.1.- La urgencia de elaborar la Gran Estrategia de Largos Alcances de la Revolución Socialista (teoría de la revolución) en nuestro país, sobre la base de la Reorganización, Recomposición y Reunificación del Movimiento Revolucionario Nacional, y con resonancia a escala de América continental y, consecuentemente, mundial.
      5.2.-  La determinación política como factor de movimiento de masas debe y tiene que concretarse con el conocimiento científico de la revolución socialista en su plan, también, como un factor sumamente importante para movilizar  las masas populares e incorporarlas a la revolución socialista.
El pueblo masa es el que construye la revolución socialista pero, no obstante, tiene que hacerla con su propio conocimiento científico de humanidad, especialmente con determinaciones de ciencias económicas y sociales del socialismo y su gran método de experimentación científica general.
Al respecto, se plantea superar las ciencias y el método general del sistema capitalista con las ciencias de la revolución.
Para ello proponemos, todos los sectores políticos del movimiento revolucionario tienen que instituir de manera conjunta y orgánica grandes áreas de investigaciones sobre todos los tipos de actividades del conocimiento científico de la revolución socialista-comunista: Economía, sociología, antropología, derecho: privado nacional e internacional, comparado, práctica jurídica internacional, etc. Todos los partidos políticos de la izquierda revolucionaria tienen que determinar sus departamentos de investigaciones económicas y en general y designar responsablemente sus investigadores a los fines.
5.3.- Proponemos al gobierno nacional, al presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Sr. Nicolás Maduro Moros, crear el “CONSEJO ECONÓMICO NACIONAL REVOLUCIONARIO DE TRANSICIÓN AL SOCIALISMO DE VENEZUELA”
Las funciones básicas y fundamentales de este Consejo Económico Nacional las exponemos en la página 28 y siguiente de este documento.










ANÁLISIS DE COYUNTURA SOBRE LAS MEDIDAS DE AJUSTE CAMBIARIO FEBRERO 2013

En medio de este rabioso y feroz escándalo producido por tirios y troyanos –con perversas manipulaciones con las que intentan confundir la verdad con la mentira y viceversa por parte de la derecha capitalista, buscando pescar en el rio revuelto de la sedición y el golpismo para desestabilizar el país, y, por otra, por parte de una “izquierda” imposturada de sospechoso revolucionarismo en mucho cómplice y testaferro de la derecha capitalista que obedece al Departamento de Estado y a la CIA, fuera y aparte de las justas posiciones críticas de los integrantes del movimiento revolucionario de los que nosotros formamos parte- ante las medidas de ajuste cambiario aplicadas por el gobierno bolivariano el 15 del mes de febrero del año en curso (2013), AMÉRICA LIBRE Y SOCIALISTA, Movimiento de Estudio para la Investigación de la Educación, la Nueva Ciencia de la Revolución y del Socialismo hace llegar al pueblo masa, al gobierno bolivariano –la Presidencia de la República, el Banco Central de Venezuela, los Ministerios del Poder Popular de Economía y Finanzas y el de Planificación-  y al movimiento revolucionario nacional  su análisis de coyuntura, y fija su posición al respecto, en cuanto a la necesidad de conformar la estrategia de fondo y de extensión de la revolución.
A manera de introducción en lo referido a este tema, lo primero que advertimos es que esta medida es aplicada en el contexto mero y palmario de la economía burguesa, y, en general, bajo los términos de la condicionalidad histórica del sistema capitalista. Por consecuencias, esta dicha medida de ajuste cambiario no tiene nada que ver con medidas de corte e intencionalidad revolucionaria, ni con fondo estratégico transformacional del estado y la sociedad capitalista. Es decir, esta es una medida que cualquier gobierno de los denominados “democráticos” no importa que los sean o no, aplica en su funcionalidad institucional de ciencia económica capitalista para regularizar coyunturalmente los movimientos monetarios internos de su estructura económica respecto a los movimientos externos del sistema de precio internacional; teniendo en cuenta además que los efectos de la ley de los precios crecientes (Adam Smith) producidos por el mercado mundial, desajustan con inflación imparable e iterativa el valor interno de la moneda nacional, además de la inflación interna producto del agio, la especulación y el acaparamiento. Esto último es “valor de mercado”. 
Por consecuencias, creemos que nadie tiene por qué espantarse de los hechos de esta medida si es perfectamente concebible dentro de la cotidianidad operacional capitalista para reajustar (circunstancialmente) el movimiento de la estructura monetaria-financiera nacional disminuida siempre por la inflación que es la que la dinamiza. Todos los más grandes capitales se alimentan, crecen, se recomponen y se expanden a costa de la inflación como flujo sanguíneo de la economía capitalista en términos monetarios y financieros, regidos por la subida imparable de los precios. El reconocer y divulgar esto es una responsabilidad.
Por supuesto, lo afirmado no lo decimos nosotros. Sino que así es que funciona la economía capitalista. De allí que, por lo expuesto en esta advertencia, pasamos a nuestro análisis.

I.- EXISTE UNA GRAN CONFUSIÓN EN MEDIO DE LOS TÉCNICOS DEL GOBIERNO BOLIVARIANO Y EN GENERAL DE LA IZQUIERDA, RESPECTO A LA DEFINICIÓN DEL CARÁCTER ESPECÍFICO Y AL PAPEL DEL AJUSTE CAMBIARIO COMO MECANISMO DE COYUNTURA ECONÓMICA INMEDIATA.

1.- Con todo el respeto merecido a quienes nos dirigimos, hacemos esta crítica en términos del principio de Franqueza, Honestidad e Integridad en la búsqueda de la verdad científica revolucionaria. Y la hacemos porque en el seno de las mayorías, hay una gran necesidad de saberse el rumbo claro y cierto de la política económica transformacional, con criterio científico coherente y eminente de la revolución.  
Por consecuencias, no es justo, no es humano con nosotros mismos en nuestro proceso revolucionario confundir Ajuste Cambiario con Devaluación. Tanto los técnicos del gobierno, empezando por los del Banco Central de Venezuela, no han tratado este asunto –cual una de las contradicciones fundamentales del sistema capitalista- con profundidad de esclarecimiento ante la gran masa poblacional de nuestro país tal como ha tenido que ser: en función de pedagogía de la revolución bolivariana, socialista, en último término. De la misma manera, los expertos y economistas –casos de Jesús Farías, Víctor Álvarez y otros-  del partido de gobierno con sus declaraciones y entrevistas por la televisión y demás medios de comunicación masiva, han contribuido a la extensión envolvente de esa espesa niebla oscura de confusiones, distorsiones y perversiones sobre dicha medida, tejida, levantada y arrojada malsanamente sobre la opinión pública nacional e internacional por la derecha capitalista y golpista ella, al hablar y calificar de ¡¡¡”devaluación”¡¡¡ a dicha medida de Ajuste cambiario expuesta primeramente por la derecha venezolana. Repetimos, expresamente para crear la anarquía y desestabilización política y social en Venezuela con enunciados veritativos que confunden una significación de técnica económica (ajuste cambiario) con otra (devaluación). Y lo peor para el pueblo y el proceso revolucionario, sin tenerse pues posibilidad de entender a ciencia cierta que es una cosa (devaluación) respecto a la otra (ajuste cambiario), y ni mucho menos entender cuál es el contenido positivo que favorece al pueblo en general dicha medida aplicada por nuestro gobierno, porque así, tanto la derecha golpista dice malsanamente: ¡DEVALUACIÓN¡ los expertos del gobierno y del PSUV lo corean y confirman inopinadamente: “¡SI, DEVALUACIÓN¡”. Y todos dicen (decimos) lo mismo: “¡¡¡Devaluación¡¡¡”
Aclaramos que las significaciones técnicas del lenguaje económico monetario y financiero capitalista con su aridez abstrusa, para el pueblo y para el movimiento revolucionario no significan absolutamente nada, pues solamente les sirven a los propietarios privados capitalistas y al imperio para apropiarse de todos los medios y recursos de producción económicos y sociales nacionales,  en detrimento de la gran masa poblacional pobre de nuestro país y en general.
Sin embargo, también dejamos claro que, en aras del conocimiento de la estructura económica productiva, monetaria y financiera, del comercio y la distribución de bienes y recurso del sistema capitalista por parte de nosotros pueblo, tal como Carlos Marx y Federico Engels nos lo enseñaron por primera vez, sí nos conviene llegar a ese conocimiento para desarmarlo, desmantelarlo y desmontarlo, en lo correspondiente a toda dicha estructura económica, conjuntamente con la del Estado y la sociedad capitalista en general. Porque, sin el conocimiento previo, determinado en una teoría concreta de la revolución al respecto, resulta imposible que ninguna realidad se puede transformar ni mucho menos cambiar estructural e históricamente.
Por eso el conocimiento fundamental de la realidad económica productiva, monetaria-financiera y comercial del sistema capitalista en nuestro país y en general es estratégicamente básico en nosotros-pueblo, para poder transformarla y cambiarla con determinación histórica de ciencia de la revolución. Y este es el sentido que contiene este nuestro análisis crítico del conocimiento constructivo que aquí presentamos.

2.- ¿QUÉ ES EL AJUSTE CAMBIARIO?

En principio, aclaramos que esta es una medida de política monetaria estricta. Y la política monetaria, en términos de política financiera, usa cuantitativamente el dinero como variable fundamental para regular y mantener el equilibrio y la estabilidad económica productiva del país. Por supuesto, la política monetaria tiene que ver con el mercado del dinero, y en esa dinámica se combinan las tasas de interés del dinero interno nacional (el bolívar) con la del dinero internacional –relación en la que media el tipo de cambio (dólar)-, respecto a los precios de los bienes producidos y del comercio nacional.
Luego, para responder a la pregunta en cuestión en su fondo histórico, esto tiene su raíz de origen en cómo se han venido estableciendo históricamente las leyes del movimiento del dinero y los tipos mismos del dinero, en sus relaciones de equivalencias con los bienes y servicios producto del trabajo, intermediados aquellos a su vez, por un tipo de valor que no es valor real sino todo lo contrario: el precio o los precios1. Allí empieza la primera gran contradicción del sistema capitalista. De dónde nace el valor del oro como dinero y del tipo de cambio, del dólar como dinero y que media la relación de intercambio por el precio. Y en la carencia total y la escasez en ambas en términos de precio, se determina la tasa de ganancia como base de la explotación y expoliación del trabajo humano total, en términos de plusvalía. La plusvalía se realiza, tanto en el mercado nacional como así en el mercado mundial, mediante la realización del precio de ganancia del capital. Y todo lo humano es entonces un gran mercado para y del capital2. La escases rige el valor del dinero y fija al precio como valor, más todavía si la economía de un país es de pequeña escala y baja intensidad de capital como lo es  el nuestro, respecto a la de los grandes países dominantes de la economía mundial3 que lo arropan y lo subyugan con los productos de alta tecnología. Esto no lo toman en cuenta los economistas y políticos de la derecha nacional. Pero lo peor es que juegan políticamente a su favor con los resultados negativos contra los trabajadores y las poblaciones que producen sus mismas leyes.
Y así, en los hechos históricos conocidos, como a partir de las modificaciones (1969) que hicieron las estructuras de poderes de dominación mundial a los denominados Acuerdos de Bretton Wood de 1944 para reordenar el trabajo internacional y la maximilización de la ganancia, el imperialismo norteamericano-europeo primero, hizo un cambio cualitativo de la determinación del oro como dinero circulante que servía de patrón referente a toda moneda o billete; el oro entonces pasó sólo servir de dinero de atesoramiento con aumento de su valor onza troy libre, y no de circulación; y segundo, creó la circulación del papel moneda determinada en el dólar como moneda tipo de cambio no convertible –sustentado en los Derechos Especiales de Giro (DEG). Los DEG eran dinero-billete de unidad de cuenta del FMI, luego ese papel lo borró la dinámica del dólar. Esto es importante reseñarlo para poder tener una mejor comprensión de las leyes y mecanismos de funcionamiento del dinero en general, en relación a nuestro tema: el Ajuste Cambiario.
Ahora, de cómo circula el dinero-billete y las monedas dado el cono monetario tiene la misma determinación de la ley con la que se mueve el oro como dinero de atesoramiento para obtenerse reservas internacionales o divisas. Sin embargo, sus efectos y resultados son totalmente diferentes. Mientras el oro se mantiene como dinero éste pasa de la circulación a ser atesorado, y viceversa, para circular como fuente de obtención de divisas y conservar más tiempo su valor real. En cambio, en la circulación de la moneda-billete nacional como dinero no existe el atesoramiento, y sólo sirve para mantener la correlación inmediata (seipsistente) entre la suma de los precios de las mercancías y servicios que se compran diariamente con la cantidad de dinero respectiva a dichos precios momentáneos, de circunstancias. Ahora, hay que tener en cuenta que, dado por la presión del comercio y el sistema financiero internacional, “los precios suben de ayer para hoy y de hoy para mañana” y transforman el tiempo en función del dinero por el precio”4, alterando a su vez, desbalanceadamente en términos de precios de transferencia5, la correlación entre la suma de los precios de las mercancías y servicios respecto a los de la cantidad de dinero circulante nacional, y así sucesivamente. A este proceso devastador del valor real tanto del dinero nacional como así del producto de los bienes del trabajo humano total lo denominan los expertos económicos capitalistas: “El efecto Transferencia” y en inglés: Exchange rate pass-through to domestic prices.
Así se mueven diariamente los grandes centros comerciales y financieros de Wall Estreet, Londres, Tokio, Hong Kong y pare usted de contar. Esta es una ley de doble presión diaria y cotidiana de desgarramiento del valor real de nuestro signo monetario nacional, el bolívar, la que se ejerce precisamente mediante el tipo de cambio, el dólar. Porque el dólar como dinero en términos de bien también sube su precio en los mismos vaivenes del mercado mundial y absorbe y transporta inflación con deterioro del valor de las monedas más débiles como nuestro bolívar6. Y esta doble presión no la impone nuestro gobierno, tal como pretenden hacer ver los voceros de la derecha golpista y contra revolucionaria. La impone sí el mercado mundial con su rey de la batuta el dólar. El hecho es que el precio del dinero y de los bienes y servicios, todo precio, se forma en el mercado mundial e influye determinantemente en el mercado nacional, destruyendo irremisiblemente el valor de nuestra moneda interna.
Por consecuencias, a diferencia del oro como dinero el bolívar-dinero nacional no tiene ningún valor de atesoramiento ni  de circulación internacional no más que referido al tipo de cambio, y, más bien, queda cada vez más fuera de ella en la medida que sube el precio del dólar con el que se relaciona; en tanto baja su propio valor nacional por efectos del doble desgarramiento nacional y mundial. Esto significa –por ley en que la moneda fuerte destruye a la débil- que el dólar se come al bolívar en el paso del tiempo. Así, irremediablemente, a mayor tiempo que pasa menor valor tiene el bolívar en lo interno respecto al valor del producto nacional que se obtiene de venderlos en el mercado mundial. Esto significa primero, que, en la medida que pasa el tiempo, recibimos menos dinero en divisas (y al cambio menos bolívares) por concepto de la venta de nuestros productos en el mercado mundial, principalmente el petróleo. Y por consecuencias, cada vez menos sirve nuestro bolívar para primero, comprar el tipo de cambio que se necesita (en lo inmediato) para obtenerse bienes necesarios en el mercado mundial porque el dólar viene siendo más caro. Y de la misma manera, cada vez menos nuestro bolívar nos sirve para comprar los bienes necesarios en nuestro mercado nacional, estadal, municipal y local de nuestras ciudades y barrios.   
Pero, -y con esto damos inicio de respuesta a la pregunta qué es el ajuste cambiario-, ¿Qué hacer en este caso, si el desgaste se hace iterativamente eterno? Se pregunta el gobierno (cualquier gobierno que sea), pues, se contesta a su vez, “reajustar porcentualmente los términos cuantitativos de la relación bolívar-tipo de cambio, para aumentar los ingresos nacionales que se reciben por las ventas de nuestros productos en el exterior: el petróleo y otras exportaciones no petroleras”; y en este caso, este reajuste significa aplicar un tanto por ciento mayor al monto en bolívares que cuesta comprar un dólar (tipo de cambio), y luego, a partir de ahí se fija el nuevo monto que habrá de costar el tipo de cambio o dólar, tal como lo hizo el gobierno: un dólar que costaba el día 15/02/2013 Bs. 4,30 se le aplicó un 46,5% de aumento y el resultado sería el nuevo valor del tipo de cambio, válido para comprar y vender a nivel internacional a partir del día 16/02/2013 con Bs. 6,30. Esta es entonces, una política expansiva de la masa monetaria del país.
Por consecuencias, en cuanto a ¿Qué es el Ajuste Cambiario? Respondemos: Es una determinación de política financiera nacional relacionada con el mercado de divisa en el ámbito internacional, que busca obtener, -mediante la readaptación proporcional, más o menos (+ ó -) del tipo de cambio-,  más ingresos por nuestros productos nacionales vendidos en el mercado mundial. Y así, de esta manera, expansionar la masa monetaria que circula en el circuito económico de nuestro país, mediante la modificación cuantitativa del tipo de cambio, que permita atraer ingresos provenientes del exterior por la venta de nuestros productos en el mercado internacional.
Se aplica pues, para eso, para aumentar y expandir la masa monetaria al interior de la estructura económica venezolana. No es meramente una política de orden fiscal directa para cubrir gastos inmediatos, ni que toca la estructura interna del bolívar, sino que es, en todo caso, una política económica preventiva para sostener, con aumentos relativos, los debidos órdenes monetarios previos existentes, a las políticas fiscales posteriores que se habrán de aplicar en lo adelante (2013-2019), fundamentalmente en términos de inversiones sociales, caso del financiamiento seguro de las distintas misiones entre las que se encuentran las de salud y educación. 
Pero, ¿Y qué se logra de positivo para el pueblo masa  con esa mediada en plan del socialismo científico? Ah, eso es otra cosa. Realmente de positivo en términos absolutos del socialismo no es mucho lo que se logra es verdad, y, en todo caso, solamente podríamos lograr algo si, simultáneamente, se buscan aplicar medidas de transformaciones revolucionarias previamente diseñadas a tal fin, las que no han habido en este caso.
Por supuesto, el establecimiento de una política monetaria-económica y de producción de transformaciones revolucionarias es vital para poder avanzar hacia la transición al socialismo por vía cada vez más firme.
No negamos que nuestro gobierno ha aplicado medidas de asistencia económica y social que favorecen al pueblo en su generalidad, lo ha hecho y bastante como ningún gobierno anterior.  Pero se han hecho bajo el contexto jurídico político y económico del régimen depredador capitalista; y por eso en términos relativos, en la intencionalidad  si se logra algo con la medida de ajuste cambiario, para seguir precariamente el camino dentro del mismo marco capitalista, intentando en un orden depredador profundizar las medidas a favor del pueblo con por ejemplo, aumento de la tasa de empleo. De allí se busca:
2.1.- Lograr parar momentánea y circunstancialmente el deterioro y depreciación del bolívar que causa la inflación incontenible. Y precariamente se llega a un equilibrio relativo  para una nueva dinámica de relaciones del valor bolívar con los precios de los bienes y servicios, que es apenas un resquicio muy mínimo, como ya lo sabemos.
2.2.- Si bien es cierto que todos los productos que se importan del exterior a nuestro país sufren una subida porcentual igual a la experimentada por el tipo de cambio, también es cierto que los montos monetarios que recibe el país en general, tanto el gobierno como así las empresas privadas y los particulares por la venta de sus productos, cualesquiera que estos sean, se incrementan en los mismo términos porcentuales del aumento del tipo de cambio. Esto es, si para todo caso, compramos más caro en el exterior, también vendemos más caro y recibimos más dinero por nuestros productos.
2.3.- El oro depositado en arcas como sustento monetario para la obtención segura de divisas en el exterior aumenta su valor en masa monetaria, en términos del aumento porcentual del tipo de cambio. Y nuestro país pues, tiene bastante oro.
2.4.- Como ya se ha señalado, se expande preventivamente la masa monetaria para sostener la política de desarrollo de industrialización con sus acompañamientos científicos y tecnológicos, en todas las áreas fundamentales de la producción económica, claro está bajo el contexto capitalista, para alcanzar una tasa más elevada del rendimiento económico con mayor absorción de empleo y producción de bienes diversificados.
2.5.- En los aspectos operacionales y de la distribución institucional legal de los ingresos petroleros, los efectos positivos del ajuste busca modificar incrementalmente los porcentajes y cuotas de participaciones previstos en la Ley de Contribución Especial por Precios Extraordinarios y Precios Exorbitantes en el Mercado Internacional de Hidrocarburos, que van dirigidos desde PDVSA hacia el Banco Central, a el FONDEN y a la ONT.
2.6.- Por último, teniendo en cuenta la entrada de Venezuela al MERCOSUR, Organismo multilateral latinoamericano que representa un mercado bastante grande –de unos 250 millones de habitantes- para el incremento de las relaciones productivas, financieras y comerciales y científicas culturales para Venezuela y su estructura económica con todos esos países,  con esta medida también se busca reajustar (circunstancialmente) el movimiento de la estructura monetaria-financiera disminuida, y la que es centro dinámico del movimiento de la estructura económica y comercial interna para ponerla a tono con las nuevas circunstancias dinámicas latinoamericanas e internacionales en general. 

3.- ¿QUÉ ES LA DEVALUACIÓN?

Teniendo previamente en cuenta que el precio como ya lo hemos señalado, -dentro de los términos de la epistemología económica y política-jurídica capitalista-, se fundamenta en la escases y en la carencia total de bienes (mercancías),  para responder a esta pregunta hay que considerar primero la acción devastadora histórica del sistema de precio internacional como determinante de “valor” para la ganancia del capital dada por el dólar como mercancía cara, así como también la presencia de todas aquellas monedas fuertes como el euro. Esto ha sido así a través de siglos en el sistema capitalista, se ha impuesto siempre el valor de la moneda fuerte sobre el valor real de la moneda nacional como mercancía barata. Acción la cual responde pues a las leyes económicas monetarias –de funcionamiento del dinero en su universalidad de vinculación indisoluble con los precios- que han establecido las estructuras de poderes de dominación de clases como hecho “científico” del conocimiento económico productivo y comercial de este dicho sistema capitalista, en términos de la ganancia de los capitales y las respectivas recomposiciones de sus masas crecientes. Estas leyes actúan en general con su acción aniquiladora exponencial y perenne sobre el valor real de las monedas nacionales incluyendo las más fuertes como monedas patrones-mercancías (dólar, euro, libra esterlina, etc.,), y en lo particular el dólar como tipo de cambio mundial. La particularidad de la acción devastadora del sistema de precio internacional sobre la moneda nacional como mercancía, influye y tiene que ver con la escases interna increscendo (iliquidez)  de dinero mismo. De allí la inflación indetenible histórica. Y de allí la pérdida de valor del bolívar en términos de su depreciación constante e imparable, como virtud natural de la escases y carencia total con la que funciona y opera el mercado capitalista.
Pero sin embargo, pese a eso, en nuestro caso nacional, los economistas y expertos no toman en cuenta esa acción de aniquilamiento sistemático como otro mecanismos distinto que ejerce a lo interno de nuestra moneda nacional el precio internacional trasladada del mercado mundial a nuestro predio nacional mediante el dólar como tipo de cambio y moneda patrón o dinero caro.
Se remiten pues –cual enunciado condicional parcial sobre el hecho- sólo y exclusivamente a considerar la pérdida de valor de nuestro signo monetario cual ¡¡Devaluación¡¡, y como producto de la inflación interna nacional cual componente principal que enuncia el hecho. Este es un juego de manipulaciones semánticas mediante el manejo perverso de las funciones semióticas y semiológicas del lenguaje. De manera que así, la única culpa la tiene el gobierno nacional de turno, como único culpable. Y en nuestro caso actual, peor aún por parte de las acusaciones de la derecha golpista, si este gobierno es de izquierda, bolivariano, chavista.
Empero, ante esta ¡¡”Devaluación¡¡” imparable, la gran contradicción que enfrentamos con nuestro signo monetario es su pérdida de valor real irremisible e irremediable –por cierto, valor que la teoría económica neoliberal no reconoce sino como valor representativo- ante las monedas fuertes, especialmente el dólar. El bolívar está amarrado y condenado como ya lo hemos señalado, tanto y cuanto moneda “mala” o “débil” a que el dólar se lo coma a dentelladas plusvalorativas de los capitales transnacionales.  Y por eso tiende a desaparecer como dinero mismo con el desbalance deficitario de nuestra balanza comercial y de pagos, porque no nos sirve para poder comprar en el exterior de manera directa los bienes y servicios que necesitamos cada vez más. Y de allí entonces surgen las maromas y tramoyas que se utilizan en este sistema capitalista para compensar precariamente esa dicha pérdida de valor expandiendo la masa monetaria, para poder comerciar a lo interno con dinero “de baja ley” y en lo externo con el dinero “de buena ley” para poder adquirir bienes y recursos necesarios a la vida del país. Aquí esa contradicción básica toma la forma que, aunque usted no la crea, – en el sospesar calidad y cantidad del dinero- se tiene que aumentar la cantidad de nuestro dinero (que es dinero malo) para poder comprar dinero bueno, el dólar, en beneficio de la calidad de éste. Porque lo dicho, es el único aceptable en el comercio exterior. Es ley impuesta por el imperialismo europeo en principio y hoy norteamericano. Esta relación entre dinero fuerte y débil se extiende así en detrimento de la política económica nacional misma, con los resultados históricos de hoy, aquí y ahora sin que pueda ser alterada nunca.
Esta historia es sumamente larga. Y, -aún con todas sus diferencias coyunturales históricas específicas para cada caso- viene siendo la misma desde que se instituyo la primera República por parte de nuestros libertadores en 1811, con el decreto de la “Ley para la creación de un millón de pesos…”.
Veamos lo que nos dice el Volumen VI, tomo I, Monedas Venezolanas del Banco Central de Venezuela, Caracas 1961, página 67 en la que se recoge el período 1830 a 1863: “Al consolidarse la independencia, la necesidad de bienes de todas especie que tenía el país favoreció un activo comercio con el exterior... El abandono de actividades productivas a causa de la guerra, hizo imposible que este comercio se hiciese a cambio de bienes nacionales, acentuándose cada vez más el déficit de la balanza comercial. Las mercancías importadas debían pagarse en moneda aceptable en el exterior, de manera que la plata fuerte, adquirida con primas, fue desapareciendo de la circulación. De este modo se originó un comercio con el propio dinero. Se importaba dinero de buena calidad y se vendía a precios que excedía su valor intrínseco. La ganancia encarecía naturalmente las mercancías y al fin y al cabo las monedas volvían a salir del país en pago de importaciones. Solo quedaban para las transacciones internas las monedas de baja ley, gastadas y cercenadas, a pesar de lo cual, y por su escaso número, se vieron también sobre valoradas”7
Véase que aquel viejo problema de que “Las mercancías deben pagarse en moneda aceptable en el exterior” y el “De este modo se originó un comercio con el propio dinero”, persiste hoy exactamente igual. Y los hechos porfiadamente se repiten. En la página 68 siguiente de dicho tomo I se nos informa: “Las limitaciones impuestas por las leyes y disposiciones gubernamentales trajeron más inconvenientes que beneficios, en vista de lo cual la Sociedad de Amigos del País, basándose en las teorías liberales, propuso que el gobierno suspendiese toda reglamentación y dejase al libre juego de la oferta y la demanda la fijación de los cambios”. Esto es exactamente lo que predice la teoría económica neoliberal de hoy: Primero desregulación jurídica que liquida el derecho de los trabajadores (ajuste estructural). Y, segundo, dejar al libre juego de la oferta y la demanda la fijación del tipo de cambio (política monetaria de balanza de pago), para que el flujo monetario del país dependa del exterior. A esto se llama hoy (política neoliberal): “Inserción del mercado nacional al mercado mundial”. En aquel tiempo no sirvió a las necesidades del pueblo, y hoy tampoco, porque su diseño histórico no ha sido para ello. Se  acudió entonces al mecanismo de acuñación de la moneda como solución. Pero esto creó nuevos problemas que recaen sobre la misma moneda por otros medios y mecanismos: los referidos a la propia depreciación interna nacional de la moneda o signo monetario (sic, vis a vis), y que denominan eufemísticamente “¡Sobrevaluación¡”.
Como otro componente del gran problema básico del país es la obtención de dinero a como dé lugar, la acuñación de dinero interno resuelve momentáneamente dicho problema, pero, irremediablemente crea otros. Como es el de la sobre saturación monetaria del circuito económico, la que generalmente no se puede medir con exactitud. La sobre saturación monetaria del circuito económico –según establece la teoría cuantitativa del dinero- ejerce presión violenta sobre la oferta de bienes y servicios con elevación irregular de los precios por sobre acción de la demanda, de acuerdo con las ecuaciones de campo de Newcomb e intercambio de Fisher.
Pero el hecho es que, para todo caso, -y aquí empezamos a dar respuesta a ¿Qué es Devaluación?-, al emitirse más moneda nacional por acuñación o se revaloriza dicha moneda con un valor más allá del que se posee estructuralmente en su equivalencia con bienes tangibles, se tienen que aplicar correctivos que recaen directamente sobre el valor momentáneo interno de la moneda para equilibrar el flujo monetario total circulante respecto al no circulante. Esta acción se corresponde con la denominada “Política Monetaria Restrictiva”. En este sentido se conocen tres mecanismos que permiten realizar estos correctivos internos de la moneda: uno, revalorizar los bienes activos; dos, extraer dinero del circuito monetario (operación de mercado abierto); y tres, depreciar la moneda o, para todo caso, devaluarla en su valor unitario convencional e inmediato (seipsistente). Este último mecanismo consiste sencillamente, a partir de un determinado momento, en reducir porcentualmente el valor unitario de la moneda nacional, y luego de ese momento el valor del bolívar es otro menor; disminuido en el porcentaje en el que se ha depreciado dicha moneda.
La particularidad del efecto de esta medida de DEVALUACIÓN es que la depreciación porcentual unitaria del bolívar actúa con efecto multiplicador inversamente proporcional sobre toda la masa monetaria circulante en el país y directamente proporcional a la masa depositada en bancos, en término del reajuste de todos sus bienes tangibles respectivos: a más término porcentual que recae sobre la moneda menos masa monetaria total se obtiene en el circulante público. Y por consecuencias, obsérvese que este efecto no ocurre con la medida del ajuste del tipo de cambio como mecanismo regulador expansivo de la masa monetaria total. Y esto pues, nos permite ver que el ajuste cambiario no es igual a la devaluación como nos lo intentan vender convencionalmente por un lado, la rubicunda desfachatez de la derecha capitalista y, por el otro, la inopinada credibilidad de algunos economistas y técnicos del gobierno y del PSUV. En este caso, no es exigente la demanda de dinero si no de bienes y de servicios, con aumento de los precios de dichos bienes y servicios; sin que sea alterado negativamente el total consolidado de las reservas bancarias. Aquí quien paga la disminución de la masa monetaria total circulante por la devaluación es el pueblo. La paga de manera directa e inmediata, al momento mismo de producirse la devaluación.
Por ejemplo, suponiéndose que Venezuela tiene una masa monetaria circulante de Bs. 1.000.000.000, y luego se la agrega una emisión de billetes de Bs. 1000.000.000 más, para llegar a una masa de Bs. 2.000.000.000; y teniéndose así una sobre saturación dineraria de un 100% que recalienta la circulación del circuito económico-monetario; des-balanceándole a su vez, la relación de equivalencias entre bienes y dinero y viceversa en la que los precios aumentan de manera abrupta e imparable, de acuerdo con las teorías Monetaria y Cuantitativa del Dinero. Se tiene así más dinero que bienes, que es el núcleo del supuesto de dichas teorías Monetaria y Cuantitativa. Y por consecuencias, el dinero puesto en el platillo de la balanza inclina el fulcro hacia la subida explosiva de los precios de los bienes y servicios, porque se supone que se tiene más dinero en el bolsillo de las gentes que bienes en las estanterías de los supermercados, abastos y bodegas. Se crea así una situación de inflación explosiva por carencia total de bienes, por ¡Escases de bienes¡ (ley de “sobrevaluación” capitalista)  
Y ante esta situación entonces, ¿Qué hacer? Pues, las autoridades monetarias, el BCV, recurren a depreciar previamente el bolívar en un porcentaje igual al 50% de su valor actual. Y se tiene entonces, un bolívar DEVALUADO que cuesta, a partir del momento en que se aplica la depreciación, 50% menos de su valor. Porcentaje de depreciación  con el que a su vez se permite reajustar y equiparar -cuantitativamente la masa total del circulante (Bs.2.000.000.00,00) devaluado (depreciado previamente)- con los términos del valor de los bienes y recursos económicos tangibles desbalanceados que se tenían frente los Bs. 2.000.000.000 circulantes; y pues entonces se pueden reducir equiparadamente los Bs. 2000.000.000x50% =  Bs. 1000.000.000; y parar consecuentemente, en supuestos, la presión inflacionaria en términos de subidas violentas de los precios de los bienes y recursos tangibles, necesarios a la vida diaria de la nación. Por supuesto, la acción inmediata que genera la devaluación es, cuantitativamente exactamente eso, reducir la masa monetaria total, pero cualitativamente con efecto contrario a sus objetos: reproduce la subida inmediata de los precios de los bienes de primera necesidad, fundamentalmente los alimentos y pues, en general en el resto de la masa dineraria restante al restarle su valor real en el porcentaje aplicado. Cosa que no se da con el ajuste del tipo de cambio.
Desde luego, aquí, en este caso, podemos apreciar sin hacer muchos esfuerzos de comprensión y entendimiento que, en este ejemplo, la depreciación toca directamente la estructura interna de la moneda nacional, el bolívar, en términos negativos de todo el cono monetario que define sus distintas expresiones de valores reales.  
Y este último mecanismo de regularización del dinero en general es el que corresponde a la Devaluación del signo monetario, que es totalmente distinto al del ajuste cambiario.
Y respecto a la pregunta ¿Qué es Devaluación? Respondemos: La devaluación es un mecanismo que se aplica para depreciar porcentualmente y cualitativamente el valor interno de la moneda, y cuya aplicación busca hacerse extensiva a la masa monetaria total del circuito económico del país para reducirla en su masa. Contrario al ajuste del tipo de cambio, la devaluación es una medida de contracción de los volúmenes monetarios circulantes.
Es una medida de carácter fiscal que tiene que ver con los recursos monetarios circulantes que necesita reajustar el gobierno, regularizando a su vez dicho flujo con respecto a los precios para lograr el equilibrio económico interno nacional relativo, en lo inmediato, frente a una presión inflacionaria desatada. Pero, surge una pregunta obligada, ¿y qué pasa con la pérdida de valor real (por la devaluación) de las masas de dinero depositada en los bancos? ¿Sufren los propietarios privados esa pérdida de valor de sus masas de dinero depositada en los bancos, lo mismo que las del gobierno que aplica la devaluación de la moneda? ¿Qué dice esa derecha golpista y FEDECÁMARAS a esto? ¿Los perjudica la devaluación real del bolívar en cuanto al rendimiento de dinero inorgánico (fácil y gratis) de sus capitales y que los paga el pueblo-muchedumbre a costa de la depauperación de sus niveles de trabajo y de vida cuando el BCV realiza una ¡¡¡DEVALUACIÓN REAL¡¡¡ de la moneda? ¿Por qué no gritan voz en cuello que la devaluación real les incrementa sus capitales cuantitativamente en los mismos términos porcentuales en los que se devalúa la moneda, en este caso nuestro bolívar, y que esta devaluación sí les conviene?
Una reflexión acerca de la definición de este término de devaluación respecto a la confusión cual engendro de la derecha contra revolucionaria, y que han coreado irresponsablemente los economistas del equipo económico por un lado y, por el otro, del PSUV Jesús Farías y Víctor Álvarez. Debido a que una definición –dada como categoría y/o concepto, que es asunto de los lógicos y de los metodólogos- constituye la explicación del significado del término en cuestión, es sumamente importante que se tomen en cuenta los diferentes sentidos del significado de dicho término. Consecuentemente, en este caso se trata de asociar un sentido o referencia histórica de significación técnica de lenguaje monetario-financiero a un signo de enunciado económico principal, cual determinación precisa de la referida definición. De allí que, ateniéndonos a las técnicas más simples de la lógica modal, una definición tiene dos grupos de significados a los que puede asignarse: uno es el del significado extensivo y el otro es el intencional de su objeto. El significado de este último se corresponde con la intencionalidad a la que es aplicado dicho concepto en el ámbito monetario. Y el del primero es que el significado de un término consiste en los objetos a los cuales (devaluación) puede aplicarse más ampliamente o extensivamente en lo económico. Por ejemplo, para este caso de la definición de devaluación, su significado no es extensional o denotativo (necesariamente) al de ajuste cambiario, que es connotativo en lo estricto de su aplicación. ¿Qué queremos decir con esto? Lo siguiente: en economía todo concepto (categoría) tiene su justo lugar en el que encaja en su funcionamiento en la dinámica de la estructura de significaciones (referencias históricas) a la que pertenece y así, como pieza de los andamiajes de este sistema funciona, opera. De esta manera, el concepto de devaluación encaja dentro del contenido significativo –monetario financiero- de la moneda de que se trate (sea dólar, bolívar, peso, real, marco, etc.) y ocupa su lugar como categoría específica en cuanto a mantener o no el valor de esa moneda, de acuerdo con política de autoridad legal (BCV). A partir de allí entonces (la devaluación) opera como un mecanismo con sus funciones propias para afectar negativamente a la moneda depreciándola en plan numérico negativo; funciones las que afectan a lo moneda según y de acuerdo con un marco de relaciones particulares y específicas establecidas (previamente) en relación con los precios en términos de nuevos y más altos costos de los bienes y servicios. Es a partir de ahí que arranca todo este extraordinario complejo de cosas sustentado en la regularización de los precios respecto a la sobre valuación real anterior de la moneda nacional. Es decir, la devaluación toca directamente al valor (ahora y aquí)  de la moneda, unitariamente el de ella, acción que no puede asignarse arbitrariamente como equivalente al contenido significativo de otro término o concepto de técnica económica, -como lo hace la derecha capitalista- (con dicho término devaluación) como sinónimo del mecanismo ajuste del tipo de cambio. En este caso, ajuste del tipo de cambio no es sinónimo de devaluación, por no ser extensible (denotativo) el significado de devaluación al de ajuste del tipo de cambio. De la misma manera, la definición del ajuste del tipo de cambio, por su definición intencional, no es extensible (denotativa) a la definición devaluación por no tener objetivos técnicos intencionales similares ni idénticos. Por consecuencias, aunque por causas de especulación, de acaparamiento, ocultamiento, desaparición o destrucción ex profesa de bienes; por remarcaje y alteración de precios, por dolos o robos descarados mediante contrabando, se engendren escases, grandes carencias de bienes alimenticios, medicinales, etc., y el signo monetario, el bolívar, por consecuencias de inflación violenta disminuya, sea depreciado en su poder de compra en manos de los más pobres,  no es atribuible ni aplicable analogía alguna entre los conceptos de Ajuste del Tipo de Cambio  al de Devaluación. La inflación determinada por el incremento iterativo del tipo de cambio (dólar) en este caso, es consecuencia de la depredación histórica subsecuente de la ganancia del capital en su estructura de sindicación financiera total, que afecta negativamente a todo el sistema capitalista mundial.
Para cerrar esta parte, hemos demostrado analíticamente que el ajuste cambiario técnicamente no es lo mismo que la devaluación. Y si bien con uno y con otro mecanismo siempre la moneda nacional sufre pérdida de valor y se deprecia la moneda porque, en general, los precios siempre están subiendo de manera imparable, ambas pérdidas no tienen el mismo carácter instrumental y operatorio, que es lo que hay que saber distinguir respecto a las manipulaciones perversas de la derecha capitalista en su plan político desestabilizador contra el gobierno legítimo actual.
Pero hay un hecho que queda como duda en el aire, y es ¿Por qué los economistas y expertos de izquierda y de derecha sostienen al unísono que “el ajuste del tipo de cambio es devaluación o lo mismo que depreciación de la moneda”? En este hecho se pone de manifiesto la posición maniquea de la interpretación del concepto devaluación para el bien y para el mal que hacen los capitalistas, según les convengan, y que los expertos y economistas de la izquierda y del gobierno bolivariano les corean, unos por complicidad manifiesta y otros por ignorancia crasa. Claro sí, la devaluación de la moneda pasa primero por la depreciación, pero, como lo hemos demostrado, ambos términos no son asimilables como iguales (por su definición intencional misma). Pasa que, a partir de 1984, por la gran presión de la deuda de sus gobiernos, y utilizando la tesis malsana de que “en un proceso inflacionario el deudor neto sale ganando frente al acreedor neto” la burguesía empezó a utilizar de manera abusiva el ajuste del tipo de cambio como mecanismo que favorecía el rendimiento de sus capitales a costa del crecimiento constante de la inflación. En contra del sostenimiento  de la estabilidad económica del país con el mantenimiento de un tipo de cambio controlado como lo habían llevado los gobiernos anteriores, y sin  preocuparse por mantener el equilibrio del sistema financiero en su unidad de circulación interna con la externa tal como se había mantenido incluso con el gobierno de Pérez Jiménez, esa burguesía apátrida con sus gobiernos jugó al remedo de  una política de   exportaciones siguiendo los dictados estratégicos de la nueva política neoliberal que se imponía en esos momentos. Política con la que el Fondo Monetario Internacional se proponía la inserción de las economías nacionales a la del mercado mundial. De allí que se buscó igualar el precio de los productos nacionales al del precio del mercado internacional, de manera que la masa de ingresos que recibiera el país tuvieran un sola vía de llegada, la del flujo externo. Y por eso se adoptó el mecanismo de aplicar el ajuste del tipo de cambio de manera iterativa e imparable, al punto tal que de un tipo de cambio de 4,30 del 18 de febrero de 1983 se pasa a un tipo de cambio de 564,00 en 1998. El resultado fue que la burguesía aprovechó de manera leonina todos los recursos del Estado –tal y de la misma manera que lo utilizaron bochornosamente todas las burguesía de América Latina con la ejemplificación más  brutal de la del Brasil-, con un proceso de pérdida de valor real de la moneda de 13.116% en 15 años, y que incide negativamente con mucho más peso en el cada vez menor poder de compra de las poblaciones pobres –como ocurrió con la gran crisis que produjo “El Caracazo”. La real y verdadera devaluación no la podían utilizar como su mecanismo de engorde de sus capitales por dos razones, una era porque les era imposible sostenerla de manera repetida ante los brutales desgastes in situs del bolívar y disminución simultánea del poder de compra de las poblaciones con depauperación acelerada y exponencial de los niveles de vida y la otra, porque sus dichos capitales los trasladaban en lo inmediato al exterior, y porque además crearon el Fondo de Inversiones de Venezuela para que el flujo extraordinario de divisas por ingresos petroleros no pasara directamente al circuito de circulación monetaria. Por consecuencias, siempre el total de la masa monetaria que circulaba en el circuito nacional no definía un torrente de “sobre calentamiento del circuito económico” al uso neoliberal que justificara aplicar la devaluación tal y así devaluación.
Por ejemplo, donde  sí se aplicó una devaluación real fue en los Estados Unidos. En 1971 dado el extraordinario crecimiento del déficit de su balanza de pagos –ocasionados por los enormes gastos de la guerra de Vietnam-, lo que acarreó una muy seria desconfianza en diversos sectores internacionales que se relacionaban con ese país, por dicha iliquidez manifiesta, y quienes –en reunión de representantes de las diez monedas principales Washington diciembre de 1971- llegaron a sostener que el dólar no tenía el respaldo monetario requerido en oro, y que por tanto, el valor de dicha moneda no era el correspondiente a su cotización. Consecuentemente las autoridades norteamericanas (la Reserva Federal) tuvieron que aplicar en lo inmediato la devaluación del dólar en 8% de su valor real anterior, y libraron la no convertibilidad del dólar en contra de los acuerdos de convertibilidad de las monedas de los distintos países con el Fondo Monetario Internacional, además de gravar las importaciones con 10% para frenar la salida de dinero. Más aún, la enorme presión del déficit de la balanza de pagos y fiscal era tan poderosa en los Estado Unidos que luego, en febrero de 1973, el ejecutivo norteamericano tuvo que volver a devaluar el dólar en 10%. Incluso, ya mucho antes, en 1933, bajo el influjo de la gran crisis provocada por el gran crack de 1929, tal como lo expone Marrimer Eccles ex presidente de la Junta de la Reserva Federal norteamericana bajo la presidencia de F. D. Roosevelt: “Los dirigentes de la administración en estas primeras semanas no se dieron cuenta de la urgente necesidad de restaurar el poder adquisitivo nacional. Pretendieron hacerlo elevando los precios de los artículos a través de la devaluación (40%) del dólar en términos del oro. Visto a la inversa, pretendieron elevar los precios de los artículos aumentando el precio del oro en términos de la depreciación de los dólares”.  Allí si no si no cabía por ningún respecto el ajuste del tipo de cambio si no la devaluación (ver Eliot Yaneway, Economía de las Crisis, Plaza & Janes, S. A Editores, 1978, Páginas 201-202 y 326). Pero en todo esto --aún teniendo el gobierno norteamericano más de la tercera parte del oro del mundo entonces-, el hecho era (como lo es hoy), ¡¡La falta de liquidez monetaria¡¡.
 Por eso, por lo dicho anteriormente, ante la voracidad ilimitable e interminable de los grupos económicos y financieros de esa burguesía es que aquí en Venezuela y en general los economistas y experto de derecha juegan a confusión con este concepto de devaluación. Porque aquí por ejemplo, en el último año de gobierno del Dr. Rafael Caldera en 1998, “apostando a la devaluación” –como lo señala Leyla Cahue en un artículo de la revista Zeta del 09 al 20 de julio de 1998- “los bancos todo lo invirtieron en dólares” y había carencia de bolívares entonces. Y como ya no podían jugar incrementando las relaciones del tipo de cambio con un alza desmedida de las tasas de interés activas y pasivas tal como estaban, entonces acudían al endeudamiento.
Era tanta la subida explosiva de los precios que las tasas activas y pasivas llegaron al promedio entre un 65 y 90%, en tanto la tasa interbancaria (“overnight”) avanzaba superar el 200%. De allí que, sobre la base de mantener un tipo de cambio fijo,  la utilización del mecanismo del ajuste del tipo de cambio si les era mucho más propicio y, junto con el endeudamiento, aquél se adaptó mejor a sus objetos de saqueos de los bienes del Estado y expoliación descarada de la población nacional mucho más que la devaluación. Incluso en esto es bueno observar que el tipo de cambio fijo, tal como aquí se intenta sostener, se presta como presa fácil para la utilización de todos los tipos de especuladores y ladrones de divisas que viven a costa del mercado negro y las casas de cambio. El intento de cambio fijo de la denominada Comunidad Económica Europea instaurado en 1992 fue objeto de la voracidad de esos ladrones y causó su derrumbe. De allí que “la Devaluación” cobra entonces, en la jerga comercial, todos los tipos de representaciones que les viniera en gana: “desgaste del bolívar”, “depreciación”, “especulación” “Disminución” “pérdida”, etc., y dispuesta a todos sus usos y abusos por la burguesía, sus políticos y sus economistas y expertos mediante el ajuste del tipo de cambio que se les presta para todo.
A los efectos de “su” política de exportaciones, la  justificación era y es que la “devaluación”, mecanismo falso de la (ley de) elasticidad del precio favorece la demanda de productos nacionales en el mercado internacional; por consecuencia la burguesía exportadora venezolana –por cierto con muy limitado porcentaje de producción para la época y hasta el presente- utilizó ese mecanismo de destrucción de valor de nuestra moneda nacional amarrado al botalón del dólar para que se lo comiera, como su medio de aumentar sus exportaciones con rendimiento triple de las  ganancias de sus capitales. Y tal como lo hemos expuesto en las páginas 13 y 14, el aumento constante de la relación bolívar/dólar como moneda patrón acarrea a la larga el desgarramiento del valor real del bolívar a término incluso de desaparición o muerte (Estabesco) lenta de nuestra moneda, y por consecuencias, las aplicaciones constante de los aumentos de los ajustes cambiarios crearon la denominada eufemísticamente “devaluación del bolívar”. Claro, en tanto que la deuda crecía y los productos de las materias primas decrecían en su valor monetario en el mercado internacional, esa burguesía apátrida y criminal se enriqueció cuadriplicadamente, porque encima de eso gran porcentaje de los créditos obtenidos por el gobierno de la banca internacional se los apropio y los trasladó a bancos del exterior. Y por esas razones, entre otras, los economistas y expertos de izquierda y de esa derecha criminal y perversa confunden indiscriminadamente devaluación como así ajuste del tipo de cambio; más aún, esos expertos esconden con su lenguaje técnico y abstracto de circunvoluciones los efectos criminales de las leyes económicas, con lo que se convierten en vulgares aguantadores del sistema capitalista de ladrones. Pero este es parte substancial de los objetivos básicos de la economía capitalista: la participación global del beneficio bruto en el valor añadido de los capitales depende del grado de monopolio de la empresa en la manipulación desmedida de los precios (coordinación macroeconómica-efecto transferencia)8, en tanto los volúmenes de beneficios realizados anualmente dependen del gasto de los capitalistas por expoliar a los trabajadores y trabajadoras y a la población en general. Seguidamente con este principio le sigue otro que lo complementa: la producción monetaria de capital sustituye a la producción económica industrial real para que la escases se haga extensible a todos los medios y formas del mantenimiento de la vida para maximilizar la ganancia. La gran crisis europea y norteamericana tiene este signo criminal e infrahumano.
Como ya lo hemos señalado, por este carácter depredatorio mismo de las leyes de la producción económica y comercial del sistema capitalista en su origen, la pérdida de valor de la moneda es resultado de la explotación y expoliación del trabajo humano total con destrucción histórica del mismo, incluido el trabajo de los capitalistas cual contradicción fundamental oculta de las leyes de existencia de este sistema y, además, a la larga del tiempo, genera la muerte del sistema capitalista de manera irremediable e inapelable en su determinación de valor estabesco-productivo. Esto último es otra (la tercera) de las grandes contradicciones fundamentales de la economía capitalista; y que es un asunto el que tenemos que buscar sus explicaciones bien claras y sin lugar a dudas, respecto a la iliquidez monetaria que agobia a las naciones en general, especialmente las más desarrolladas y de mayores concentraciones de sus gigantescas masas de capitales: Europa y los Estados Unidos.
Ahora, repetimos, más abajo del mero problema técnico de que si el ajuste cambiario es igual o no a la devaluación y viceversa –que es un asunto que a nosotros realmente no nos preocupa la vida porque el sistema está diseñado para explotar y destruir el producto del trabajo-, está presente el hecho de la confusión de un término con el otro de manera malsana y perversa por parte de la derecha contra revolucionaria que viene “denunciando” la derecha golpista, ya no la medida como ajuste cambiario, sino de ¡¡¡DEVALUACIÓN¡¡¡ Y por tanto, para ellos es “¡Una medida criminal del gobierno bolivariano  contra los salarios de los trabajadores y los pírricos ingresos de las amas de casas y del resto de las poblaciones pobres¡” como si los pobres les importaran conchas de ajo a ellos. Y de la devaluación ellos pasan a endilgarle el cognomento de “¡Paquetazo Rojo¡” “de Nicolás Maduro”. Y así, con “la devaluación” y “el paquete” La derecha golpista y criminal manipula las significaciones técnicas de los términos a placer haciéndolas extensivas por los medios de comunicación coreados por algunos economistas del gobierno y del PSUV. Manipula el lenguaje en la comunicación del mass-media, favorecida además por la falta de respuestas de los técnicos de nuestra parte, de la izquierda. Y, como en el contenido de un poema, grita un enunciado de contenido agradable vociferándolo melodramáticamente triste, e intenta  abrir con ello, puertas libres al desorden mental con anarquía en el seno de las poblaciones desprevenidas e ingenuas, para llenarlas de terror, ante “la terrible” posibilidad que esta ¡¡¡”DEVALUACIÓN”¡¡¡ de la moneda lleve irremediablemente al país a un estado de caos inflacionario con encarecimiento de los alimentos y demás bienes necesarios para la vida familiar per se. De manera que si los economistas y expertos en materia monetaria, financiera y económica de la izquierda y del gobierno – que se supone son los que saben de estas cuestiones tan complejas y complicadas para los demás mortales mayoritarios-, confirman que, exactamente como lo “denuncia” en paroxismo demencial la derecha golpista de Primero Justicia, AD, COPEI, Un Nuevo Tiempo, Fedecámaras, la iglesia católica, etc., si es ”¡¡¡DEVALUACIÓN¡¡¡” cual lo mismo ajuste cambiario la medida tomada por el gobierno, entonces hasta los mismos contingentes poblacionales de la izquierda y el chavismo y en general las grandes masas populares que apoyan al gobierno, entran en dudas y desconciertos acerca de lo perjudicial de estas dichas medidas de ajuste cambiario. Y eso está ocurriendo en el seno de la misma izquierda honesta, revolucionaria y nuestra ella. Efectivamente, dentro del chavismo todos hablamos de devaluación.
Pero esto tiene más intenciones perversas y criminales escondidas y agazapadas dentro de la significación misma del término devaluación respecto al de ajuste del tipo de cambio que la derecha malsana nos sembró. Una es, -aprovechándose del desconocimiento de los mismos técnicos del gobierno y partidos de la izquierda y de las poblaciones sobre las significaciones manipuladoras de las teorías y mecanismos económicos-, que ellos esconden a su vez esas mismas determinaciones perversas de la economía con sus mecanismos categoriales y conceptuales con los que se explotan y expolian en práctica de todos los días a las grandes masas trabajadoras y poblacionales en general de nuestro país, y en lo particular de nuestro caso. Por ejemplo, ellos esconden la existencia  del modelo de la denominada Teoría de las Expectativas Racionales9 (que ellos sustentan), según la cual los agentes económicos conforman sus expectativas futuras en base a la inflación obtenida en el período anterior. Y en este caso, el gobierno no puede intervenir ni influir en los cambios de ritmo ni de rumbo de la inflación increscendo, como así tampoco no debe intervenir en frenar dicha inflación ni otras variables consideradas de decisión, como lo es la especulación descarada (o robo generalizado). Repetimos, ellos esconden aviesamente esto último. Así también, con el modelo de la Curva de Phillips (entre otros modelos afines) se determina que a períodos de alta inflación se corresponde períodos de bajo desempleo, esto es, de alto empleo. Y pues, de la misma manera en viceversa. Ahora, en la interpretación de este otro modelo, que es modelo económico de ellos, y que les conviene a ellos, ¿Qué es lo que ocultan malsanamente los dirigentes de la derecha golpista cuando confunden ajuste cambiario con devaluación? Pues, confundiendo ajuste cambiario con devaluación respecto a este otro modelo económico, atacan por mampuesto la política de empleo de nuestro gobierno bolivariano, a la que le achacan el desarrollo galopante de la inflación. Política de empleo que es y ha sido la más alta y eficaz para los trabajadores venezolanos, fuera de todos los gobiernos anteriores habidos en este nuestro país y en toda su historia. Por supuesto, con esto no estamos afirmando que vivimos en el paraíso del socialismo, sino, simplemente reconociendo lo que hay que reconocer.
Y el otro hecho que ellos esconden es que todos los sectores de las distintas ramas  productivas, del comercio al por mayor y al por menor y el transporte, como así los banqueros corruptos, corredores bolsas y gestores, todos ellos, agrupados en esa derecha criminal y mafiosa se aprovechan de esa maldada devaluación para esconder y acaparar la harina pan, la leche, el arroz, el azúcar, el aceite, el café, el pollo y la carne –en esto ya el CENDAS (Centro de Documentación de Análisis Social) anunció sobre precio de 15 y 22 por cada kilo sobre el regulado por el gobierno- y en fin, crean una escases de caos y anarquía,  de sedición, contra el gobierno. Y por el otro hacen sus jugosos negocios de bolsas y con el tráfico de las divisas a las que encaren en el mercado negro como dinero caro, y presionan aun más todavía para destapar su inflación violenta e imparable. Entonces, si en el sistema bursátil la tasa de inflación es el referente de la tasa de rendimiento de los capitales, ¿hay inocencia en admitir que el ajuste cambiario es lo mismo que la devaluación del bolívar, cuando ambos términos no son sinónimos? ¿No hay complicidad cuando se justifica por este medio un impulso de la tasa de los rendimientos de los capitales que les den jugosas ganancias a quienes, de alguna manera, están involucrados en el rendimiento de las grandes masas de capitales que plena la política de mercado abierto en Venezuela, no importa si se acelera la destrucción de los medios de vida de las grandes masas trabajadoras y pobres de nuestro país?   
Y así entonces, el tratamiento inopinado e inefable acerca de los conceptos y las categorías instrumentales económicas-monetarias por parte de nuestros técnicos y expertos del gobierno y de la izquierda en general, ha abierto de manera irresponsable un muy peligroso flanco por el que la batería enemiga del proceso revolucionario nos dispara a mansalva como gobierno. Y nos dispara el imperialismo invasor con sus propias armas económicas, esas que no sabemos manejar bajo las determinaciones significativas de sus conceptos y categorías. Y esta carencia nos crea pues un grave frente de fallas y debilidades ante un enemigo tan poderoso histórico al que no sabemos contestar. Porque además, ¡¡¡somos totalmente prisioneros de las ciencias económicas y sociales, centro neurálgico, nuclear, del poder de dominación capitalista mundial, su centro de poderosa inteligencia, y pues, de los expertos y economistas aguantadores del sistema¡¡¡.
Por consecuencias, la responsabilidad –moral, social, jurídica y ministerial- de todo el daño económico monetario que está sufriendo y agobia a las poblaciones trabajadoras y a los distintos estratos pobres de la sociedad venezolana con el deterioro de sus ingresos y niveles de vida con empobrecimiento acelerado, causados malsana y perversamente por la subida agiotista del dólar, con disparo desmedido de los precios de los alimentos y demás bienes necesarios con robo descarado de los propietarios privados de las industrias, el comercio y los negocios de esa derecha capitalista venezolana importadora, la tiene 100% el actual equipo que gobierna la dirección económica monetaria y financiera del país en los actuales momentos, como así los técnicos del PSUV que admitieron públicamente ante los medios de comunicación de masas, que “el ajuste cambiario es lo mismo que la devaluación”. Esta admisión pública irresponsable de los representantes del Banco Central y de los economistas del PSUV que declararon en los medios de comunicación –en momentos incluso en los que nuestro amado comandante Chávez se encontraba en agonía-, abrió el gran flanco de la traición por el que la derecha capitalista-golpista y criminal empezó atacar con eficacia y demolera confusión, agresión y violencia toda la política de nuestro gobierno y la misma organización estratégica política de nuestras fuerzas sobre el pueblo. Todo el extraordinario trabajo político social y de avances y desarrollos del proceso revolucionario que logró establecer magistralmente el presidente Chávez durante estos más de veinte años, ese equipo económico irresponsable –Banco Central, Ministerio de Economía y Finanzas y el de Planificación- un momento de pestañeo abrió compuertas maldadas a los criminales apátridas de la contrarrevolución y al imperio norteamericano-europeo para que con sus ataques perversos iniciaran su destrucción. Porque, en este sentido, ese equipo, en lo inmediato debió haber realizado una cadena nacional para explicar con todas las pertinencias científicas y de técnicas económicas las determinaciones de categorías y de conceptos con precisiones significativas que no dejaran lugar a dudas de nada y a nadie, y no lo hizo.
Honrosas menciones se merecen las del Vicepresidente Jorge Arreaza y del Canciller Elías Jauas quienes no siendo expertos en la materia, si dieron la cara en defensa consubstanciada de la verdad de esta medida. 



II.- JUNTO CON EL DESMONTAJE CRÍTICO DE LA ESTRUCTURA ECONÓMICA PRODUCTIVA, MONETARIA-FINANCIERA Y COMERCIAL EN SU FUNCIONALIDAD DE MERCADO CAPITALISTA, ES INMINENTEMENTE NECESARIO EL DISEÑO DE LA POLÍTICA ECONÓMICA REVOLUCIONARIA DE TRANSICIÓN AL SOCIALISMO.

1.- Y LA CONFUSIÓN SIGUE PALPABLE E IMPARABLE…

Por lo demás, esta parte de la crítica revolucionaria acerca de los aspectos económicos que ya hemos  esbozado, -tomando en cuenta el dolor que nos embarga a todos en esta hora aciaga por la desaparición de nuestro comandante presidente Chávez, y los nuevos rasgos que habrán de caracterizar en lo adelante la dinámica política de nuestro país sin esa su presencia tan determinante anti imperialista, precisa e impertérrita en sus objetivos de avanzar hacia el socialismo-, nos vamos a referir a aspectos y áreas de problemas fundamentales del proceso revolucionario que, a nuestro parecer,  hasta hoy no los hemos tratado con la profundidad, rigor y sistematicidad del conocimiento histórico revolucionario que ameritan.
Por ejemplo, hasta ahora no hemos tratado acerca de qué se trata la concepción de la revolución socialista, comunista. No hemos tratado con profundidad filosófica y con método propio acerca de cuáles son las bases de formalización epistemológicas del socialismo. No tenemos claro hasta hoy cuáles son los referentes de conocimientos históricos constructivos que sostienen las concepciones del socialismo. Incluso, no tenemos claro cuáles son los factores o determinantes históricos sociales que diferencia la fase de realización transformadora del socialismo respecto a la que corresponde a la del comunismo. Porque en todo caso, ¿La revolución socialista obedece o no a las determinaciones de una gran ley general del desarrollo combinado de las sociedades humanas sobre el planeta? ¿Sí o no?
Por lo demás, ¿Se vincula el proceso de la revolución socialista con las determinaciones del conocimiento científico histórico humano en desarrollo con el conocimiento de la Materia-Universo? ¿Sí o no? Por el contrario, ¿La revolución socialista obedece a las determinaciones ahistóricas absolutas prescritas por Dios en las Sagradas Escrituras, y que no ameritan la investigación científica esforzada de los pueblos sino sólo su ocurrencia divina?10
¿La revolución es solamente socialista y no comunista? Y así, ¿Cuál es el elemento fundamental de formalización epistemológica y científica, básica real, histórica, que define los términos de eminencia de socialización de todos los seres humanos y de las sociedades sobre el planeta, y que además, asegura, como producto mismo hecho por manos de los pueblos, el cuerpo social íntegro e indivisible de las sociedades eminentemente planificadas y sus armonizaciones en un portentoso sistemas de relaciones regidas por la humanización como valor supremo?
Repetimos, ¿Cuál es ese patrón de valor supremo de lo que sería la sociedad socialista y comunista? Patrón de supremo valor el que el movimiento revolucionario a escala nacional y mundial opondríamos contra y frente al capital. Y en este mismo sentido, cómo es, o sería posible de manera real, eficiente y efectiva, que los trabajadores se conviertan en sujetos históricos de las grandes transformaciones y cambios estructurales, motorizadores del paso esplendente del régimen capitalista a sociedad socialista? Más aún, en lo que es pertinente y propio de la revolución socialista-comunista, tres grandes instancias del conocimiento que dinamizan a las sociedades de nuestro tiempo: la política como hecho cultural dominante, la religión y las ciencias. La religión y la política, como bien se sabe, ambas se entremezclan con términos de gregarización ideológica disolvente de lo humano y metamorfosean a las ciencias en función del poder de dominación de clases, tal es el caso de las ciencias económicas y sociales, nuestra pregunta para este caso es: ¿Aceptamos a las ciencias del sistema capitalista, tal cual ellas han sido formalizadas, funcionan y operan en términos de la dominación, expoliación y explotación de los pueblos, asumiendo que con ellas, en términos de la política y la religión podemos avanzar hacia la realización de la revolución socialista? ¿Podemos imaginarnos que, alguna vez en los avances de la historia, con esos los valores de la religión católica con los que se han violado históricamente en estos últimos cinco siglos los derechos de miles de millones de habitantes de los cinco continentes de nuestro planeta tierra, incluso, cometiéndose matanzas masivas como lo hicieron aquí en nuestro antiguo continente de Abya Yala, y con esas mismas ciencias capitalistas, podríamos obtener valores de humanidad totalmente nuevos? Y por último, a fuerza de ser un imperativo histórico de los pueblos, ¿Es la revolución un proceso de eminente creación científica nueva? ¿Sí o no?
Por consecuencias, a nuestras alturas del presente de hoy, nosotros, América Libre y Socialista, consideramos que el hecho de no haberse tomado en cuenta todas estas reflexiones y meditaciones, que hemos señalado en las interrogantes anteriores –entre otras más que aquí no hemos mencionado-, y buscar respondérnosla con sentido expreso de precisiones mediante una teoría científica de la revolución que incluya al pueblo en muchedumbre como protagonista principal, nos ubica a todos los componentes del movimiento revolucionario-bolivariano de Venezuela en un ámbito y contexto general de fallas, omisiones y debilidades, frente al gigantesco aparato del sistema de conocimiento de dominación capitalista contemporáneo, y, por consecuencias, frente al inconmensurable poder del imperio norteamericano-europeo como cabezas del imperialismo mundial de todos los más potentes sistemas y medios de los conocimientos científicos, estamos respondiendo con un voluntarismo confuso, entremezclado de fanatismo ideológico y religioso que nos hunde en posición política dogmática y funcional, al estilo de la política diseñada por Maquiavelo en su obra “El Príncipe”: “…haga pues, el Príncipe lo necesario para vencer y mantener el Estado, y los medios que utilice siempre serán considerados honrados y alabados por todos”, lo que pues, luego se tradujo como “El fin justifica los medios”, cual se actúa en la política burguesa con disparidad (no comparable) entre unos y otros, de manera indistinguida.
A este respecto, nosotros, con términos epistemológicos precisos, no hemos determinado la ¡Distinción¡ de la política revolucionaria en Venezuela actual, en función de humanidad de los pueblos, como mecanismo técnico y científico de la revolución con respecto a la política capitalista, burguesa. Las grandes mayorías de jóvenes, adultos y ancianos que viven en los campos, los barrios de los pueblos y las grandes ciudades, y que no se ubican en ninguna parcialidad política, tan igual con los que tienen parcialidad política, actualmente no tienen los medios de conocimientos institucionales  para poder adquirir la conciencia fehaciente en qué elementos y factores de conocimiento históricos se diferencia la política del gobierno y movimiento revolucionario, frente al conocimiento (también histórico) del capitalismo en Venezuela y en general; y por consecuencias,    permanecen en el mismo estado de confusión y dogmatismo sembrado por la Iglesia Católica en el plan de la educación capitalista general. Plan sembrado en las poblaciones desde el proceso del colonialismo europeo hace quinientos años atrás a esta parte de hoy.  
Por supuesto, aclaramos de manera enfática que nosotros asumimos a este gobierno del presidente y comandante Chávez de siempre, y su equipo, nuestro. Por su intencionalidad de pueblo en lo humilde y modesto por favorecer a las grandes mayorías, este gobierno bolivariano y revolucionario es de América Libre y Socialista y del pueblo todo.  
 De allí que todos las determinaciones de esta crítica revolucionaria, en términos del Método General del Conocimiento Crítico Constructivo de Experimentación de la Revolución para la Búsqueda de la Verdad Científica, con su metodología específica para cada caso de “Las exploraciones Múltiples con Aproximaciones Sucesivas”, va dirigida hacia nosotros mismos, repetimos, –incluyéndonos América Libre y Socialista, para que apliquemos correctivos a nuestros grandes errores, fallas y omisiones a tiempo. Y por eso lo que vamos a exponer acerca de las confusiones y contradicciones que nos envuelven a todos, sin excepción, como lo veremos en lo que sigue, no es una crítica dirigida solo al gobierno, sino a todos nosotros.     
De allí que, otro signo indubitable de la gran confusión de los técnicos del gobierno bolivariano y del PSUV, es la aceptación dogmática de los mecanismos e instrumentos ideológicos y técnicos del conocimiento económico capitalista, fuera y aparte de lo real y eminentemente científico que viene planteando el movimiento revolucionario a partir del siglo XIX con la aparición de la magistral obra conjunta de Carlos Marx y Federico Engels, y, entre otros como Lenin en lo posterior. Y en medio de esta gran confusión –a más de rendir total pleitesía a las ciencias económicas-sociales y jurídicas burguesas- pretendemos sostener los términos estratégicos de la “Economía socialista” en plan de  “profundización de la revolución” con todos los términos de dicha ciencia económica capitalista keynesiana. Y entonces así se habla, hablamos,  en los predios del gobierno bolivariano del “poder Popular”, del “Estado Comunal”, del “Socialismo del Siglo XXI”, de la “Empresa Socialista” tal y cual, las que constante y flamantemente se inauguran; y pues, etc., etc.
Ahora, en esta fase del proceso no negamos que, cual parte inicial de las  transformaciones revolucionarias hay que utilizar dichos mecanismos económicos, no contamos con otros en primera fuente de referentes históricos, porque, en este sentido, todavía no se han construido. Pero hay que usarlos con previsiones estratégicas de la revolución, siempre buscando, con términos del aceleramiento de las investigaciones revolucionarias, descubrir e inventar los nuevos instrumentos y mecanismos teóricos e institucionales propios del proceso de la revolución socialista en marcha. Pero ya hablamos así de otra cosa.
Ahora, entre tanto, entre nosotros se acepta así el precio –como parámetro de valoración entrópica del valor del dinero y del producto del trabajo- y se acepta, de la misma manera el dinero-capital como intermediario e introductor del trabajo humano en la producción económica indirecta capitalista. Se acepta así entre nosotros el capital como factor y patrón supremo de valor económico de la sociedad y que la rige en su proyección histórica. Se acepta el salario y la ganancia, se acepta la contabilidad capitalista con todos sus andamiajes de control y de baremos con los que los capitalistas abren poderosos canales de succión, de transportación, y con ella trasladan el prodigio de la energía del trabajo humano hacia las grandes y gigantescas masas de sus capitales con crecimientos imparables.
En cuanto a la estructura jurídica del Estado capitalista venezolano, es patética la posición confusa de los cuadros y operadores políticos de nuestro partido de gobierno bolivariano –quienes menos que ayudar al presidente Chávez lo han distraído y quitado impulso inspirador en sus búsquedas audaces transformadoras profundas. En el plano del Derecho Constitucional y Comparado respecto a las transformaciones revolucionarias necesarias y suficientes que hay que hacer a fondo radical, han pretendido pasar del Estado de Derecho Constitucional liberal y de economía manchesteriana –con respuesta autoritaria, represiva y terrorista ante los reclamos de justicia por las poblaciones explotadas y desamparadas-, al Estado de Derecho Social del “capitalismo con rostro humano”, tal como se dio en Europa hasta el 2008. Así los estrategas del PSUV con los de más rango del gobierno no se dan cuenta que, en el orden jurídico de Derecho Social del Estado capitalista, la revalorización de la estrategia ética y moral política progresiva de este mismo Derecho Capitalista con sus funciones positivas de atención para prestaciones públicas de naturaleza social (prestación de viviendas, salud, educación, seguridad social y alimentaria, etc.), admite a su vez, la reducción y simplificación de ese mismo Derecho Social, su parte negativa de regular drásticamente la economía en términos de los valores del mercado y las funciones no sociales del gobierno, como un componente total de la democracia capitalista; que es exactamente lo que ha ocurrido en España, Francia, Inglaterra, Italia, Alemania, Grecia, Portugal y todos esos países que hoy han reinvertido el Derecho Social a Estado de Derecho. Es decir, de esos países que han pasado del neoliberalismo keynesiano al neoliberalismo manchesteriano, hayecksiano-fredmansiano.
Se aceptan entonces, aceptamos, como totalmente válidos todos los índices y mediciones estadísticas, tales como los coeficientes técnicos de los rendimientos sociales humanos y económicos, -los de equivalencias financieras, los de productividad del trabajo y de la empresa, los de índice de pobreza, etc., partes de los mecanismos contables-  y con ellos se pretenden determinar los resultados efectivos de la “economía socialista”. Se aceptan pues así, de manera absoluta y como verdad omnímoda del “socialismo del siglo XXI” –aunque contradictoriamente se les defenestren y se conjuren con todas las maldiciones del averno-, el cálculo económico capitalista y la “distribución justa y equitativa” de los bienes y riquezas entre los distintos sectores sociales mediante el mercado. Y en todo esto, también se acepta por trascorral la corrupción como mecanismo de apropiación de bienes de propiedad privada provenientes del Estado, al aceptar la objetividad de los mecanismos económicos. “¡¡Estamos mal pero vamos bien¡¡”, como dijo “brillantemente” un converso Iscariote otrora “revolucionario”.
Se asume así que, en materia del proceso de transformaciones y cambios estructurales, históricos, “todo está hecho” con los instrumentos y mecanismo económicos del capitalismo;
y que este “proceso revolucionario” es “irreversible”. Por consecuencias, lo único que falta es “hacer la revolución” y más naaa...

2.- PERO CON TODO, SE NOS PLANTEA LLEGAR A LA ESPLENDOROSA LUCIDEZ DEL PENSAMIENTO CIENTÍFICO REVOLUCIONARIO, PARA PODER AVANZAR CON EXTENSIÓN Y PROFUNDIDAD
Por tanto en esto, para ser honestos con nosotros mismos, incluyéndonos quienes esto escribimos como ya antes lo señalamos, la responsabilidad no es sólo del gobierno en la presencia de sus técnicos y operadores políticos, sino fundamentalmente del mismo movimiento revolucionario. Y en lo específico, de los partidos que han venido fungiendo como cabezas de dirección estratégica del movimiento revolucionario venezolano desde el siglo XX a esta parte de hoy. Hablamos en primer lugar del Partido Comunista de Venezuela como partido decano, el que ha faltado a esa su responsabilidad histórica del diseño de política estratégica grande y pues, así también, responsabilidad (o irresponsabilidad) del PSUV como partido de gobierno, conjuntamente con todos los demás partidos de la izquierda como el Movimiento Tupamaro, el MEP y otros, quienes no han podido (o no han querido) entender ni mucho menos comprender que nuestro proceso revolucionario en Venezuela se comprende y corresponde con el de la revolución humana mundial, como parte de ella misma en un poderoso complejo del conocimiento humano, que se remoza constantemente a través de siglos y milenios. No han podido entender nunca que LA REVOLUCIÓN es un proceso de suma emergencia del conocimiento, de urgencia de creación de ciencia nueva, cual prodigio de la más alta lucidez de la inteligencia humana. La revolución reclama histórica la invención y el descubrimiento científico nuevo para avanzar11.
La historia misma es la gran maestra que nos lo enseña. Fue a partir de la emergencia de la nueva ciencia griega del mundo antiguo con los científicos y poetas presocráticos y, en adelante, que culminaron con Platón y Aristóteles entre tantos otros luego, en el transcurso de varios siglos, que se pudo reunificar el gran cuerpo revolucionario de los trabajadores en condición de esclavos mediante la teoría de la revolución de su tiempo, y poder derribar el feroz y brutal imperio pagano del sistema esclavista, que duró entre seis a diez mil años. Y así sucesivamente ocurrió con el imperio feudal posterior y su fase intermediaria de la denominada era Moderna hasta llegar al capitalismo propiamente dicho. Todas estas revoluciones fueron caracterizadas por grandes fases de los desarrollos científicos que permitieron los poderosos avances de los pueblos contra el esclavismo.     
La revolución es, en plan de su gran teoría, un proceso de creación de nueva ciencia humana y de la vida constante. Es hoy, aquí y ahora, la invención y el descubrimiento de las nuevas determinaciones de valores filosóficos ontológicos del socialismo, en términos de la búsqueda de nuestro Ser-Humanidad en cada uno de nosotros, y, a su vez, la humanización del mundo en la universalidad de la vida sobre el planeta lo que es la revolución12.
Y estos son los valores supremos de la vida (referentes de conocimientos históricos) por y mediante los cuales partimos con potencia espiritual sentiente (plena de inteligencia) y hacedora. Y éstos a su vez se corresponden con sus fundamentaciones epistemológicas de objetivos internos, externos y transformacionales de ciencia, para las acciones concretas cotidianas, del día a día en la lucha de liberación e independencia contra las estructuras de poderes de dominación de clases a nivel mundial.
Acciones de combates que se cumplen, se tienen que cumplir, se realizan en campo de batalla concreta por y mediante su Método de Experimentación Científica Revolucionaria. La teoría de la revolución es, precisa y grandiosamente, eso: el más poderoso y esplendente combate entre sistemas de ideas, de inteligencias y mentes que miran y marchan en humanidad esplendente hacia el futuro, contra otras inteligencias y mentes que ven solamente hacia el pasado en el que tienen sus referentes de valores antiguos y remotos, el sistema esclavista. Mentes contra mentes en contraposiciones que se han enfrentado y que se enfrentan en el presente como una determinación histórica del desarrollo esplendente de humanidad de los pueblos para su liberación y desarrollos del conocimiento científico humano total, en relación con el conocimiento luminoso del movimiento del Universo: nueva cosmos-visión del mundo.
Y así en el terreno de la realidad concreta de la vida de nuestra nación hoy, al evaluar la estrategia  política dominante de la dirección del Estado y la sociedad venezolana en estos momentos, diseñada por el presidente Chávez con su proyecto político inicial del MBR-200 ya antes del 4 de febrero de 1992, no nos cabe duda que este fue y es un plan correcto. Correcto porque logró combinar con aplicaciones concretas el principio revolucionario de Unidad de Correlaciones entre Fuerzas sociales, Sectores y Estratos Políticos Distintos que se Integran con combinaciones de sus formas de luchas13; estructurando un gran movimiento cívico-militar que pudo nuclear a lo interno nacional un poderoso cuerpo orgánico del pueblo y tomar el poder del gobierno en nuestro país. Este Principio revolucionario se completa con el de Unidad y Complentariedad Revolucionaria entre Naciones;  pasando el movimiento revolucionario-pueblo de la Pre-fase histórica a la Fase Inicial de Pórtico de la revolución en la que nos encontramos. Pero esto que estamos afirmando aquí tenemos que esforzarnos en entenderlo con una forma de lógica más allá del razonamiento burgués. No aguas abajo sino aguas arriba, con determinaciones impertérritas del pensamiento científico revolucionario. 
Porque sin embargo, la estrategia política sola no le es suficiente al movimiento revolucionario-pueblo para avanzar y profundizar la revolución a las Fases de Transformaciones y Cambios subsiguientes, cual así la Ley de Transición al socialismo. En su dinámica cotidiana constante, sin la teoría táctica correspondiente que la acompañe, el discurso político revolucionario se agota y pierde su consistencia de orientación correcta. Por consecuencias, en lo nacional e internacional esta estrategia política bolivariana tiene que ser acompañada y sostenida por la teoría estratégica de la revolución socialista, en su expresión de nueva ciencia humana y de la vida. Aquí la determinación política como factor de movimiento de masas debe y tiene que concretarse con el conocimiento científico de la revolución socialista en su plan, también, de movimiento de masas. El pueblo masa es el que construye la revolución socialista pero, no obstante, tiene que hacerla con su propio conocimiento científico de humanidad, especialmente con determinaciones de ciencias económicas y sociales del socialismo y su gran método de experimentación científica general. Es condición básica previa. Empero, se plantea superar las ciencias y el método general del sistema capitalista14.
Y pues, como hasta ahora y por ahora, la aparición de la concepción científica de la revolución socialista no ha tenido lugar en el diseño de la política bolivariana, todas las medidas económicas y sociales diseñadas y aplicadas por nuestro gobierno bolivariano, dadas en el contexto del sistema capitalista y las formas de la lógica del razonamiento burgués, pues no cuentan con sostén y asidero de nueva lógica de las formas del razonamiento científico de la revolución a las que acudir y apelar para resolver la poderosa contradicción fundamental de la economía capitalista. No contamos con formalidades coherentes de conceptos y categorías de las ciencias de la revolución ni mucho menos contamos con las determinaciones del método general de experimentación científica transformacional de humanidad para aplicar los desmontajes de los valores e instituciones del Estado y la sociedad capitalista.  Se cae así en el vacío de la lógica “elenchi”, esto es, se intenta sustituir la tesis original del socialismo por aquello que nos parece igual. Apelamos a la ciencia económica keynesiana para contra ponerla a la teoría económica neoliberal; y con el instrumental de la economía keynesiana asumimos la ciencia económica socialista.  Y por ello, no logramos visar ni mucho menos vislumbrar las luces de situación hacia el puerto de arribo del socialismo científico como estadio histórico nuevo de la humanidad en Venezuela15.

3.- ¿Y QUÉ HAY QUE HACER ENTONCES?

3.1.- Desde el punto de vista de esta medida específica de ajuste cambiario, primero, el gobierno en la presencia de todos los organismos institucionales del Poder Ejecutivo tiene que instrumentar una política preventiva de combate a fondo contra todas las formas del acaparamiento y el ocultamiento doloso de bienes mercancías, la especulación, la estafa y el robo descarado mediante las alzas arbitrarias y perversas de los sistemas de precios de los bienes alimenticios y de todos aquellos necesarios para el mantenimiento de la vida diaria de las poblaciones; todo ello justificado con “la Devaluación”.
A los efecto, la distribución de los divisas debe responder a una programación eficiente del recurso monetario destinado a la compra internacional a tiempo justo y exacto, de acuerdo con las necesidades que requieran cubrir las distintas industrias y empresas de las diversificadas ramas de la producción, el comercio y la población en general. Hay que romper el contenido económico de la escases como fuente generadora básica de los ingresos monetarios de esos sectores parasitarios del capitalismo venezolano.
El gobierno en pleno tiene que activar todos los medios y dispositivos jurídicos-legales –como por ejemplo, la ley de Contraloría Social- con sus organismos de ejecuciones respectivas para controlar con la Ley de Salarios, Costos y Precios Justos todos los sistemas de precios en las distintas ramas de producción, distribución y comercio al por menor y por mayor. 
Toda esta movilización tiene que estar acompañada a nivel nacional con un plan de información  y formación del conocimiento crítico constructivo sobre todos los instrumentos y mecanismos técnicos de la economía capitalista, para que las poblaciones cobren conciencia sobre las enormes contradicciones que contienen y, la vez, en cada campo se acostumbren a manejar esas dichas contradicciones en términos de problemas complejos –susceptibles de ser resueltos en el tiempo con los medios y recursos adecuados- para, en últimos términos resolverlos, en términos de transformaciones revolucionarias, de cambios estructurales, históricos.
3.2.- De la misma manera, el PSUV conjuntamente con todos los demás partidos y organizaciones sociales del movimiento revolucionario tienen que acompañar al gobierno en los mismos cometidos no sólo de frenar y parar la inflación desenfrenada con el alza de precios como mecanismos de la ganancia, concentración y expansión exponencial de las más grandes masas de capitales nacionales y transnacionales a lo interno de nuestro país, si no de ir implementando políticas que busquen eliminarlos de raíz a través del tiempo, como parámetros de aniquilamiento histórico del valor del trabajo humano total.
Esta eliminación de raíz del precio como factor económico de depredación capitalista, es una de las condiciones fundamentales para demoler uno de los cimientos valorativos y estructurales más importantes y pernicioso histórico de la economía capitalista contra el valor del trabajo humano total. De manera que así toda esta motivación conjunta de avance del movimiento revolucionario-pueblo en el conocimiento de la economía capitalista, nos puede servir a la vez como un modo de utilizar el mismo conocimiento de la economía capitalista para movilizar masiva y estratégicamente al pueblo en muchedumbre, para desmantelarla. La ciencia económica y social presente, de este sistema burgués, es la concepción fundamental de poder de todo el sistema capitalista universal. Y toda la estructura económica en sus determinaciones científicas de montajes de las más altas tecnologías  es el mecanismo de realización de su poder.     
Y así entonces, todas las medidas en estos aspectos, -dadas y vistas para desmontar y desarmar los montajes institucionales del Estado y la estructura económica y social capitalista- tienen que contener su determinación estratégica revolucionaria para afrontar de manera axiomatizada y experimental el proceso de Transición hacia el socialismo, aplicando todos aquellos términos del conocimiento del sistema capitalista mismo en su plan de desmonte.     
3.3.- Y desde el punto de la conformación de la estrategia grande y portentosa de la revolución en nuestro país, lo primero que tiene que hacer el movimiento revolucionario-pueblo y gobierno bolivariano es tomar conciencia plena de que este súper complejo enfrentamiento histórico contra las estructuras de poderes de dominación imperialista norteamericano-europeo, constituye a su vez, el enfrentamiento mismo contra el más gigantesco y poderoso aparato del Sistema del Conocimiento y la Realidad contemporáneo que jamás haya existido. Este extraordinario enfrentamiento se manifiesta en todos los contenidos mismos del lenguaje y el habla en todas sus formas y tipos dentro de la comunicación universal, planetaria; empezando por el lenguaje de las ciencias económicas, sociales y jurídicas que imponen su dominación mental mediante la educación sobre las poblaciones en los cinco continentes del planeta. Y por eso, la gran teoría de la revolución humana universal tiene que emerger en su construcción popular con determinaciones de nueva ciencia humana y de la vida, en función de humanidad total de los pueblos sobre la faz de la tierra. Esta es una determinación histórica que tiene que tener muy en cuenta el movimiento revolucionario nuestro en general.
3.4.- Tomando en cuenta lo anterior, abordar con urgencia la necesidad impostergable de la reorganización y la reunificación del movimiento revolucionario nacional en nuestro país es la tarea más prioritaria que tenemos que afrontar. Esta reorganización, recomposición y reunificación estructural de todas las fuerzas y factores revolucionarios en Venezuela debe y tiene que ser sobre la base intencional de conformar una dirección colectiva horizontal y transversalizada de un grande y solo cuerpo de la revolución como órgano político superior nacional, que obedezca a las determinaciones de una gran línea estratégica de orientaciones múltiples de todos los factores políticos y sociales componentes. Lo colectivo de su dirección, junto con su horizontalidad y transversalidad añadidas además a la línea estratégica de orientaciones múltiples para su conformación inicial, deben garantizar en lo mínimo la unidad de la estructura institucional del movimiento revolucionario para seguir adelante en la gigantesca tarea de construir las nuevas ciencias humanas y de la vida como ciencias del socialismo científico. Esta proposición la hicimos del conocimiento público a partir de abril del año pasado, 15/04/2012, mediante un documento que denominamos “PLAN ESTRATÉGICO GENERAL PARA EL DESARROLLO DEL PROCESO DE TRANSICIÓN DEL ESTADO Y LA SOCIEDAD CAPITALISTA VENEZOLANA A ESTADO SOCIALISTA”
Por lo demás, -si tomamos en cuenta que, a raíz del derrumbamiento de la ex Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), todos los partidos comunistas y el movimiento revolucionario desaparecieron en Europa y así en casi todos los continentes de nuestro planeta- esta reorganización y reunificación del movimiento revolucionario de Venezuela, bajo los términos del internacionalismo y el principio de complementariedad revolucionaria entre naciones, tiene que ser acompañada por la reorganización y reunificación de los distintos movimientos revolucionarios de los países de América continental incluidos los de los Estados Unidos y Canadá, y los de los demás continentes del mundo.
3.5.- La gran línea de orientaciones múltiples que se logre diseñar, tiene que contener como su núcleo fundamental la Planificación Estratégica de la Revolución como mecanismo natural de su funcionalidad y Operacionalidad en sus articulaciones con el pueblo masa, en plan metodológico organizacional coherente de los distintos componentes del movimiento revolucionario.
3.6.- La gran línea política del gobierno bolivariano dada en el Programa de Gobierno de la Patria, tiene que ser sostenida y reforzada con la forja en vivo de la gran teoría de la revolución socialista. Y tiene que coincidir y encajar con la reorganización y reunificación del movimiento revolucionario nacional en plan científico del movimiento de masas y, pues también, tiene que ser acompañado con la reorganización del movimiento revolucionario de América Continental y los de los demás continentes del planeta: África, Asia, Europa y Australia-Oceanía en lo más que se pueda. El movimiento revolucionario de Venezuela tiene que esplender, regar a viva voz, esta proposición a los demás movimientos revolucionarios y populares del mundo. Es una oportunidad histórica única.
3.7.- El Programa de Gobierno de la Patria tiene que ser abordado mediante un gran análisis nacional con el tiempo necesario para su más completo afinamiento teórico-práctico, en plan de la teoría de la revolución socialista que permita ser internalizado en los distintos estratos sociales componentes del pueblo, para movilizarlos con y mediante epistemología de la revolución.
Además, la gran riqueza y diversidad conceptual de los cinco grandes Objetivos Históricos que contiene este extraordinario Plan, más que Programa, reclaman su ubicación obligada dentro de las dimensiones sistemáticas del Método General de Experimentación Científica de Humanidad de la Revolución Socialista Venezolana. El que hemos propuesto en el Plan Estratégico General para el Desarrollo del Proceso de Transición del Estado y la Sociedad Capitalista a Socialista en Venezuela.
De acuerdo con nuestras investigaciones sobre la creatividad, invención y descubrimiento científico revolucionario, la Dimensión Sistemática del Método de Experimentación Científica de Humanidad contiene  los Principios siguientes:
      1) Factor referencial del conocimiento crítico constructivo
      2) Evolución y desarrollo de humanidad por transformación Social y Humanización
      3) Problematización del Conocimiento: Unidad de la Realidad y el Conocimiento
 (Unificación de las Ciencias y Dinámica                Transformacional  del Lenguaje humano total)
      4) Masividad tiempo espacial humana respecto al Crecimiento Poblacional
      5) Problematización de la Economía Contemporánea y el Problema Múltiple de la
          Economía Socialista
      6) Avance al Nuevo Estadio Histórico de la Humanidad: El Socialismo Científico 
En el in situ de cada una de las ciencias de la revolución, el primer principio es problemático, de problematización de los nuevos rumbos ontológicos y antropológicos de los sistemas de conocimientos contemporáneos en los que se incluyen la revolución del lenguaje, habla y comunicación, cual así los términos que orientan las facultades mentales para las nuevas formas de apariciones del pensamiento en la cosmos-visión de metódica de pie universal de pensamiento de humanidad, respecto a la transcendencia de la racionalidad del pensamiento contemporáneo en pasa de moral religiosa a moral cósmica, del Conocimiento de Universo.
El segundo principio patentiza la acción de la  gran ley del desarrollo de humanidad de los pueblos en su plan de humanización del mundo. Su manifestación se determina en un pase de transubstanciaciones del pensamiento humano a estado transformacional estructural permanente de las leyes sociales, con categoría del paso de valores primarios a secundarios, esto es, transición permanente de las virtudes y actitudes primarias individuales naturales a los ideales colectivos de la naturaleza humana.
El tercer principio, define el proceso de problematización como hecho práctico eminente del conocimiento de la revolución manifestado por la ley de Transición al SocialismoI4. Conocimiento de la revolución el que se manifiesta en las cualidades científicas del trabajo humano total, y con cuyas manifestaciones la conciencia se desarrolla en función del desarrollo del conocimiento científico de humanidad de los pueblos.
El cuarto principio, contiene la prevención del crecimiento familiar como un hecho de problematización de todo el nuevo sistema del conocimiento de la sociedad total en términos metacientíficos, que es consubstancial a la humanidad en expansión de todos los pueblos del mundo como una sola y única familia sobre la faz del planeta y el sistema solar.
Quinto Principio: Problematización de las leyes de la Producción Económica Capitalista.
 Esto es, transformación de la Economía Capitalista Indirecta a Economía Directa Socialista, por Reconversión de sus Objetos Epistemológicos Internos, Externos y Transformacionales.
La sexta determinación de principios del método científico general de la ciencia revolucionaria, es la marcha hacia el Nuevo Estadio Histórico de la Humanidad: El Socialismo Científico.
Mediante ésta, el carácter de la revolución humana reconoce y comprende ciclos de transformaciones previas a los cambios estructurales que se profundizan por fases de transformaciones en algunos espacios nacionales primero y luego se extienden a otros para luego profundizarse transversalizadamente en los distintos espacios nacionales.
Por último, necesario es pues, inapelablemente, imbricar todas las determinaciones del Plan de la Patria en estas seis dimensiones sistemáticas del método científico general de experimentación de la revolución para poder llegar a pensarse en superar el gran método general funcional de las contradicciones y vida agonística del sistema capitalista. ¿Le ponemos el cascabel al gato? ¿Sí o no?.

3.8.-  Proponemos al gobierno nacional, al presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Sr. Nicolás Maduro Moros, crear el “CONSEJO ECONÓMICO NACIONAL REVOLUCIONARIO DE TRANSICIÓN AL SOCIALISMO DE VENEZUELA”.
Las funciones básicas y fundamentales de este Consejo Económico Nacional serían:
1)      Determinación de las acciones y actos estructurales epistemológicos de la revolución socialista, en plan de investigaciones y estudios correspondientes a las nuevas formas en materia de reorganización económica experimental de transformaciones estructurales, para abordar el establecimiento de la nueva estructura económica de producción de transición –agrícola y agropecuaria, industrias distintas y diferenciadas por ramas y sectores- de Venezuela en función de satisfacer las necesidades totales de la población, y en plan del establecimiento de la nueva economía de humanidad del pueblo.
2)      Las previsiones proyectadas, mediante sistemas de simulaciones y computacionales, para avanzar con transformaciones graduales del sistema económico capitalista actual,  previendo y promoviendo las nuevas proyecciones planificadas en los programas de producción diversificadas y de distribución entre los distintos estratos y sectores sociales para avanzar a los cambios definitivos de economía socialista, con nuevas relaciones de producción y la correspondencia de esa nuevas relaciones de producción con las fuerzas productivas de Venezuela.
3)      La determinación experimental del nuevo sistema monetario y financiero sobre la base de nuevas relaciones de equivalencias monetarias, sostenido por la conformación de la nueva estructura de valor del producto del trabajo. Establecimiento de un nuevo valor económico óptimo referencial, distinto al precio, y con eliminación del precio como parámetro de valoración del producto del trabajo humano y de los bienes.
4)      Previsiones sobre el establecimiento del nuevo cálculo económico socialista, diametralmente distinto al cálculo económico capitalista de siempre y actual. Se comprende: a) Acerca de la nueva estructura económica de valor real, con eliminación gradual y por etapas del valor nominal definido por el precio. Eliminación gradual del precio como factor de valoración económica productiva, comercial y contable. b) Acerca del paso de la producción capitalista al establecimiento de la producción socialista. c) Acerca del paso de la distribución capitalista por el mercado a la forma de distribución socialista con eliminación gradual del mercado. d) Acerca de los Fondos Económicos de Reservas y Previsión Social Socialista entre los Distintos Sectores y Estratos de la Población. e) Acerca del nuevo carácter de los coeficientes técnicos de medición del producto económico y social en sus distintos aspectos y relaciones entre sus modalidades, etc.  
5)      Previsiones sobre el establecimiento de la nueva contabilidad socialista.
6)      Crear las zonas de organización y coordinaciones económicas productivas  transformacionales experimentales integradas.
7)      Crear las zonas de organización y coordinación estratégicas de producción general experimental integradas.
8)      Crear las zonas de organización y coordinación económicas productivas experimental específicas.
9)      Las nuevas formas y tipos de los planes y presupuestos experimentales de la Nación:
a)      Mensuales. b) Trimestrales, c) Anuales, d) Sexto anuales, etc.
10)   Determinación del carácter de la Ley de Transición hacia el Socialismo.
Tanto la estructura orgánica como así la funcional y operativa de este Consejo Económico Nacional Revolucionario de Transición al Socialismo tiene que estar conformada por las expresiones de todos los distintos estratos y sectores políticos sociales y culturales del pueblo masa de Venezuela, sin distingo ni restricciones de ningún tipo. 

                ¡¡¡PATRIA SOCIALISTA Y VIDA¡¡¡     ¡¡¡VIVA CHÁVEZ POR SIEMPRE¡¡¡    ¡ VENCEREMOS¡¡¡
     
 Por AMÉRICA LIBRE Y SOCIALISTA:

                                                               Pablo R. Carvajal R.                                                                                          
                                                             Coordinado General 
                                  

           Iván Carbajal Torres                                                         Gabriel D. Yánez I
Coord. Equipos de Investigación y         Coord. Educación y Pedagogía Revolucionaria y
Estudios Económicos de Transición.  

  
                                                                Diana Carbajal Torres
                                                   Coord. Relaciones Internacionales y
                                        Responsable de América Libre y Socialista en Europa

                

                                                                      Isora Irala B.                                                                                                                                                                                                                                                                               
                                      Coord. Medios y Comunicación Revolucionaria 


         

                                                            Caracas, febrero de 2013








                                                                     Notas del Texto
1)      Lo ya dicho, el “PRECIO” nació, como “Valor de Mercado”, lo establecieron los sacerdotes de la religión pagana, esclavista, tomando por norma la escases y la carencia total, como una lábil forma de despojar a los campesinos y al resto de las poblaciones supuestamente libres de una gran porción del producto de su trabajo. Las poblaciones libres, por ser de la misma nacionalidad del rey y de los sacerdotes, frente al rey-dios  eran  súbditas del mismo; sin embargo, los sacerdotes, amos de la religión y el templo, éstos a su vez eran los verdaderos amos del poder del Estado y de la sociedad, porque ellos eran los que nombraban al rey y lo investían del don de ser Dios, amo de todo lo existente. Así, mientras a los esclavos pertenecientes a los pueblos invadidos y vencidos –por no ser de la misma nacionalidad del rey y los sacerdotes- éstos no tenían ningún derecho a disponer sobre el producto de su trabajo ni de sus mismas vidas. Y no obstante los que eran libres se les despropiaba leoninamente cuando habían escaseces de gran parte del producto de su trabajo de esa forma –dado que tenían que llevar parte de sus productos al templo-, mediante el precio; a más que, de lo que les quedaba, tenían que pagar el 33% por óbolos y derecho a entrar al templo y adorar la imagen del dios-rey, y otro 33% al Estado por impuesto. De esta manera, utilizando la escases, la carencia total de las cosas necesarias a la vida, a la larga de los siglos y de los milenios, el precio (forma disimulada del robo) mediante intercambio con la equivalencia del dinero con los bienes, fue impuesto como factor económico. Este es el origen de la famosa Ley de la Oferta y la Demanda. Ver   “El Trabajo en los Estados Antiguos”, Paul Salgari y Saúl Sauneron, ediciones Aguilar, México 1976.
2)       “Los movimientos del capital siempre ejercen influencia, cambiando la distribución temporal de las posibilidades de gastos en áreas que exportan y áreas que importan. Si no existen distorsiones, el capital se moverá a fin de reducir las diferencias de tasas de retorno y, por lo tanto fluirá desde los centros donde las tasas de interés sean bajas, a aquéllos donde sean altas. Estos movimientos de capital siempre aumentarán el poder de compra en los centros que tomen prestado (prestatarios) a expensa de los centros que prestan (prestamistas), creando así los medios para que los prestatarios gasten más que su ingreso y la necesidad para que los prestamistas gasten menos que su ingreso. El resultado es que en los centros prestamistas las exportaciones deben exceder a las importaciones y en los centros prestatarios las importaciones exceden a las exportaciones, dando lugar a un superávit en la balanza comercial de los primeros y a un déficit en la balanza comercial de los segundos”. Robert Mundell, DIECISEIS ENFOQUES AL ANÁLISIS DEL BALANCE DE PAGOS, Instituto Interamericano de Mercados de Capital, Caracas-Venezuela, 1981.
El hecho es que esta es una ley –derivada de la gran ley de existencia económica del sistema capitalista la de la Oferta y la Demanda, la que Marx denominó “Ley de la Miseria Creciente contra las Poblaciones”-: la Ley de Relaciones de Desigualdad y de Dependencia Económica y Comercial de los países de la periferia a los centros financieros. Esta ley a su vez se cumple por otra ley de regularidad interna: la de la Especulación de los Capitales Agiotistas, Nacional e Internacional. Esta ley del robo se esconde en “la famosa liquidez del mercado de capitales” y en la que hacen su agosto los “jobber” y los brokers”. Por cierto, J.M. Keynes trató de manera crítica (a su modo) este problema del “valor líquido” del mercado como “fetichismo de la liquidez”  en su Teoría General de la Ocupación, el Interés y el Dinero.  Hecho este sumamente complejo e importante que tenemos que tener muy en cuenta respecto al comportamiento de nuestra inflación nacional con subida de precios imparables y afectación negativa de los niveles de ingresos y de vida de los y las trabajadoras y del pueblo pobre en general, en la que se suma e interviene el famoso mercado paralelo de divisas (compra y venta) como una constante inflacionaria de doble flujo de la vida capitalista interna nacional.

3)      Los distintos modelos económicos forjados por economistas y expertos del capitalismo, históricamente disfrazan y esconden todo esto con su lenguaje abstruso y abstracto de tecnemas artificiosos. Por ejemplo, es el caso del modelo de R. Dornbusch con su “Resultado Dornbusch” en macro economía, en el que asienta su análisis en lo que él denomina “la sobrerreacción del tipo de cambio nominal frente a una perturbación económica-monetaria cualquiera”. Y así tantísimos otros en los que pues, sus procesos de análisis de los ajustes cambiarios los simplifican a partir de los efectos de cambios esperados en los precios (relativos), en relación a la distribución no prevista de los bienes denominados no transables (productos-mercancías) respecto a la tasa de interés implícita en los capitales invertidos a los efectos para bienes transables (papeles negociables). En esto importa señalar que ninguno de esos modelos, sus análisis no les interesa la incidencia de la política cambiaria sobre la tasa de interés real de capital que determina la depreciación constante de la moneda nacional. Ese es el gran meollo de la contradicción capitalista, implícita en las mismas leyes económicas básicas, porque ellos se enfrentan a otro de los grandes meollos contenidos en la devaluación de la moneda, y que es, para poder realizarla como ellos establecen, tienen que hacer grandes reducciones de los salarios de los trabajadores en su totalidad. Y por eso ellos consideran de por sí, que el ajuste del tipo de cambio contiene implícito y ya de suyo, la reducción de los salarios. Ver “Predicción de Inflación con Modelos de Serie de Tiempos Múltiples” P. Marshall, Tesis de Magister Escolatina, Universidad de Chile, 1984.   
4)      Este concepto o principio de precios de transferencia constituye un complejo de denotaciones lábiles en su definición que se presta a las mil y unas manipulaciones por parte de los grandes y poderosos monopolios de capitales transnacionales. Primero, tiene su origen en el hecho de las disminuciones de los ingresos del Estado norteamericano por la salida (transferencia) de capitales de su jurisdicción en “beneficio” de otros países. De tal manera que en 1935 en la Sección 482 del Código de Impuestos Internos de los Estados Unidos se establece la denominación de “Precio de Mercado Abierto” como primera aproximación de precios de transferencia. En segundo lugar, esta determinación de principio toca al estatuto jurídico y político en los que se mueven los grandes propietarios privados de los capitales de altas magnitudes e intensidades en el plano mundial. Toda vez que, previamente antes que el producto sale al mercado, son las empresas de producción las que fijan los precios, esta determinación tiene que ver con los estatutos jurídicos y políticos de la definición de los trusts, carteles y holdings con los que juegan sus propietarios privados con su poder monopolizador personal, en cuanto a sus dominios de fijar los precios de monopolios en las empresas transnacionales que controlan: Sociedades controladas y Sociedades Vinculadas fuera y aparte de las sociedades independientes, entre otras clasificaciones jurídicas de las distintas zonas económicas comerciales. 
5)      “Cuando consideramos el valor a partir de las relaciones de equivalencia entre el producto del trabajo respecto al del dinero –que fue el tipo de valor que Marx conoció- en la función incremental  de tiempo (t) de la relación de valor económico (x) respecto a valor monetario (y), primero el movimiento del tiempo incremental productivo (ti) es igual a la relación directamente proporcional del movimiento de valor mercancía respecto al movimiento de valor del dinero monetario. Esto es, si hay crecimiento de la producción de mercancías entonces, también hay crecimiento de los ingresos monetarios, determinados en valores reales. Sin embargo, en el complejo de la formación del valor de la moneda (signo monetario) a partir del cono monetario por el precio cual determinante de “valor de mercado”, como de común se da hoy, dentro del contenido de la moneda se produce un cambio violento de inversión del punto de referencia de formación del valor-trabajo al de valor-precio. Este es un choque entre dos tipos de valores que pasa impalpable a ojos vista, pero en el que se impone la determinante del precio de ayer para hoy y la del precio de hoy para mañana, concentrada en el plano nacional con dominancia del plano mundial, que desgarra el valor real de la moneda nacional con su ley de Corriente Interna de Precios Múltiples o que denominan comúnmente: Ley de Costos Crecientes, descubierta por Adam Smith. Aquí sobre la base de la escases en términos de precio cambia geométricamente la dirección de formación del valor a precio como constituido de la moneda; formación que produce a su vez la escases sobre la base de la escases”. VIDA O MUERTE, La Gran Disyuntiva de la Humanidad Frente al Sistema Capitalista, (obra inédita y en impresión), Pablo Carvajal, Caracas, 2011.
Milton Fredman en La Libertad de Elegir, refiriéndose al tabaco como un bien del más alto valor monetario, fue validado como dinero en las relaciones de intercambio en los Estados Unidos mediado el siglo XVII, plantea que “el dinero en términos de bien atenta contra el bien en términos de dinero”. Esto es, el tabaco producido por los hacendados ricos, considerado el mejor, éste era destinado a la exportación hacia Inglaterra. Y por el otro, el tabaco de los productores pobres no podía ser exportado por prohibición de la legislatura. Así el primer tabaco constituía dinero en términos de bien y pues, “dinero bueno”, válido para las gentes ricas que compraban en Europa, y el segundo era catalogado como bien en términos de dinero, y para todo caso, “dinero malo”, sólo válido para las gentes pobres, lugareñas, que compraban en los comercios locales. De allí entonces la ley: el dinero en términos bien (tabaco bueno) se impone y “atenta” contra el bien (tabaco malo) en términos de dinero. Esto tiene más bemoles ocultos en su diapasón, los que no son nuestros objetos tocar ahora. Sin embargo, no hay que dejar por alto que “El sistema de abastecimiento agroalimentario en Venezuela se ha venido estructurando de conformidad con la concentración del consumo de la población localizada en los principales centros urbanos y ha estado influenciado, en gran medida, por el patrón internacional de abastecimiento debido al alto grado de dependencia de las importaciones de materias primas agroalimentarias”. Agroindustria y Comercialización de Bienes Agroalimentarios en Venezuela. Prof. Agustín Morales Espinoza, Facultad Agronomía UCV, Maracay, octubre 2004 –agosto 2oo8. Dependemos pues en lo productivo y comercial interno, estricta y determinantemente, de los vaivenes del mercado internacional. Página 4 de nuestro texto.

6)      Este término de moneda “sobre valorada” o de “sobre valuación” de la moneda en nuestro caso, tiene hoy una connotación distinta a la del siglo XIX. La sobre valuación del bolívar de hoy fue un término que reacuñó un experto del FMI quien estuvo aquí en Venezuela mediados los años ochenta de apellido Merhav -no recuerdo ahora su nombre, pero lo conocí personalmente. Su significación monetaria estaba asociada al dólar petrolero. El argumento de fondo era que, primero, en el caso de aquellos países no desarrollados, los Estados quienes recibían dólares por sus exportaciones petroleras obtenían un poder de compra mucho mayor y superior que aquellos otros que, por un lado también se encontraban en estado de menores desarrollos y por el otro, para el caso de aquellos que habían alcanzado su desarrollo industrial sobre la base de sus avances científicos y tecnológicos productos del trabajo histórico, en ambos casos ese poder del dólar petrolero otorgaba a la moneda nacional en cuestión una sobre valoración o poder de compra en el mercado internacional que no le correspondía en relación a los que sí les correspondía de manera natural. De ello, esta apropiación “indebida” de poder de compra del dólar petrolero digamos así, creaba en el ámbito internacional una competencia desleal frente a los demás países. Segundo, puesto que el precio del petróleo se determina en el mercado internacional por un precio que excede muchas veces más que la cuantía de sus costos de producción, el ingreso petrolero nacional al ser el diferencial entre el precio internacional y sus costos de producción más el de capital, este peso de ingresos define en el área de América un excedido poder de compra internacional. Y por tanto, frente a las demás cestas de mercancías en oferta del mercado internacional, la moneda sobre valuada, en nuestro caso el bolívar, ésta crea una presión al alza de los sistemas de precios en general de la zona internacional. De allí que había que aplicar sistemáticamente medidas correctivas a la moneda sobre valuada, dado el flujo constante del dólar petrolero a dichos países exportadores. Propuso dicho técnico, entre otras medidas realizar minidevaluaciones periódicas y sistemáticas, las que se denominaron el crawling peak, que sé yo, algo así. En este caso, aquí en Venezuela bajo el segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez se empezó aplicar los crawling peak, y luego, con el gobierno de Rafael Caldera se eliminó dicha disposición. Y para todo caso, tal como lo conceptúan los economistas aún hoy, la “sobrevaluación” (eufemística) del bolívar es una determinación de valor entrópica (imposturada) dada por irreversibilidad por inversión: por cada unidad de valor del bolívar que se supone, se tienen realmente dos unidades de su depreciación que las grandes masas poblacionales tienen que pagar con subida de precio en iguales términos proporcionales, a favor de la expansión monetaria de los capitales.  
7)      Por lo dicho en la nota No 3, “En contrario al tiempo productivo –que es con el que se produce el valor real de todos los bienes- al intervenir el valor subjetivo precio (teoría económica del “Valor Subjetivo”), como término de la revalorización de la unidad monetaria en su relación con el rendimiento de los capitales de bolsas, cual otra forma de dinero, es realmente el cuerpo vacío de la moneda que se obtiene en su “valor” nominal, resultado de una relación inversamente proporcional entre el producto del trabajo y el dinero. Se tiene así: mientras más crece la masa por el precio y/p, la cualidad del valor de los bienes es menor, decrece, y, por consecuencias, el incremento del tiempo productivo se hace negativo en la cuantitavidad incremental del dinero”. Este es uno  de los principios internos de las leyes de existencia de la economía capitalista: Ley de Estabesco Monetario Financiero. VIDA O MUERTE… pág. 282.
8)      Este hecho del papel de encubridores con su patina de lenguaje técnico de todas las formas del robo y el saqueo económico y comercial capitalista que hacen los economistas y expertos neoliberales, lo podemos apreciar claramente en el libro El Efecto Transferencia (pass-through) del Tipo de Cambio sobre los Precios en Latinoamérica, Omar A. Mendoza Lugo, Banco Central de Venezuela, octubre del 202.
9)       Teoría de las Expectativas Racionales  John F. Muth, Robert Lucas y otros (Escuela de Chicago). Los agentes económicos conforman sus expectativas tomando en consideración toda la información que poseen en el momento de la decisión, no solo tomando en consideración el valor pasado de las variables de decisión (inflación-desempleo-empleo o salario). Este hecho determina que, por un lado, los agentes aciertan en sus previsiones, y, por el otro, el gobierno no puede modificar el valor de las variables reales en corto plazo.
  Esto es, según esta otra teoría, dichos agentes elaboran sus expectativas en base a la inflación observada en el periodo anterior, por tanto, la relación entre las tasas de paro e inflación no es directa –como lo asevera la Curva de Phillips-, y por el contrario, depende solamente de cuál fue la inflación del período anterior. Y en este caso el gobierno no puede influir en los cambios de rumbo de la inflación (o de otra variable considerada de decisión como la especulación) con sus políticas dirigidas a frenarla.
En el caso de la teoría de la Curva de Phillips, se determina que a períodos de alta inflación se corresponde a períodos de bajo desempleo, esto es, de alto empleo. Y pues, de la misma manera en viceversa.

10)  Lamentable para el movimiento revolucionario venezolano que se subsuma así mismo en ese remoto contexto de lo inefablemente místico del mundo antiguo, en el que han convertido la “revolución” y “el socialismo” en un dogma  metafísico –con eso de que “El pueblo no entiende cosas muy complejas y hay que formarlo, enseñarlo ideológicamente para la revolución”-, revolución sin ninguna substancia posible de ser realizable como teoría que emerge del conocimiento humano, de las gentes y de los pueblos mismos, que son los que han construido y construyen históricamente todo el prodigioso acervo del conocimiento científico de humanidad de las sociedades en todos los tiempos.
Los partidos políticos que se asumen revolucionarios y marxistas-leninistas, como los ya nombrados, con sus dogmáticas posiciones ideológicas caen en el mismo contexto racional capitalista del principio de “Deshumanización Sistemática Estructurada Histórica” con sus mecanismos de análisis inductivos de “la Desmoralización Sistemática, el Miedo, Terror y el Espanto” y el de “Embrutecimiento Sistemático” que no intentan romper y destruir las formas de la lógica del razonamiento capitalista por miedo a enfrentar los desarrollos del conocimiento científico revolucionario. Y lo que es peor, toda la izquierda revolucionaria ha hecho como suyos conceptos y categorías de las clases aristocrática, pertenecientes a las antiguas cortes de los reyes-dioses.
Así la categoría y concepto  de Ideología como “ciencia de las ideas”, no tiene absolutamente ninguna significación determinada en el conocimiento ontológico y de eminencia científica de la revolución. Este es un término que expresa valores del pensamiento metafísico de las clases aristocráticas y burguesas. Contiene dentro de sí una lógica muy específica de las formas del razonamiento capitalista con la que manejan las ciencias y la cultura; y esa lógica del razonamiento burgués-aristocrático, en su esencia ontológica, la toman para sí, de manera inopinada, los partidos revolucionarios que hablan de “Formación Ideológica del pueblo”, refiriéndose pues, a la formación del conocimiento de la revolución socialista, comunista. Mayor absurdo no cabe en una forma de racionalidad política de superficie y de esterilizada impasibilidad. Hay una abismal insensibilidad en esto de la investigación revolucionaria en nuestro país y en general, que nos hunde fatalmente en la lógica del capitalismo.  

11)  Carlos Marx en su obra “Prefacio a la Contribución a la Crítica de la Economía Política” de 1859, formuló los términos de una ley general sobre la extraordinaria dinámica histórica de las sociedades en sus desarrollos y avances,  formulación que nos permite deducirla como Gran Ley del Desarrollo de Humanidad de las Sociedades. En el contexto de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas a esta ley la denominaron “Ley de las Relaciones entre las Fuerzas Productivas y las Relaciones de Producción”. Sin embargo, nosotros por considerar esta denominación significativa muy simplificada y, además, reducida y limitada únicamente dentro del marco de lo meramente económico,  la hemos denominado Ley General de Correlaciones Múltiples del Desarrollo de Humanidad de los Pueblos. Determinado el trabajo humano como actividad eminente del conocimiento, caracteriza esta ley universal –con todos sus principios básicos determinativos y su gran método de experimentación general- tentativamente, todos los términos de la gran revolución humana universal, bajo términos tendientes de la correspondencia de las relaciones de producción con las fuerzas productivas, de manera armónica en que todo miembro de la sociedad sin excepción sea protegido por ésta.
Los rasgos fundamentales de esta ley, así como sus principios junto con su método general, los intentamos reformular en Vida o Muerte…, y un resumen de esta ley la exponemos en el Plan Estratégico General para el Desarrollo del Proceso de Transición de la Sociedad y el Estado Capitalista Venezolano al Socialismo, ya de conocimiento público.   

12)  Principio de Unidad de Correlación y de combinación de formas de lucha entre Fuerzas (Estratos y Sectores) Sociales y Políticos Distintos y de Complementariedad Revolucionaria entre naciones. Este principio lo sugiere primero Carlos Marx en sus análisis sobre los acontecimientos que se desarrollaron en Francia y que produjeron la toma de la Bastilla y la conformación posterior del procesa de la revolución. De la misma manera Marx analiza las respuestas que dio el pueblo español con la diversidad de sus estratos sociales unificados contra la invasión de Napoleón a ese país, y las caracteriza con rango superior de efectividad al que dio el propio ejército con sus estrategias militares. También Lenin, analiza la coherencia de las acciones realizadas por los distintos sectores y estratos sociales del pueblo ruso en los acontecimientos de 1905 y durante el subsiguiente proceso de la lucha revolucionaria que derribó la dictadura zarista.
Esta es una de las leyes derivadas de la gran Ley de Correlaciones múltiples de los Desarrollos Históricos de Humanidad de las Sociedades. El carácter básico de este principio es la unidad, coherencia y empatía entre los componentes de los distintos estratos sociales, cuando la sociedad alcanza un nivel suficiente de madurez de conciencia política y comprende la necesidad de los cambios históricos, estructurales, del orden jurídico, político, educativo y científico cultural-religioso, y se lanzan con sus distintas y hasta disímiles formas de luchas, combinándolas hacia el logro de sus máximos objetivos y metas históricas de transformaciones revolucionarias.

13)  Dentro del contenido estratégico fundamental del proceso revolución socialista, se comprende la problematización de todas las contradicciones básicas del sistema capitalista. Esta problematización en grande es la de llevar al plano de las soluciones coherente todos los problemas que aquejan a la vida de los pueblos en general bajo este presente régimen de deshumanización sistemática. Y puesto que, por su método general de realización de la vida, el sistema capitalista funciona y opera por ley de contradicciones dogmáticas y de vida agonística con la que se ha moldeado el comportamiento moral y ético del ser humano en lo profundo del alma con la violencia y la guerra –caso de la gran pelea a muerte entre Dios y el Diablo por las almas de los hombres. Así, mediante el método funcional de las contradicciones y vida agonística todo hecho y cosa entre las relaciones sociales deshumanizadas, sólo se resuelve mediante la agresión y la violencia y, en último término, en los campos de la guerra. Por esas razones, en todas las determinaciones prácticas del hacer la vida, en su plan filosófico-ontológico profundo de su cosmos-visión de la vida y el mundo, las estructuras de poderes de dominación de clases, mundial en los términos del imperialismo norteamericano-europeo, todos los grandes y graves problemas los revuelve por la guerra de depredación y aniquilamiento sistemático, que es lo ha ocurrido siempre y está ocurriendo hoy. Así las relaciones entre el capital y el trabajo relaciones de depredación del trabajo por el capital. Esta depredación y aniquilamiento sistemático del valor del trabajo humano en lo mental y espiritual, caracteriza una de los principios de la gran ley de existencia del sistema capitalista: el de “La Deshumanización Sistemática Estructurada histórica”, en la que las ciencias del capital, las ciencias económicas y sociales, tienen su papel determinante. Esto es, el sistema de conocimiento de dominación de clases metamorfosea el conocimiento en su plan científico creado por el trabajo humano total y lo destruye en su base de creación eminente de ciencia humana: el trabajo en la presencia humana hombre-mujer.  
Y, en contrario, por esas razones, dentro de la concepción científica de la revolución socialista se contiene la superación necesaria y suficiente de todos los contenidos de valores dogmáticos y agonísticos de las ciencias convencionales del sistema capitalista, como así también superar su gran método general de aplicaciones prácticas del conocimiento de la vida común y cotidiana, incluido el de la religión católica en su plan de ciencia del espíritu.
De allí entonces que, dentro de los contenidos de la gran Ley de Correlaciones Múltiples del Desarrollo de Humanidad de las Sociedades, se contiene y comprende como su segundo principio (ley básica) el de “Identificación Unipotente del Amor humano del Conocimiento”. Por este principio del conocimiento humano en su extensión filogenética, la filialidad material y espiritual empática entre los componentes de nuestra especie se conjuga, mediante el conocimiento de la realidad universal, con la filialidad filogenética de las demás especies del gran género de lo vivo. Y por eso, el amor que predican los componentes del movimiento revolucionario es un amor que nace de las entrañas primigenias de la más alta sensibilidad de la inteligencia humana, basada en el Conocimiento de la materia-Universo en todas sus especies y así misma.  

14)  El punto referencial de conocimiento histórico al respecto, al que el movimiento revolucionario en su totalidad de hoy tiene que remitirse obligatoriamente a estudiar en sus fallas y errores fundamentales, es lo ocurrido con la experiencia fallida de la ex Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Tenemos que examinar muy detenida y detalladamente cuáles fueron los factores de causas medulares por los que ese extraordinario experimento histórico de la  revolución se derrumbó tan abrupta e irremediablemente. Hay que centrarse en las causas de errores de conocimientos históricos para enmendarlos y corregirlos con previsiones científicas respecto a nuestro proceso revolucionario en Venezuela.

15)  De nuestra parte, hemos intentado caracterizar los rasgos básicos o modalidades que adquiere la lucha revolucionaria de los pueblos por su liberación, independencia y por las transformaciones y cambios propios de la revolución socialista en su devenir histórico. Por ejemplo, en nuestro país hemos caracterizado todo este proceso de las luchas que arrancaron primitiva o primariamente con nuestros ancestros aborígenes contra la invasión del imperio español a este continente de Abya Yala. Y de allí se continuó entre otros, con el de la independencia encabezada por nuestros libertadores y, pues, en adelante hasta llegar a 1998 con la toma del gobierno del Estado en su término capitalista por el liderazgo del presidente Hugo Chávez. De manera que, desde las luchas de resistencia y de liberación encabezada por nuestros ancestros aborígenes, hasta 1998 a este largo y extraordinario proceso de combates y de luchas lo hemos caracterizado y denominado PREFASE DE LIBERACIÓN E INDEPENDENCIA DE LOS PUEBLOS. Y de allí en marcha, en lo que va de curso en estos últimos catorce años y en adelante si no cae nuestro proceso revolucionario, lo hemos denominado: FASE PRELIMINAR DE PÓRTICO O ENTRADA AL SOCIALISMO. Este proceso de Fases Transformacionales y de Cambios Estructurales e Históricos, en supuestos, es regido por la Ley de Transición al Socialismo, a condición del establecimiento de nuevas relaciones económicas y sociales paradigmáticas – y que previamente estaban en ausencia luego, se van haciendo presentes de manera gradual-, y que caracterizan dicha transición.  Este fue el caso, por supuesto con características distintas,  que se dio en la revolución en Rusia –la que como sabemos se derrumbó porque no se previó las determinaciones y efectos de esta ley de Transición con sus principios y otras. Y  que se vive en  Cuba, como así en China (dudosamente), en  Viet Nam y en otras naciones, y cuyas Fases de avances tienen que considerarse, como proceso determinantes históricos de avance de las sociedades, dentro y  con normas revolucionarias de transformaciones previas en términos de la Ley de Transición al Socialismo.
Y respecto pues, a nuestro proceso en Venezuela, consideramos que nos encontramos en La Fase de Entrada Inicial o de Pórtico al Socialismo. Fase en la que rige la Ley de Transición, la que todavía no hemos definido. Nos falta pues, con las determinaciones precisa de la Ley de Transición al Socialismo, avanzar hacia la Fase de Definición de Objetivos del Socialismo Científico.

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